9 de Junio del 2018, 13:00pm
Al despertar lo primero que hago es fijarme la hora, al ver que son la una de la tarde salgo de la cama y voy al baño, me doy una ducha rápida, me visto con una falda negra y decoración en blanco, una remera negra de manga tres cuarto y botas de tacón, me coloco un collar con el dije de una pluma y los lentes de sol, tomo mi celular y salgo de mi cuarto, bajó las escaleras hasta la cocina.
Al llegar a la cocina veo a Javi sentado esperando a que Sara le sirva la comida, Sara está preparando la bandeja donde esta la comida que tiene que llevar al comedor, donde estan los chicos, me acerco por detrás de Javi, dado que me da la espalda.
-¿Por que no me despertaron?- pregunto junto a su oído,lo cual genera que se sobresalte.
-Porque estabas dormida, y lo único que ganamos cuando estas despierta son lios, problemas, peleas o cosas rotas, pero cuando estas de mal humor son todas a la vez- responde Javi
-No desayune, lo que muy bien sabes me pone de mal humor, Javi, mi cómplice Javi, dime una razón para no destruir la casa-
Se levanta de su asiento, me mira enojado y responde
-Esta vez de no seré parte de tu mal comportamiento jovencita, ya estás grande para romper las cosas cada vez que no te dan lo que quieres, no puedes seguir rompiendo todo por un simple capricho, ya no tienes cinco años para hacer ese tipo de cosas y pedirme que sea tu cómplice, desde ahora cada vez que rompas algo y me pidas ayuda para solucionarlo le diré a tu padre y que sea él quien me de la orden de ayudarte o que lo hagas tu misma- es la primera vez que Javi me habla de esa forma, esta vez no es una broma, lo puedo ver en sus ojos, sin decir nada salgo de la cocina y voy al comedor
Al estar en la puerta del comedor veo que mi padre está sentado en la cabecera de la mesa con su celular sin prestar atención a nadien más como siempre, Daniel, Dimitri, Alexander, están sentados uno al lado del otro del lado izquierdo de mi padre, a su derecha se encontraban Liam y Adam, solo quedaba un lugar que era entre mi padre y Adam, tomó asiento en el único lugar que queda sin decir nada; al entrar dejaron de hablar y me miraron como si fuese la primera vez que lo hacen.
La conversación entre ellos continúa, mientras mi padre sigue con el celular y yo distraída, como es que no nota que su hija después de cinco años está sentada junto a él, dentro de todo no me sorprende, pero igual me duele, me decepciona que no lo aga.
Sara entra al comedor con la bandeja en mano y la apoya en el centro de la mesa, comienza a servirles a todos, cuando es mi turno me mira pero yo no hago nada más que agachar la cabeza, cual niña regañada.
-Provecho- dicen todos al mismo tiempo, menos mi padre.
Enojada por su mal comportamiento en la mesa frente a sus invitados, le arrebató el celular de entre las manos y lo arrojó contra la pared que está detrás de él.
ESTÁS LEYENDO
El último adiós
RomanceEmilie despues de cinco años decide revelar su más grande y mejor guardado secreto, tomando esta decisión luego de enterarse que la cuenta regresiva comenzó y el tiempo corre. cada segundo cuenta