_El de converse blancos

Capitulo 0

Hallie
Tiempo actual.
-Me dejarás ya publicarlo?-Pregunte mientras meneaba el vaso en mi mano
-Estás loca, ni de broma. -Refunfuña peinándose el cabello, ¿que se peina el? 
-Vamos, será un éxito total y ganaré...-Me interrumpió, gruñí
-No. -Me hizo un guiñado
-Idiota. -Susurre tomándome el líquido que sobraba del vaso
-Te oí. -Me dijo dándome un golpe en la cabeza, quise golpearlo de vuelta pero se alejó rápido
-Por favor Deve...-Junte mis manos suplicándole
-No, cabezota!-Alzo la voz y abrió la puerta
-A donde vas? -Pregunte, mucho me había costado encontrarlo entre este montón de gente para que se fuera sin decirme que aceptaba
-Iré a buscar un ligue para cog...-Corrí a cubrirle la boca con mis manos
-Hey! -Le reñí y rodó los ojos alejándome de él con un empujón por los hombros
-Para congeniar. -Corrige, movió las manos en una señal obscena, wuacala
-Puaj. -Me tape la boca disimulando que vomitaría -Que asco, a veces me das pena, amigo. -Digo arrugando la nariz
-Si lo que digas, tu ve a besar a ese marica. -Entrecerré los ojos ante su insulto hacia mi lindo novio–no novio, bueno es una historia larga -Oh has lo que se te pegue la gana, pero no te me acerques. -Ordeno saliendo de la habitación, decidí hacerle caso, no él lo de ir a besar a nadie, sino a lo de ir hacer lo que se me pegará en gana, después de todo esta era una fiesta, y yo vine a divertirme, o eso creo.

-Hallie!-Gire sobre mis pies, la música no están muy alta como para no oír los gritos, sonreí al ver al rey de las fiestas, como yo le llamo
-He?-Dije chocando puños con el
-A que está de lo mejor, ah?-Mire alrededor, buena música, buen ambiente, nada mal
-No lo se, Alex, has echo mejores.-Me encogí de hombros
-Lo se, pero es que fue improvisado.-Movió las manos restándole importancia
-Eso escuche. -Hable mientras miraba a Deve meterle la lengua a una tipa, asco
-Niña no te descuides, y bebe solo lo que tú te sirvas. -Alex me dice dándome un abrazo rápido que muy apenas pude responder, luego desapareció entre la gente, suspiré ¿qué haces aquí Hallie?
ah si ya se, vienes prácticamente a seguir a Deve para que te deje publicar su historia que te has empeñado a escribir a su costa.
-No hay que perder tiempo. -Hable para mi y me abrí paso entre la gente, había muchas personas y a la mayoría la conocía de la escuela o de a fuera, pero todos tenían un objetivo y yo igual, tenía que convencer al cabezota de Deve, el cual ahora estaba fumándose un cigarrillo mientras la chica—a la que le estaba metiendo lengua– se tomada un vaso, seguramente con cerveza o algo así, por eso corrí un poco hacia donde estaba, todos estaban medio borrachos así que no habría problema en acercármele a Deve ahora
-Holaaa. -Canturreó llegando a su lado, casi se ahoga con el humo
-Maldita sea, Hallie. -Escupe las palabras mientras me echa el humo en la cara, odio que haga eso
-Quita eso, loco. -Di un manotazo al humo, tratando de alejarlo de mi, y de mi ropa, si llegaba a casa oliendo a cigarrillos, posiblemente me mataría mi papá
-Que!-Pregunto al notar que lo miraba mal
-Daña tus pulmones, lo sabías?-Me saca el dedo del medio, que grosero.
-Me daña más tu presencia. -Achicó los ojos, emboza una sonrisa burlona
-Ja–ja. -Meneó la cabeza, no se como llegue a tenerlo como amigo, si es todo un desastre andante, pero bueno quien no lo es en estos tiempos. Deve, es un tipo totalmente diferente, claro, debo decir que para mi no lo es en todo sentido, desde que lo conozco, o más bien desde el momento que decidí seguirlo y fastidiarle la vida–según palabras de él– he descubierto tantas pero tantas cosas que jamás imaginé, es un tipo grandioso, pero no deja que lo vean, tiene problemas, quizás muchos, tantos como los demás, pero no como los suyos, yo lo conozco bien, y también eh estado en la mitad de esos problemas, Deve tiene mucho por contar, y yo soy buena escuchándolo, pero hasta ahora no me ha dejando ayudarlo a que los demás lo escuchen también, no quiere que lo hagan, dice que necesita este espacio, que le gusta tener facetas, y que le gusta el Deve de ahora, no el Deve que un día estuvo ahí para escucharme llorar por un idiota, o que ayudó a su hermana, o el que está para sus dos mejores amigos, o el que lucha por ser alguien, el que está peleando por dejar de ser un desastre, el Deve verdadero, el de converse blancos...