Y aquí estoy finalmente, encerrada en estas cuatro paredes color gris, con una ventana protegida por unos gruesos barrotes de fierro y mi única entretención es una pequeña pelota blanda de color blanco que tiro por toda la habitación mientras estoy recostada en mi cama.
Nadie pensó que yo, la linda y alegre Sariel, la chica del nombre de ángel, aquella que todos amaban, tendría un final tan trágico como éste.
La puerta de la habitación en la que estoy encerrada hace poco más de una semana se abre por primera vez en el día y por ella entra un doctor con una libreta y detrás de él dos enfermeras. Una de ellas sostiene una silla, en la que probablemente se sentaría el doctor, y la otra mis medicinas junto a un vaso con agua, ambas simplemente me miran con compasión. ¿Tan deplorable y demacrada me veo?
Me entregan las cápsulas de medicamentos y sin rechistar me los tomo. Ellos dicen que eso me haría bien.
En cuanto ambas enfermeras salen de mi habitación, el doctor, un hombre alto y delgado, con algunas canas en su cabello y unos gruesos lentes de color negro, se sienta en la silla y me observa por unos largos segundos.
— Dime, Sariel, ¿por qué estás aquí?
Lo miro atónita un par de segundos, mi actual estado solo me hace responder de una forma:
— No lo sé, yo no debería estar aquí. — el tono seco de mi voz solo refleja molestia y él parece darse cuenta que yo no tengo intenciones de cooperar.— Sólo quiero irme pronto y retomar mi vida.
El doctor con mucha paciencia, saca los lentes de su fino rostro y enreda sus manos en su pierna derecha, la cual permanece apoyada sobre la izquierda.
— Bueno, si quieres salir pronto de aquí, trabajemos los dos juntos para eso, ¿te parece? — dice con tono afable. Sin esperar mi respuesta, él sigue:— El primer paso aquí es reconocer el problema. Entonces dime, si pudieras ponerle un nombre al problema por el que crees estar aquí, ¿cuál sería?
Miro fijamente a mi psiquiatra por un par de segundos dubitativa de mi respuesta, pero finalmente respondo:
— Samael.
FECHA DE PUBLICACIÓN OFICIAL: DOMINGO 27 DE ENERO, 2019
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SAMAEL
Teen FictionDicen que los demonios son ángeles caídos del cielo que desobedecieron y se rebelaron contra Dios. Ellos son los responsables de los crímenes, desastres, guerras, enfermedades, de las muertes y todo aquello que hace sufrir a la humanidad. En la reli...