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Adrienna seguía sentada en el regazo de Brian, sus piernas estaban alrededor de su cadera y sus manos descansaban en sus hombros. Él la miraba, aunque su pelo estuviera desarreglado, su cuerpo algo sudado, y su respiración algo acelerada, seguía siendo hermosa.

Brian tomó del mentón de Adrienna y unió sus labios. Este no era un beso que desprendía lujuria, desprendía cariño, amor, dulzura. La joven sintió como su corazón se aceleraba y una corriente eléctrica recorría su espalda. Brian tomó su cuello para atraerla más a él y sentirse todavía más cercano a ella.

—Te voy a dejar ir Cariño, tengo cosas que hacer.

El hombre se desacopló de la joven y se dirigió a la puerta que ingresaba al interior de su casa. Luego de un par de minutos y terminada la tarea Brian se separó de ella y se fue al baño sin decir ninguna palabra. Adrienna quedó sentada en el lugar y después de unos momentos sacudió su cabeza y se dio cuenta de que tenía que volver al mundo real.

Se levantó y fue a la cocina a limpiarse el semen que se derramaba de su interior con unas servilletas, mientras se limpiaba agradeció a Gabriella por haberla introducido a la pastilla ya que sino estaría en serios problemas. Luego fue al patio donde se puso su ropa interior cosa que enseguida lamentó ya que casi al instante pudo sentir como la prenda se estaba ensuciando con el semen que seguida derramándose de su vagina.

Por último se colocó su vestido, tomo sus partencias y se retiró de aquel hogar.

Había resultado ser una experiencia mucho más intensa de la que había esperado. La conexión que tuvieron por momentos había sido profunda y… no podía encontrar las palabras para explicarlo. Era como si los sentidos de reproducción mas primitivos dentro de ella se hubieran activado por momentos, o al menos era esa la explicación que se le ocurría a Adrienna. Simplemente no podía entender por qué se dejaba llevar así por aquellos impulsos tan bajos.

Afortunadamente para la joven, habían pasado un poco más de dos horas y se encontró con la casa vacía. Enseguida dejó sus pertenencias en su cuarto y tomó una muda de ropa limpia para luego dirigirse al baño.
Dentro del baño se despojó del vestido y su bombacha.

Que buen uso del vestido.— pensó de forma cínica mientras sostenía y contemplaba la prenda.

Jamás se hubiera imaginado un año atrás cuando una amiga le regaló ese vestido que lo estaría usando para algo tan escandaloso como lo hizo hoy. Antes de doblarlo y meterlo en el canasto de la ropa sucia, se agachó y tomó la bombacha que estaba en el suelo. Era un desastre y esperaba que las manchas de semen no quedaran en la tela, pero en fin, hizo una bola con el vestido y escondió la prenda íntima dentro del vestido y lo depositó en el canasto.

Minutos después se encontró bajo la lluvia de la ducha, dejando que el agua la relajara y limpiara.
Cuánto había cambiado en el último mes, las facetas ocultas que se estaban destapando sobre ella misma hubieran sido impensadas para la Adrienna de meses atrás. Se suponía que era una chica bien, tranquila y responsable ¿Qué dirían sus padres si se enteraran de lo que estaba haciendo? Después de años de amor y educación, seria extremadamente decepcionante y triste para ellos. Ni siquiera ella misma podía comprender lo que había hecho hoy ahora que estaba mas en calma, ir de forma tan ligera y ofrecerse a un hombre mayor de esa manera.

Si bien todavía sentía un poco de culpa y arrepentimiento ya no era igual de fuerte de cómo cuando lo había hecho la primera vez con Brian. Era como si lo estuviera aceptando, al final esta última vez había sido su idea y en el fondo no se sentía tan mal.

Era esta nueva faceta de su persona que la confundía, por un lado era deplorable todo lo que hacia. La manera en la cual actuaba y cómo se dejaba llevar por sus impulsos, nunca le había pasado algo así y estaba mal. Pero por el otro lado y esto era lo que a veces la asustaba, era la fuerza que tenían los impulsos que hacían que se entregara a sus instintos de aquella manera, el placer y el bienestar eran incalculables pero…
Adrienna suspiró, no quería ahondar de nuevo en todos esos pensamientos.

Dirty Old ManDonde viven las historias. Descúbrelo ahora