«Capítulo 10»

912 79 45
                                    

-Toma esto. -le dijo el de la bolsa a Demencia sacando un puñal del bolsillo.  -

-Gracias. -tomó el puñal y le sonrió con dulzura. -

Camino hacia donde estaba el intercambio de puños e insultos, sabía que un puñal no iba a hacer gran diferencia pero, peor era que fuera a enfrentarse con ellos sin nada más que sus puños y unas buenas arañadas, y al lado de esos imponentes y altos hombres eso era casi nada.

Ya había tenido que separar a estos villanos en fiestas anteriores, realmente tienen algo especial para siempre pelear cuando están en el mismo lugar.

-¡Ya perras delicadas! -exclamo poniéndose en medio de ellos, lo cual no es una muy buena idea. - ¡Laven su ropa sucia en sus casas! -exclamo de nuevo clavando el puñal en el pecho de uno de ellos. -

El hombre apenas sintió la sangre brotar de su pecho se enfureció y le dio una patada en el estómago a la chica haciendo que retroceda y se tome el estómago casi de inmediato.

-¡¿Ahora quien es la perra delicada?! -dijo burlesco aquel hombre riéndose del dolor que le había provocado a la chica. -

Sentía un dolor punzante en todo su abdomen en ese momento sintió el toque de Flug en sus hombros.

Black Hat estaba no tan lejos viéndolo todo, si tenía sospechas de sus dos subordinados este era el momento adecuado para aclararlas.

La bicolor con ayuda del de la bolsa se enderezó y vio con odio a ese hombre.

Se soltó del agarre de su pareja y se abalanzó hacia aquel hombre, tomo el puñal de su pecho con fuerza y lo sacó bruscamente.

-¡Yo no soy una perra delicada! -le respondió en un tono psicótico con una sonrisa maléfica y aterradora dibujada en su rostro. -

Le enterró y saco el puñal frenéticamente causando que el hombre perdiera el equilibrio y cayera al suelo.

Flug miraba la escena y pensaba en como nunca provocar a la chica en contra suya, en ese momento sentía miedo hacía ella.

-Y tú, -se dirigió al híbrido de pantera y humano que se había estado peleando con el otro hombre. - ¿También crees que soy una perra delicada? -le preguntó levantándose del cuerpo apuñalado e inconsciente del villano que la había golpeado poniéndose justo en frente de él y poniendo el puñal cerca de su garganta en modo de amenaza. -

El solo cabeceo un no.

La chica se dirigió a donde Flug y lo abrazo cansada y adolorida.

Él le correspondió y sintió una humedad hacerse presente en su hombro, la chica estaba llorando y escuchaba leves quejidos de parte de la joven.

-Apenas terminé esto te voy a chequear, por ahora quedate conmigo en el bar. -le susurro y ella asintió un si. -

-Que siga el espectáculo. -se escuchó la voz de su jefe cerca de ellos. -

Flug alzó la mirada y lo vio frente a él.

-Ve y atiende el bar, inútil. -le ordenó y desapareció. -

El chico cargo a la joven y se dirigió al bar y la sentó en una silla cerca de él.

En medio de su dolor, la joven cayó en los brazos de morfeo, en medio de todo el ruido y el alboroto del lugar sus ojos se cerraron y su respiración era lenta y calma.

Flug atendió el bar hasta al menos las dos de la mañana.

Estaba cansado pero, a la vez moría por saber si ese hombre logró dañar al bebé, sabía que para Demencia eso era lo mas importante que tenía, a el también le importaba pero, nunca de la misma manera que a la chica.

Cerro el lugar y le pidió a 5.0.5 que limpiará el lugar sin su ayuda por que realmente necesitaba ir al laboratorio.

El celeste le cabeceo un sí.

Tomó a la chica en brazos y se fue al laboratorio.

Era tarde y los pasillos de la inmensa mansión estaban oscuros.

-Éstas pesada. -comentó el científico mientras la cargaba. -

A como pudo entro al laboratorio y acostó a la joven en una camilla que tenía.

Era robada si es lo que se preguntan.

Notaba que su respiración era pausada, como si le costará hacerlo.

Tomo unas tijeras y corto el vestido y luego corto la faja que escondía el pequeño bulto que crecía en el vientre de la chica, al quitar las prendas notó que su vientre tenia un tono morado y de entre sus piernas se podía ver como escurría sangre, era poca pero, eso no disminuía la preocupación del rubio.

Presionó levemente el golpe que tenía la chica, sí bien, Flug no era ese tipo de doctor, tenía conocimientos de medicina por qué...

Por que no le quedo de otra con su jefe esclavista que no deja que sus empleados vayan a un hospital o que sean supervisados por doctores externos, así que saco una licencia de medicina y farmacia por internet.

Presionó el golpe para poder ver si aun con ese golpe había la pequeña posibilidad que al bebé no le pasará nada.

-No, ahí no. -se quejó la chica despertando por el dolor que le causaba el roce de pieles en el golpe. -

El científico se quitó la bolsa y se acercó a ella.

-Vas a tener que aguantar.

Ella arrugo el ceño mientras se encogía de piernas tratando de esconder el golpe.

-Duele mucho. -le respondió. - Y, a parte ¿Que hago son ropa? Eres un cochino.

El científico retorció los ojos por sus comentario.

-Haber, baja las piernas. -le ordenó mientras trataba de ver si podía bajar las piernas de la chica por si solo. -

-No, Flug. -dijo pero, estaba tan cansada y adolorida que al final cedió al forcejeo de Flug. -

-Solo es por unos segundos, debo saber si podrás tener al bebé o si, pasó algo malo.

-Solo por eso, te dejaré.

El rubio comenzó a presionar y por mas que lo hacía no podía sentir nada, en el tiempo que lleva Demencia de embarazada debería de sentir algo en su vientre.

La chica se retorcía del dolor, no soportaba lo que sentía.

El científico dejo de presionar y la respuesta era obvia, Demencia había perdido el bebé por el golpe, eso explicaría la sangre y es de imaginar que en donde fue la pelea hubo mas pero, al estar oscuro y con poca luz no se noto.

Una cara frustrada y triste se hizo presente en él.

¿Como diablos se lo diría a Demencia?

-¿Que pasa, Flug? -preguntó ella al ver la cara del rubio al dejar de tocarla. -

Cómplices ⚪ DemenflugDonde viven las historias. Descúbrelo ahora