Contando Estrellas [Zodiaco]

Capítulo 37

Una gota de sudor descendía por su sien, recorriendo su pómulo derecho hasta resbalar al final de su barbilla, esparciéndose al tocar el cuello de su camisa color verde militar.

Su respiración era agitada, respirando apenas debido a la adrenalina que recorría sus venas, haciéndola jadear del cansancio.

Un sonido emitido por su walkie talkie logró alertarla, seguida de un mensaje.

-Comandante, ¿se encuentra bien?, ¿que ha sido eso?- La voz angustiada de una mujer se hizo presente ante oídos de la chica, que soltaba un suspiro, aliviada.

-Lynx, gracias al cielo- Su voz sonaba rota al sostener el aparato cerca de su rostro, y sus ojos cristalinos delataban la desesperación el ella. -Pensé que todos habían muerto- Una lágrima de rabia resbaló de su párpado, que rápidamente retiró con su mano libre.

-Ese bastardo nos tendió una trampa- Aclaró la chica tras la línea. -Perdí comunicación con escuadrones D, E, G y H. El escuadrón F se encuentra gravemente herido y...  todos en C han muerto por la explosión-

-O-orión estaba en ese grupo... - Tauro tragó saliva al cubrirse la boca para no romper en llanto.

-Lo lamento comandante, hicimos todo cuanto estuvo en nuestras manos pero no pudimos salvarlo- Las palabras de la muchacha hacían que el corazón de la taurina se estremeciera, golpeando su cabeza contra la pared metálica a su espalda al maldecir.

-Todos en mi escuadrón han muerto, soy la única sobreviviente- Informó por la línea, utilizando un tono seco al hablar.
-¿Cuál es el estado actual de la batalla?- Cuestionó dolida, cerrando los ojos un momento.

-El enemigo se ha esfumado junto a los rehenes. Sin embrago, existen posibilidades de encontrar información útil dentro del almacén-

-Perfecto- Profirió seria. -Alguien tendrá que cubrir a Orión, ¿te queda algún médico forense?-

-Si, Hydra puede encargarse de eso- Declaró con severidad en su habla.

-Bien, no hay tiempo que perder- Prosiguió segura. -Buscaré a más sobrevivientes y seguiré a Serpentus, comunícame cualquier avance con la investigación y...- La línea permaneció silente unos segundos. -Haste cargo del cuerpo de Orión...- Ordenó de manera adusta.

-A la orden comandante, cambio y fuera-

-Cambio y fuera-

Y así, la morena se puso de pie sobre el suelo fangoso, cubierto por una especie de moho y la sangre de sus compañeros, caminando entre sus cadáveres inertes, postrados en el suelo con infinidad de golpes y balas atravesándolos.

*No puede ser Orión, después de todo lo que hemos pasado juntos... Sigo sin creer que te hayas ido. ¡¿Por qué?!, ¿por qué tú?...* Maldecía por lo bajo, conteniendo las lágrimas.

*Ahora dime, ¿cómo le explicaré a Pictor que has muerto?, no tengo cara para decírselo... ¿Por qué tenías que dejarme ahora JODER?* Trató de limpiar sus ojos con una mano, más la suciedad impregnada a todo su cuerpo no era de ayuda.

-T-tauro...- Con un hilo de voz, alguien la llamaba bajo los escombros generados por la explosión dentro de uno de los almacenes, donde Serpentus realizaba sus operaciones.