CHANGES | Tangled Fanfic

Ansiedad

POV: Espectador

Luego de un severo episodio de angustia y preocupación, la joven accedió a quedarse en el castillo tras la insistencia de la realeza que le suplicó pasar la noche allí.

La princesa, al ser como es y al sentir profunda compasión por Eleonor, le dio un trato digno de una importante personalidad. No solo le hizo servir una rica comida, sino que también le dio una habitación con todas las comodidades y se ofreció a servirle en caso de que necesitara algo, o quisiese saber algo más respecto a su amigo, cosa que ella no rechazó, desde luego.

...

Le contó todo lo que pudo de Varian y de cómo su amargura lo había convertido en alguien muy distinto a como era antes

Ahora más que nunca es un joven tosco, cerrado y malhumorado, un amargado, en pocas palabras.

"Si lo vieses ahora sería irreconocible para ti", le aseguró. Sin embargo, ella no le creyó. Se negaba a genuinamente creerle a la princesa.

A pesar de los amables tratos que esta le dio, la joven ya estaba almacenando rencor hacia ella, rencor por no tener humildad y empatía por el chico.
Consideraba a la princesa una joven con bastante humanidad y consideración por los demás. Por esa misma razón no comprendía por qué era tan severa con un chico de dieciséis años que perdió a su padre y fue ignorado por sus amigos y su reino, todo en un solo día.

A día de hoy aún no ha recibido ayuda con absolutamente nada, y la princesa es capaz de decir que se volvió una persona amargada "por estar en prisión".

...

Definitivamente era demasiado para procesar.

Eran muchas las emociones pasadas el día de hoy, tantas que la menor no tenía idea de cómo siquiera podría conciliar el sueño en una noche tan lluviosa y sombría.

-...- sus ojos volvían a cargarse de lágrimas pero ella luchaba por contener cualquier rastro de llanto.

No iba a ganar nada llorando.

Serían cerca de las 7 de la noche para cuando ella ya estaba intentando dormir, pero no es como si estuviese acostumbrada a dormirse temprano.

...Se maldijo por sus malos hábitos y se descubrió de las suaves sábanas.

-...Mocoso tonto.- dijo para sí misma, pues había sido su mejor amigo por el que ella tenía dicha costumbre.

Sin embargo, luego de aclarar un poco su mente, se dio cuenta de que moría de sueño pero no podía dormir por su mar de pensamientos.

Por su mente pasaba solamente una cosa. Ya fuese porque estaba preocupada o enojada, o incluso desconsolada, no podía parar de pensar en él.

¿Cómo no hacerlo? Todo había pasado tan rápido que era inevitable.

Era tan sofocante la situación que su desesperación aumentaba por cada minuto que pasaba dándole vueltas al asunto. Incluso podía sentir como su estrés se convertía en ansiedad, y como su cuerpo le demostraba lo tortuoso que era el tema para su bienestar emocional todo esto.

Se sentó a las orillas de la cama y trató de relajarse.

"Ya basta. No puedes hacer nada, ridícula" Se dijo a sí misma, buscando justificarse frente a su propia conciencia.

Su corazón se aceleró, e inmediatamente detectó lo que sucedería.

Otra vez estaba colapsando. Hacía ya bastante que no sufría un ataque de pánico... Y justo ahora tuvo que regresar a esa oscura y desagradable sensación.