¿Otra oportunidad?

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~Pov Jimin~

Si bien, mi relación con Taehyung, era bastante reciente no podría decir que iba mal. Tae era sin duda, un chico realmente cariñoso, que me quería, me cuidaba, siempre estaba conmigo, y lo mejor de todo, es que cada día mis sentimientos hacía él, iban en aumento. Sé muy bien, que mis sentimientos hacía Namjoon no iban a desaparecer de la noche a la mañana, y menos con todo lo que me había hecho, pero si podía decir que de a poco iban disminuyendo hasta llegar al punto de decir, que tenía aprecio hacía su persona pero nada más.

Conocer aquella parte de Namjoon, al decirle que íbamos a ser padres cuando él no lo deseaba, creo que fue una gran decisión ya que si no lo hubiese conocido en ese instante, probablemente me hubiese llevado decepciones más grandes en un futuro próximo. Después de todo, yo también por una parte lo entendía, somos solo unos niños que apenas logran cuidarse solos para cuidar de otro ser viviente y mucho más, si éste es un bebé. Como bien dije, lo entendía por una parte pero por otra, no. Tenía frente a mis ojos la clara imagen de que si se podía cuidar a un bebé siendo solo adolescentes, además de esperarlo con mucho amor. Siempre había pensado que Namjoon era mucho más maduro que Yoongi y Hoseok, pero al ver la llegada de un problema y una responsabilidad tan grande, como lo era tener un bebé, decidió huir mientras que mis amigos se hicieron cargo de lo que habían hecho, e iban a esperar con mucho deseo la llegada de ese bebé. Me dolía reconocer, pero debía hacerlo, los celos que a veces me provocaban los dos al ser tan maduros con todo lo que les sucedía, especialmente Hobi, que le perdonó a Yoongi su infidelidad por el bien de su bebé pero más me dolía ver el amor que aún sentían el uno por el otro, amor que me fue claro que Namjoon no sentía por mí al dejarme solo con nuestro bebé, el que gracias a todo lo bueno del mundo, no existía y no vendría a sufrir a este mundo aún.

Al igual que Hoseok los últimos días estaba más solo, debido a que Taehyung, al igual que Yoongi, se graduaría pronto, por lo que debía poner la mayor atención a sus clases y rendir de la mejor manera sus examenes finales para poder así, entrar a la universidad a estudiar danza como tan lo deseaba. Esperaba que el siguiente año, al igual que mi novio, pudiera entrar a estudiar a la universidad canto o alguna otra profesión, debía pensarlo muy bien pero aún tenía tiempo para hacerlo.

Como frecuentaba los últimos días con Hobi, caminé en dirección a la cafetería al ser la hora del almuerzo, pero esta vez solo debido a que Yoongi fue a buscar a mi amigo al baño, por su demora, rogándome que me fuera primero y que luego ellos me alcanzarían para almorzar todos juntos. Sabía que Yoongi no deseaba demorarme aún más pero por mi parte, no había problema en esperarlos más, sin embargo, no deseaba interrumpirlos y convertirme en un mal tercio si deseaban hablar cosas que solo a ellos les influyera o, a su pequeña, la que pronto llegaría a este mundo. Mi cuerpo cayó algo derrotado sobre la silla, mientras mi cabeza se apoyaba sobre mis brazos, los que descansaban sobre aquella amplia mesa. De a poco, las noches de insomnio iban causando estragos en mi cuerpo, lo que era ocasionado en un 70% por las responsabilidades que debía cumplir en el instituto, mientras que el otro 30%, lo podría aludir a mis problemas sentimentales y emocionales, a los que últimamente me encontraba expuesto. Mis ojos se cerraron más que exhaustos, los chicos demoraban más de lo esperado y de a poco el sueño comenzaba a invadirme.

Al sentir algo demasiado frío en mi cuello, abrí los ojos asustado, mirando a mi alrededor. Por lo visto, solo habían pasado algunos minutos, ya que las mismas personas que estaban sentadas en las mesas siguientes, se encontraban ahora comiendo. Todo parecía estar igual, a excepción de un pequeño peluche de hámster que reposaba frente a mí, sobre la mesa con una nota adherida.

