Mi Tsu-kun

IX

Reborn D' Arcobaleno, un asesino y Hitman número uno del bajo mundo.

Su nombre era temido, si.

Así cuando su viejo amigo Timoteo D' Vongola le asignó la misión de entrenar al próximo Décimo Vongola esperó encontrarse con un inútil como lo fue su anterior alumno.

Se llevó una sorpresa al ver que los informes eran viejos y eran muy erróneos.

Lo cual llevó a una investigación exhaustiva para saber más sobre su Alumno y Madre.

Tsunayoshi es un niño de catorce de género dudoso, ganador nacional de medalla de plata de Lucha libre Juvenil. Sus calificaciones son normales y tiene un excelente en educación física, está inscrito en el Club de Gimnasia de la Secundaria y Ama la repostería. Habla Italiano e Inglés a la perfección, lleva clases de chino por gusto y se inscribió a otra de español.

Nanami era algo inesperado, es una mujer ejemplar una perfecta Yamato Nadeshiko. Es ama de casa que hace postres a pedido, tiene reuniones con sus amigos los sábados en las mañanas. Consciente a sus hijos y les enseña yoga doblándose en ángulos imposibles para el humano normal, tiene cuerpo de contorsionista. Está en una relación de amistad con un dueño de una tienda de antigüedades y de Ramen que obviamente está enamorado de ella solo que ella no se da cuenta.

Ambos cada Viernes van a un campo de tiro donde se divierten, o eso piensan los demás.

La anterior pareja de Nana fue una Mafioso así como su ex esposo. Lo supo cuando investigó, así como también supo que en lugar de "Divertirse" los estaba entrenando por si algo sucedía.

Los gemelos eran hijos de una Famiglia extinta y el único sobreviviente era un traidor por lo que los cazarían en un futuro. Y su hijo mayor es un descendiente directo de Primo Vongola, por lo que llevaba un entrenamiento más duro Nana le exigía más. Se dió cuenta de ello, por lo cual le llevó a concluir que Nanami sabía de la Mafia y protege a sus hijos.

En la noche se escabulló al patio trasero para observar el entrenamiento que hacía la mujer.

Tan espartano como el suyo, vió como cada golpe que daba en el aire iba con toda su fuerza. Ella sudaba y estaba sucia, esforzándose al máximo, luchaba con su sombra y entrenaba hasta el límite su cuerpo.

Siguió sin descanso hasta entrada la madrugada.

—"Sin duda un ejemplo de mujer"—se acordó de un Tal Kawahira—"Incluso hasta yo podría..."

Borró sus pensamientos, Nanami es digna de admirar.

Siguió mirándola hasta perderla en las escaleras antes de deslizar un sobre en su buzón.

—¡Vamos León!

Su camaleón amigo subió a su feldora con un brinco.

...

Nana se sintió observada durante todo su entrenamiento sabía que era Reborn.

Esta vez no fingiría ignorancia e ingenuidad. Afrontará todo con la cabeza en alto demostrando su valía, nadie les arrebatará a sus hijos.

La carta en su buzón demostró que Reborn fue el que la vió.

Arregló su casa y despertó a sus hijos de —ya— dos años.

Uno, dos tres, cuatro y cinco. El mismo estruendo, Tsunayoshi se volvió a caer.

—Ara, Ara. Tsu-kun es tan animado~