XVII. Adalid

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Annie P.D.V.

¿Por qué esto sigue pasando? ¿Por qué Bastian no nos deja en paz? ¿Por qué sigue empeñado en hacer daño? ¿Por qué se llevo a Jared? ¿Es que de esto se tratarán nuestras vidas siempre? ¿Huir y protegernos lo más que podamos?

Una nueva obstetra me reviso luego de desmayarme, dijo que debo hacer reposo, y cuidarme, evitar el estrés porque eso podría causar que entre en trabajo de parto prematuramente. Es por eso que estoy en cama, mientras que los demás miembros de mi familia están intentando averiguar el paradero de Jad. Mantengo su peluche favorito a mi lado, dejando que seque mis lágrimas silenciosas de vez en cuando.

Ellie está hospitalizada. Ese animal la dejó casi desfigurada, y de no ser porque Rocky salió del armario donde le había encerrado y lo atacó, ella ahora estaría muerta. Sin embargo, para escapar de nuestro perro, se metió al cuarto de Jad y... ya saben lo que pasó luego.

Rocky se encuentra a mi lado, observándome con ojos tristes, creo que hasta él sabe que falta el miembro más importante de la familia. Lo acaricio distraídamente.

Visualizo su dulce e inocente rostro, y su risa. Me remuevo en la cama, completamente al borde del llanto otra vez, ésta sensación de impotencia y pesadumbre no deja mi pecho. Escucho un estruendo en el primer piso, me levanto ansiosa con Rocky siguiéndome en silencio. Abro la puerta.

Llego a la baranda de los escalones y me detengo al oír las voces de todos discutir. Matt, Rebecca, Brandon, William, Nicolás, Joshua y...

Me pongo rígida de inmediato al escuchar a Jane hablar. No había sabido de ella desde esa llamada en la casa del lago durante nuestra luna de miel. Incluso cuando intenté contactarla nuevamente al regresar, nunca respondió mis llamadas.

- ¡Ya cállense todos! -grita irritada, me apoyo en la pared más cercana.

- William, sé que no te agrada que estemos aquí, pero...-es Joshua el que habla.

- Salgan de mi casa. -sisea frío William. -Ninguno tiene ni un derecho a estar aquí.

- ¿Por qué están aquí? -pregunta Brandon.

- Venimos a ayudar.

- Pero antes, Nicolás tiene que decirnos algo. -afirma Jane con sequedad.

Hacen una pausa tensa, y enseguida se escucha a Nicolás decir:

- Yo no sé de lo que están hablando.

- Será mejor que hables o yo te pondré a cantar. -amenaza Josh con rencor.

- Ustedes dos están locos, Nicolás no tiene nada que ocultar. -defiende Rebecca.

- Nicolás. -la voz de William es impasible. -No te atrevas a mentirme otra vez, y di la verdad.

- Por favor, yo... yo... él le hará daño si yo...-comienza a balbucear nervioso.

- ¿Él? -inquiere Matt confuso.

- Bastian. -declara Jane. -Nicolás trabajó para Bastian todo este tiempo.

Mi corazón se agita, me sujeto de la baranda con una mano y pongo la otra en mi vientre. Rocky me mira atento. ¿Nicolás y Bastian?

- ¿Eso es verdad, Nicolás? -escucho decir a William.

- ¡Yo lo siento tanto, William! ¡Tuve que hacerlo! ¡Me dijo que la dejaría libre si lo hacía! -dice apresuradamente con tono de remordimiento.

- ¿Dejarla libre?

- A mi nieta, Violett. -su voz tiembla. -Bastian la secuestró hace más de tres años, la obliga a prostituirse. Y la policía no hacía nada para encontrarla o ayudarme, yo tuve que...

#3 | Trilogía SCG | GoldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora