«Capítulo 11»

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-Demencia, me temo que tengo malas noticias. -le dijo casi en susurro, se sentía muy mal por su descubrimiento. -

La chica comenzó a sudar frío, ¿Podría ser que su mayor miedo se ha hecho realidad?

Para ella era preferible que la matarán a ella a que le hicieran algo al pedazito de persona que cargaba.

-No, no, no, -negaba, no quería creer que todo el esfuerzo por esconder esto y planear como todo se daría se había ido gracias a esa pelea. - eso no, Flug.

-Perdoname, -le pidió mientras tomaba la mano de la chica. - yo debí de protegerte. -se podía escuchar en su voz una tristeza inmensa, realmente deseaba haber hecho algo para evitar esto. -

Él odiaba verla así, él quería que ella fuera feliz aunque eso pudiera traerle consecuencias.

-¡Este es el peor día de mi vida! -exclamó y rompió en llanto. -

Era en vano intentar consolarla, sus ojos era un grifo que los abrazos y las palabras dulces de Flug no podían cerrar.

Ella se aferraba al rubio como si eso le devolvería su embarazo y todo volvería ser como hace unas horas.

-Dem, -llamó su atención el científico y se separaron un poco. - le diré a Black Hat que estás muy herida y que te de libre.

Ella solo le cabeceo un si y el le limpio una lágrima del rostro.

-Me duele el vientre, me arden los ojos y siento un gran odio a Black Hat. -comento ella tranquilizando un poco su llanto. - Lo odio.

El le dio un pequeño beso en la frente y se alejo de ella para buscarle un calmante para se ceder su dolor, ya no estaba embarazada así que la preocupación de dañar al bebé se había esfumado.

La chica al poco tiempo de que fue canalizada con suero y con el calmante se durmió, el chico tomo una silla y recostó su cabeza en la camilla para descansar junto a ella, por el momento no quería dejarla sola por nada del mundo.

Había sido una noche muy larga.

-Mi plan salió mejor de lo que pensé. -comento el ente apareciendo en el laboratorio y viendo a sus dos subordinados completamente dormidos. -

Seguía sin entender como casi de la nada esos dos ahora eran inseparables.

Pero, volviendo a centrar su atención en lo que realmente importaba, comenzó a revisar todo el lugar en busca de afirmar sus sospechas cuando miro una pequeña libreta salir del bolsillo del pantalón del científico.

Sonrió y chasqueo sus dedos para sacar la libreta.

"Control de achaques y síntomas de embarazo"

-Aunque si, -dijo al ver la primera hoja de la libreta. - no podían usar un maldito anticonceptivo. -decía mientras pasaba las hojas de la libreta leyendo detenidamente todo lo que había en ella. -

Cuando llego a la última página en la que había escrito el científico noto que solo había unas letras grandes en marcador negro que decían "Fin"

-Upssss. -soltó el ente al ver eso y chasqueo sus dedos para dejar la libreta en donde estaba. - Mi culpa, -comentó y los vio a ambos detenidamente. - espero les sirva de lección para no salir de los limites que tienen puestos en mi casa.

El ente salió del laboratorio satisfecho de que su mansión no se volvería una guardería.

¿Que esperaban? ¿Que se sintiera culpable o arrepentido?

Eso nunca.

A Black Hat no le gustaban los niños y no iba a cambiar de opinión solo por que sus subordinados no habían usado protección en una de sus tantas calenturas.

Un hijo de Demencia no podía ser un angelito y Flug no siempre fue tan calmado, así que lo único que podía imaginar es que la combinación de ambos iba a resultar en un desastre.

Y eso era lo que menos quería.

Cap. Corto, lo pero, los que vienen serán un poco mas largos por que ya se acerca el final de este Fanfic.

Saludos desde Nicaragua,
Nash Maquiávelo 🇳🇮

Cómplices ⚪ DemenflugDonde viven las historias. Descúbrelo ahora