"Te espero en las mesas del patio trasero, junto al gran árbol. No demores."

Una gran sonrisa me invadió al ver aquella nota, por lo que me levanté con rapidez, tomando mis cosas y aquel pequeño peluche, para casi correr hacia el lugar indicado. Extrañaba demasiado a Tae, demasiado, necesitaba verlo con la mayor urgencia posible.

-Ya llegué. -Dije más que agitado, mientras me acercaba a aquel chico que me daba la espalda, cubriendo su cuerpo con una chaqueta.- Te he extrañado tanto. Realmente demasiado ¿Por qué no me haz despertado?

-Y yo a ti, Chimchim. No tienes idea de cuanto te he extrañado. -Mi boca se abrió de sobremanera al escuchar aquella voz.- Necesito hablar contigo, por favor no te vayas. Te lo ruego.

-Namjoon, yo no... -Me voltee para marcharme pero él me lo impidió.- No tengo nada de que hablar contigo. Debes entenderlo de una vez.

-No es cierto. Debemos hablar de nuestro hijo, de que cómo lo educaremos y como trataremos de arreglar lo nuestro.

-Namjoon, eres un cínico. Ya basta de tratar de arreglar lo nuestro, esta todo muerto, tú lo mataste con todo lo que hiciste. Deja de ser tan empedernido con todo, yo ya no soy el mismo chico que se dejaba pasar a llevar por ti, no me dejaré nunca más humillar ¿Entendiste?

-No te quiero humillar Jimin, solo he comprendido que te amo demasiado para perderte a ti y a nuestro pequeño. Seremos una familia feliz ¿No lo entiendes? Solo dame una última oportunidad, por favor...

-Quiero demasiado a Taehyung como para hacerle esto. Él es todo lo que necesito y deseo en mi vida, él es todo lo que yo creí que tú eras Namjoon. Aún no puedo creer todo lo que nos hiciste, yo realmente creí que eras diferente Namjoon. -Dije con un poco de resentimiento, estaba herido, realmente herido.-

-Esta bien eso, si no deseas volver conmigo no importa pero debemos ver el bien de nuestro hijo Jimin, sabes que no podrás solo y mucho menos con ese novio que tienes. Él no tiene nada, no te puede ayudar como yo puedo hacerlo, además, es mi derecho. No puedes olvidar eso. -La voz de Namjoon cada instante sonaba más agitada, haciéndolo parecer muy desesperado.-

-No Namjoon, nuestro hijo... Nuestro hijo nunca existió. Si tan solo me hubieses acompañado al médico, o siquiera, hubieses esperado un poco antes de querer desligarte de nosotros, te hubieses dado cuenta de que no lo estaba. Quizás, tan solo quizás, nada de esto hubiese pasado. Ahora, estaríamos buscando nuestros trajes para ir a la graduación juntos, estaríamos ansiosos de irnos a vivir juntos y compartir una vida de pareja, hubieses entrado a la universidad y en un año más, yo hubiese ido a la misma. Como tú muchas veces lo mencionaste, en un futuro no tan lejano, nos hubiésemos casado para seguir con una vida larga y feliz, como siempre lo soñamos. Estaríamos en una relación larga y duradera, que se basaría en mentiras y en tus inseguridades. Después de todo, te lo agradezco, porque aunque me partiste el alma en mil pedazos, me diste a conocer a la verdadera persona que eres.

-Jimin... Perdóname, yo te amo de verdad... -Vi como su cuerpo cayó de rodillas al piso, mientras se oían fuertemente sus sollozos. Lo quería como nunca iba a querer a alguien en el mundo, pero mi amor por él ya no existía, ni iba a volver a existir.-

-Lo siento pero aún no estoy listo para hacerlo.

Todos en la vida debemos dar a veces "vuelta a la página", aunque realmente nos duela en el alma. Este era mi momento para hacerlo, lo que no significaba que en un futuro no pudiera nuevamente ser amigo de aquel chico que se encontraba llorando frente a mí, desconsoladamente. Significaba, que yo había madurado y comenzaría a tomar mejores decisiones desde hoy en adelante, para no caer nuevamente en los mismos errores. 

Yoonie estoy... (Yoonseok)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora