—Necesitamos que coopere con nosotros hasta que pase la cuarentena, señor Kim. El control de la situación depende de usted y de cómo organice a su gente —demandó la científica cubierta de un impermeable blanco en la pantalla.
—Este virus convierte a todos en unos putos dementes, ¿qué espera si se trata de los empleados? —Interrumpió BaekHyun antes de que NamJoon abriera la boca.
—Como sabe, el ID-7 tira por el suelo la barrera moral, lo que desata emociones reprimidas —explicó la mujer ignorando el tono arrogante del ejecutivo que le había replicado —, esas emociones incluyen miedo, ira, depresión o lujuria. La reacción del individuo en particular depende de su estado psicológico y bienestar...
—Quiere decir que el patógeno potencia al sujeto en cuestión como una droga, ¿no es así? Un efecto similar a la cocaína —inquirió el cabecilla ahora haciéndose escuchar.
—Señor, un infectado con el ID-7 hace que un adicto a la cocaína parezca un ciudadano modelo en comparación.
—¿Acaso nos ve actuando como animales? —Escupió Byun.
—Eviten someterse a estrés —contestó la especialista antes de cortar la transmisión.
Kim NamJoon pensaba en cuánto dinero perdería durante ocho horas en que alrededor de 300 idiotas estarían persiguiéndose la cola en una vorágine sin precedentes. El sólo hecho de visualizar la suma que se le iba de las manos, le hacía querer arrancarle la cabeza al resto del comité directivo que se mantenía en blanco.
—Todos a trabajar, me vale si la masa pierde el control. El circo siempre ha sido circo. —Y no debería sorprenderles a estas alturas.
El jefe vociferó y las reacciones fueron contrarias. Algunos se encogieron en sus asientos, mientras otros parecían querer saltarle encima. —Si tienen algún problema, las puertas son grandes. Despido sin indemnización y no se habla más del asunto.
—Son lo que siempre han sido —complementó BaekHyun. —Asustémoslos un poco. Un arrebato de rebeldía y locura no los hace más importantes...
El teléfono emitió un sonido especialmente desagradable para cortar el típico discurso altanero de Byun.
—¿Qué carajo pasa ahora? —Interrogó un colérico NamJoon a la secretaria al otro lado de la línea.
—Kim SeokJin quiere subir. Dice que pensó bien lo conversado con usted y que acatará, pero que primero quiere reunirse con el resto del comité.
Debería sentirse horrible.
Por haber prescindido de la ayuda que TaeHyung le había brindado. Por resistirse a la idea prudente de dejar el lugar y buscar una alternativa por fuera. Por no encerrarse en una oficina hasta que el lío bajara las revoluciones y no le expusiera al sinfín de contratiempos que le esperaban.
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MAYHEM ▹ JinKook/KookJin
FanfictionTras ser despedido por un boicot, Kim SeokJin deberá enfrentarse a un problema aún mayor cuando un virus ataque al personal de su edificio, haciendo que todos actúen bajo sus impulsos más salvajes. A su lado estará una persona con razones de sobra p...