Kill me, heal me (Lee Taeyong & Tú) *Terminada*

23

-Por que despiertas tan temprano?- pregunto Taeyong entrando a la cocina sorprendiéndose al verme ahi.
Después de la charla que tuve con T-Yong decidí no ir a dormir, quizás porque el sueño no volvió y también porque luego me quedaría dormida.

-si. bueno no tenia sueño.

-tienes que descansar- dijo tomando su taza para preparar café.

-el que tiene que descansar eres tu, no te sientes cansado con todo, digo el trabajo y tus personalidades casi ni duermes.

-tienes razón pero no puedo hacer mucho, aveces siento mi cuerpo pesado pero me las arreglo.

-tienes que tomarte unas buenas vacaciones.

-si, pero eso no es posible mientras este enfermo- dijo con tono de broma pero para mi eso sonó triste.

-yo lo haré, prepararé unas buenas vacaciones para ti, la cual vas a disfrutar al 100%, ese sera mi regalo para ti por tu esfuerzo.

-gracias, estaré esperando por el.

El abogado de Taeyong se estaba encargando muy bien del caso, casi estaban por ganarlo, estaba segura de que todo saldría bien y acabaría rápido, hoy era el ultimo día del caso y yo estaba mas nerviosa que el mismo abogado.
Como sea vine a la oficina e hice algunas cosas que tenia pendiente, pero mi cabeza seguía en otro lado, cada rato veía el teléfono por si Taeyong me llamaba para darme noticias pero el teléfono no daba señales, incluso revise que estuviera funcionando, ni yo se por qué estoy tan nerviosa.

Vi una vez mas la pantalla del teléfono pero seguía igual, iba a voltear la cabeza cuando la pantalla se encendió apareciendo la foto de Taeyong indicando que estaba recibiendo su llamada, conteste casi al instante.

-ganamos- escuche del otro lado del teléfono antes de poder decir algo- ahora todo esta resuelto- la voz de Taeyong solo demostraba tranquilidad y felicidad.

-te lo dije, todo saldría bien.

-estas en el trabajo?- pregunto de repente.

-si por qué lo preguntas.

-hmm, crees que puedas escaparte un rato.

-que?- pensé que había escuchado mal.

-estoy feliz, y quiero compartir mi felicidad contigo- entendía como se sentía Taeyong, que te esfuerzas tanto en algo y que por cosas de la vida temas perder todo lo que has hecho con tu esfuerzo y luego de la tormenta la buena noticia que no perderás todo, esa es una felicidad que con simples palabras no pueden definirlo, si yo he tenido esa felicidad con mis libros no me imagino como esta Taeyong con su empresa- muñeca estas ahí- no me di cuenta que había creado un silencio mientras pensaba.

-claro que puedo, dime donde es el encuentro.

-estoy abajo de tu oficina, baja.

-estas donde?- no podía creerlo- estoy ahí en 5- comencé a llenar mis cosas lo mas rápido que pude, mi compañera y amiga me veía con una sonrisa picara.

-así que primera vez en toda tu vida de trabajo en esta oficina te escapas para ir con tu amigo.

-no tengo tiempo de discutir contigo, pero puedes cubrirme verdad?!.

-si, claro tu ve y disfruta, tenemos mucho tiempo luego para discutir- dijo riendo- pero sal rápido antes que alguien mas te vea.

-sabes que te amo-dije despidiéndome.

-y yo a ti.

Al llegar abajo Taeyong estaba enfrente esperándome fuera de su auto, al verme me regalo una sonrisa la cual yo devolví.

-y adonde vamos?- pregunte cuando habíamos salido a la calle principal.

-es una sorpresa.

-me gustan las sorpresas.

En todo el camino estuvimos hablando, era un viaje algo largo, fuera de la ciudad.
Llegamos a la playa, el clima estaba fresco, se podían escuchar las olas, el agua brillando con la luz del sol.

Bajamos a la playa y comenzamos a caminar, yo llevaba tacones así que me los quite por que era súper incómodo, Taeyong también imito mi acto.
Nos acercamos un poco mas al agua permitiéndonos mojarnos un poco los pies.

Se nos había pasado el tiempo, ya estaba atardeciendo, me encantaba ver el atardecer en la playa pero por el trabajo eso no era posible muy a menudo.

-gracias por acompañarme hoy- dijo Taeyong después de un largo silencio.

-no me lo agradezcas, estoy feliz de poder haber venido.

Me acomode sobre la arena para apreciar el amanecer, segundos después sentí un peso sobre mi mano que reposaba sobre la arena, sabia que era ese peso, no me incomodaba así que solo seguí viendo al sol esconderse tras el mar.
Taeyong movió su mano hacia abajo entrelazando nuestros dedos, sonreí al sentir la calidez de su mano.

No se cuanto tiempo estuvimos así, pero el sol había desaparecido dándole lugar a las estrellas que adornaban el cielo que estaba sobre nosotros.

-creo que debemos volver- ya comenzaba a hacer frió y era tarde.

-cierto- fue lo único que dijo Taeyong, pero no se esforzó para moverse.

-Taeyong, vayámonos- le volví a decir.

-no podemos quedarnos un rato mas?- pregunto viéndome con sus lindos ojitos.

-ya llevas media hora diciendo un ratito mas, tengo frió vamos- dije y comencé a levantarme, Taeyong me siguió aunque no quería.

Caminamos de vuelta hasta el auto aun con nuestras manos entrelazadas, ninguno dijo nada sobre eso pero no era incómodo tampoco.

-no quiero soltarte- dijo Taeyong cuando llegamos al auto.

-entonces como se supone que subiremos al auto?.

Nos quedamos viendo uno al otro por un momento y luego Taeyong comenzó a soltar mi mano de apoco.

Cuando llegamos a la casa ya era un poco tarde, me despedí de Taeyong para ir a mi recama, había sido un largo y agradable día....