Mi amada es mía y yo soy suyo.

Capítulo 9. Tenia miedo de perderte.

Nick:

Sacaron a todos los lobos de la casa, algunos en las camillas de las ambulancias debido a las heridas que tenían, cabe señalar que el lobo blanco de nombre Erick fue llevado a tratamientos intensivos, y por lo que alcance a escuchar no podría volver procrear y que dependiendo del trabajo medico, quizá perdería la capacidad de tener erecciones por el disparo que le di.

el medico que me estaba atendiendo me estaba vendando el pecho, al parecer una de mis costillas había sido astillada por el disparo que recibí en mi chaleco antibalas, también coloco una bandas en la cortada que tenia en la cara con mi ultimo enfrentamiento.

Yo no podía alejar mi mirada de Judy, quien estaba sido atendida enfrente de mi, estaba mucho mejor pero tenia un derrame en su ojo, y uno moretones en sus costilla. La imagen de ella siendo agarrada por su oreja, esa adrenalina por ver como la golpeaban y verla en el piso, tener que ver como le apuntaban con el arma. volví a tener ese escalofrío que bajo sobre mi espada, ese hielo en mi pecho al imaginarme mi vida sin ella, de terminar solo.

Por otro lado, Finnick, le atendieron los servicios médicos pero al primer descuido se fue, y era obvio que lo aria, no quiere nada que ver con la policia, así que no lo vería un un tiempo.

— De mi parte seria todo oficial Wilde, es un oficial muy habil. - me dijo la pequeña nutria que me atendió.

— No lo suficiente, de lo contrario esto no seria un desastre.

— Ella esta bien.

— ¿De que habla?

— No a apartado la vista de la coneja gris, ella estará bien, pero usted esta pasando por un alto libido, acá entre nos, usted esta en una modalidad sensorial.

— ¿Que me quiere decir?

— No se haga el que no sabe, la modalidad sensorial es algo que los macho tenemos de manera muy interna pero la expresamos con actos extraños.

— No le mentire doctor, ya llegue a mis 5 niveles, si no fuera porque se me a bajado la adrenalina estaría como loco.

— Lose, pero, no quiero ser indiscreto pero porque no lo a tratado como es debido.

— Tengo a una maravillosa chica, la quiero mucho, pero aun no sabe lo que yo siento.

— Ya veo, tenga. — me puse rojo en cuanto note que me estaba dando unos condones, los tome enseguida y los escondí.

— ¿como es que usted tiene esto aquí?

— Oh, créame, atendemos tantas cosas extrañas, recuerde que en Zootopia pasa de todo, ahora fuera de aquí, ya sabe que debe hacer, y por favor diviértase, después de lo de hoy se lo merece.

Salí de la ambulancia, me acerque a Judy, ella estaba aun un poco asustada, su medico ya había terminado de revisarla.

Judy:

El medico me dijo que todo estaba bien pero aun sentía ese miedo, si no hubiera sido por Nick las cosas se hubiera salido de control y esto seria mas una escena del crimen.

Nick se acerco a mi, no tenia la playera, sus brazos era hermosos, Nick es muy atractivo, quizas sea el miedo o por todo lo que había pasado pero admito lo que sento, Nick es guapo y me encanta su pelaje, y verlo de esa manera, vendado, resaltando su color rojizo entre la nieve de Tundratonw y verlo ponerse su camisa me hizo sentir bien verlo con bien.

Sentí como algo bajo por mi estomago hasta mi vientre, sentí mi cuerpo hervir, me lleve las manos y las meto entre mis piernas, Nick debió de confundirse y pensar que tenia frío ya que me abrazo y su cola me rodeo, deje caer mi cabeza sobre el, y ahí estuvimos los dos, viendo como los demás oficiales limpiaban, examinaban y levantaban un su reporte y testimonios le los vecinos. fue hasta que bogo rompió la burbuja de silencio que ambos estábamos admirando.