Kirishima
Sin darme cuenta, me había quedado dormido, mis alas instintivamente me acurrucaron, cuando desperté no tenía frío. Es de noche, Bakugo aún no ha vuelto. No tengo hambre y mis heridas han sanado más rápido de lo normal, seguramente porque no soy del todo humano. Miro alrededor, escucho pasos y observo en alerta. Es Bakugo, sale de unos arbustos y sacude su ropa, no pensé que regresaría tan rápido.
—¿Cómo está tu brazo?—pregunta.
—Está bien, ya no está hinchado, aunque todavía tengo comezón.
—Bien. No te rasques.Bakugo se acerca, coloca en mi brazo un poco de baba de alguna planta misteriosa y lo esparce con masajes lentos. Me estremezco porque sus manos están frías.
—Listo. Con esto será suficiente.
Miré de reojo las heridas en su cuerpo, él me ayuda con una simple alergia cuando debería pensar en él primero, después de todo, sigue en malas condiciones, aquellas sombras lograron lastimarlo bastante, aunque él actúe como si nada, me preocupa su condición física, sigo pensando que es mejor regresar a la aldea, pero, Bakugo intentará amarrarme de nuevo y no quiero morir de hambre o sed por eso.
Me siento junto a él y empiezo a tocar sus heridas. Bakugo se queja, pero no impide que lo toque. Su cuerpo está frío, como él dijo antes, la temperatura baja en la noche, esto podría ser peligroso para ambos.
De pronto, él enciende una flama en su mano, empieza a moverla como si admirara verla, entonces, cierra los ojos y presiona el fuego en las heridas de su brazo, me sorprendo por eso y me levanto exaltado.—¿Qué estás haciendo?—pregunto.
—El fuego de un Elegido puede curarnos, así es como he tratado mis heridas, en tu caso, recomiendo que no lo hagas, tu fuego es muy similar al de un dragón, en aquella pelea durante el desastre en la aldea, pude comprobarlo, por lo tanto, si lo usas, no sé que podría pasarte.
—Mis heridas se han curado bastante rápido sin usar fuego, ¿crees que sea porque soy un dragón?
—No insistas, eres un simple Elegido que por alguna razón puede transformarse en un dragón, ninguno de los dos lo entiende, así que, por ahora no más preguntas, lo descubriremos cuando sea el momento—Bakugo apaga el fuego.
—¿A qué te refieres?
—Kirishima—me mira directamente a los ojos, sus pupilas ni siquiera tiemblan. —No pienso volver.
No digo nada, dejo que siga hablando.
—Escucha, no quería hablar de esto tan pronto, pero algo no encaja, probablemente estamos siendo engañados por el Gran Elegido, aunque sea solo un presentimiento, algo anda mal.
—¿Por qué piensas eso?—interrumpo.
—Al parecer, las sombras están siendo controladas por algo, sin embargo, el Gran Elegido le dijo a mi madre que éste enemigo era obra del Dragón Rojo, según dice la leyenda: el Dragón Rojo es el más fuerte, más inteligente y más aterrador de todos los dragones. Si todo esto fuera cierto, si todo es culpa de los dragones, ¿por qué me salvaste la vida?, Kirishima, quizás no te diste cuenta, pero en aquel momento que apareciste como dragón para destruir a las sombras, eras aterrador, enorme y rojo. Eres el dragón de la leyenda y aún así, no eres el responsable que creó a las sombras como dice el Gran Elegido, por eso pienso que si no eres tu, alguien más debe controlarlas.
Agrando los ojos.
—No eres el primero que cuestiona las palabras del Gran Elegido—digo. —Un profesional secretamente me dijo que no creía en las palabras del Gran Elegido y me pidió que no le dijera a nadie, además, Todoroki: uno de mis compañeros de entrenamiento. Él tampoco cree en el Gran Elegido, y pretende ser como Marion.
—¿Marion?—Bakugo arquea una ceja.
—Así es, Marion es el hijo del Gran Elegido, fue expulsado por él cuando el ritual no resultó como quería, aún así, aprendió a utilizar su fuego y según Todoroki, es un Anti-Elegido. Desconozco los detalles, pero es probable que hayan muchos Elegidos en contra del Gran Elegido.
—¿Por qué Todoroki sabe eso?
—Porque su padre es un Elegido cercano al Gran Elegido, probablemente lo escuchó a escondidas.
—Esto solo empeora la situación, no logro juntar la información que tenemos hasta ahora.
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Discretion (fanfic)
FanfictionLos Elegidos han utilizado el poder del fuego durante décadas para defenderse de los dragones que han intentado apoderarse de sus tierras, gracias a ese poder han podido vivir en paz, sin embargo, cuenta la leyenda que un día un dragón rojo vendrá y...