The Only Reason

Capítulo 3

Claudia estaba en su cuarto, escuchando música. No dejaba de pensar en Ashton y en todo lo que sucedía a su alrededor. Había visto cómo le miraba la gente, cómo le hablaban y a través de sus ojos, cómo le hacían sentir. Y se moría por dentro.

Estaría mal decir que Ash le gustaba, porque se conocían desde hace muy poco, pero sí admitía que estaba interesada en él. Era muy guapo. Sabía mucho de música. La escuchaba y le hacía sentir bien. Claudia sonrió pensando en la cita de por la tarde.

El chico la había llamado el mismo día que ella le dio su número, y hoy no se habían visto en el colegio.

"Vamos Clau, ¿le echas de menos?"

Alguien llamó a la puerta. Claudia abrió:

- ¡Pat!

Patrice era amiga de Claudia desde hacía bastante tiempo. Ambas iban juntas al jardín de infancia y a la primaria. En la secundaria, coincidían en algunas clases, pero seguían siendo igual de amigas:

- Tu madre me ha dejado entrar, espero no molestarte.

- Por supuesto que no, pasa, pasa.

Patrice se sentó en la silla de escritorio de Claudia, y ésta bajó el volumen de los altavoces para que Alex Turner siguiera envolviendo el cuarto con su voz, pero más flojito:

- Has dejado la habitación chulísima. Pero demasiados pósters para mi gusto. ¿No te dan miedo todos esos ojos mirándote?

- ¿Estás de broma? No me da miedo. Me pone que los ojos de Jack Barakat me miren mientras me cambio - dijo Claudia señalando su póster de All Time Low.

- Eres una cerda - rió Patrice.

- Aún así, me quieres.

Se hizo un momento de silencio en el que Patrice se puso seria:

- Tía, tenemos que hablar. ¿Se puede saber qué haces yendo con Irwin? Estáis todo el día juntos. El colegio entero está sorprendido.

Claudia rodó los ojos:

- Patrice, ¿en serio? Creía que eras menos superficial. Ashton es un chico encantador, no le conoces.

- Amor, sabes que yo nunca juzgo nada de lo que haces, pero Ashton...no te conviene. Está deprimido. Es rarito. Es el apestado de la escuela.

- ¿Pero tú te estás oyendo? Me está dando asco que hables así de él. Es una persona. Como tú y como yo.

- Te mola, ¿verdad? - preguntó Patrice.

Claudia se quedó en silencio. Apretó con fuerza el cojín que sostenía:

- No...no lo sé. Le conozco de poco. Es un amigo.

- Ya. Un amigo al que odia todo el colegio y con el que tú has entablado una relación. ¿Pero no te das cuenta, Claudia? Te estás metiendo en un marrón muy grande.

- El hecho de pasar tiempo con Ash no es ningún marrón, Patrice.

- ¡Por el amor del cielo! ¿Ash? Solamente te estoy advirtiendo, Clau. A saber la de traumas que encierra el chaval. Te vas a meter en un jardín.

Claudia volvió rodar los ojos:

- Y yo te recuerdo que tengo diecisiete años. Creo que puedo decidir por mí misma.

- De acuerdo, cariño. Supongo que tienes razón.

Patrice la abrazó con un claro sentimiento de culpa:

- Hemos quedado esta tarde para ir al cine - suspiró Claudia.

- Si te sirve de algo...hacéis buena pareja. Y Ashton está bueno aunque sea un pringado, lo admito.

- ¡Eres de lo que no hay! - dijo Claudia tirándole un cojín a su amiga.

"Está bueno".

"Está deprimido".

"Es rarito".

"Pero hacemos buena pareja".