Nosotros los que escupimos miasma bajo la luz de la luna y que con la pluma retratamos tormentos.
Nosotros los faltos de belleza pero abundantes en males, los coleccionadores de lagrimas con sangre.
Nosotros a los que las tripas chillan y la carroña espera ansiosa por roer sus huesos, los que somos hijos del putrefacto estiércol.
Si, nostros los ausentes en las nominas de alto rango pero con presencia primordial de los muertos y desaparecidos, los protagonistas de las noticias de tu tele diario.
Los que hemos dejado de ser hombres para ser cosas, aquellos a los que se les expropio el nombre para poseer un numero.
Los que se pudren en carceles por robar un pan para sus hijos, los desheredados, los habitantes de la tierra de el "no eres nadie".
Los que rosamos los labios de la muerte después se entrar al baile de fuego, los niños de ojos rojos que los acogen verdes matorrales.
Los que aprenden a usar un arma antes de saber utilizar un lápiz, nosotros los que con recelo caminamos por estrecho sendero de la vida.
Los dueños de nada pero deudores del todo, la escoria de la humanidad.
Nosotros los que con incontables derrotas pagamos las conquistas de los de saco y corbata.
Aquellos de los que la policía se sirve en lugar de servirle a estos ellos.
Si, nosotros los mal vividos, los malparidos, los que somos hijos de este sistema agonizante.
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desde el borde de la herida a lo profundo de mi alma
PoetryAlgunos de mis principales intentos de poemas.