No Merezco Volver |J.C.|

Ahora Lo Sabe

Abigail.

Abril, 20

Erick y yo fuimos por los niños y después regresamos a casa de mis papás, no nos quedamos más tiempo en el club porque nos arriesgabamos a que Roberta y Alan se dieran cuenta de que estaba aquí.

Al llegar a casa de mis papás, cenamos para después prepararnos para irnos.

-Espero que vengan más seguido o se queden más días-Dijo mi mamá dándoles un beso a los niños-

-Si, esperamos venir más, o ustedes también vayan a la casa-Dije y le di un fuerte abrazo-Nos vemos ma, cuídate mucho-

-Me saludas a Joel-Nos separamos y después abracé a mi papá-

-Hasta pronto, espero verlos luego-Erick sonrió y estrechó las manos con mis papás-

-Que tengan un buen viaje, cuidense-

Erick, los niños y yo subimos al taxi camino al aeropuerto.

(...)

-¿Segura que no quieres que te acompañe?-Preguntó Erick cuando salimos del aeropuerto, habíamos llegado a Miami pero era más de media noche-

-No, ve a tu casa, yo puedo con las pulgas-Sonreí-

-De acuerdo-Dijo no muy convencido-¿Te llegó el video verdad?-Asentí-Muy bien, entonces cuídate mucho-Dio un beso en mi mejilla-Hasta pronto pulgas-Los niños a penas si lo escucharon ya que venían durmiendose-

Erick tomó un taxi y después yo hice lo mismo.

En el camino los niños se quedaron dormidos, yo sólo iba pensando en lo que ví está tarde, en serio me estoy debatiendo entre sí decirle a Jos o no.

Tiene que saberlo pero sinceramente no quiero ser yo quien se lo diga, ¿cómo va a reaccionar?, ¿y si no me cree?, aunque después de lo que pasó entre nosotros seguro va a creerme y con el video más pero no sé.

Llegamos a la casa y no sabía cómo iba a hacerle con las pulgas, cuando se duermen ya no se despiertan.

Tomé a Sebastián con cuidado y en eso llegó Joel y le sonreí agradecida, él tomó a Bas en sus brazos y lo metió a la casa.

Yo mientras, le pagué al taxista y salí con Luciana en brazos para entrar a la casa.

Subí a su habitación y la dejé en su cama, le puse su pijama y la cubrí, Joel había hecho lo mismo con Bas.

-Pensé que ya ibas a estar dormido-Le dije a Joel cuando salimos de la habitación de las pulgas-

-Lo estaba haciendo-Rió-Pero luego pensé que los niños ya vendrían dormidos y pues no ibas a poder tú sola-

-Gracias-Sonreí-

Entramos a nuestra habitación y yo me puse mi pijama, Joel igual y nos recostamos en la cama.

-¿Y cómo les fue?-Preguntó mientras apagaba la lámpara de noche-

-Bien, a los niños les gustó mucho conocer un poco México y visitar a sus abuelos-Dije-

-Me alegro-

-Fuera de eso, estuvo bien, sólo que pasó algo que no me agradó del todo-Dije nerviosa-

-¿Qué ocurrió?-Se puso de lado recargando su cabeza en su mano-

-Pues es que mis papás nos prestaron la membresía del club y Erick y yo fuimos a hacer ejercicio al gimnasio y cuando terminamos fuimos a los vestidores y lo que encontré...-Mordí mi labio inferior nerviosa-