Capítulo 15

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Claudia estaba dormida de espaldas a Ashton. Éste llevaba despierto unos cuantos minutos, pero estaba demasiado embobado viendo dormir a su chica como para hacer algo más.

Se dedicó a contar los lunares en su espalda desnuda y a acariciar suavemente su pelo naranja que le caía por los hombros.

Claudia se despertó y se giró. Ashton la miraba con sus grandes ojos, a veces verdes, a veces miel, y ella arrugó la nariz:

- Buenos días.

- Buenos días, preciosa.

Claudia le cogió suavemente de la nuca y atrajo sus labios a los suyos, fundiéndose en un dulce beso:

- ¿Qué tal has dormido?

- Muy bien.

- ¿Has tenido...? Ya sabes. ¿Dolores? ¿Molestias? ¿Necesitas que vayamos al médico o algo así?

Claudia se rió. Ashton seguía siendo igual de pardillo que siempre.

"Qué adorable".

- Amor, estoy perfectamente.

Los dos rieron, tímidos, acordándose de la noche anterior:

- Fue muy especial, Clau. Yo...nunca imaginé que esto pasaría con alguien a quien iba a querer tantísimo.

La pelirroja estaba a punto de echarse a llorar. Sentía que estaba salvándole, que poco a poco dejaba de ser aquel chico suicida y antisocial para ser un chico que tocaba en un grupo y tenía a gente a quien querer.

Desde el primer momento supo que Ashton le cambiaría la manera de ver las cosas.

Se vistieron y bajaron. En la planta de abajo se encontraron a Luke y a Michael haciendo el desayuno en calzoncillos y camiseta, cantando canciones de AC/DC con voz mañanera. Ashton se rio. No podía evitar querer a sus amigos.

Avanzaron hacia ellos y Ashton le dio una colleja a Luke:

- Usa vegemite, idiota. Buenos días.

- Buenos días, fiera - dijo él, subiendo las cejas - ¿Cómo fue la gran noche?

- Buah, genial. Ya te contaré. Oye, ¿Cal y Lucy dónde están?

- Creo que han salido a dar una vuelta.

Luke miró a su alrededor. Claudia estaba preparando zumo con Michael mientras se reían:

- Han dormido juntos.

- ¿En serio? ¿Ya están bien?

- Más o menos. Entre tú y yo, Calum me preocupa. Se está metiendo en un lío muy grande.

- Luke, es mayorcito, déjale que haga lo que quiera. Nosotros le protegeremos. Les protegeremos. No puede pasarnos nada malo.

- Ash tío, pareces un hombre nuevo. Cualquiera diría que eras ese chico de horrible camisa morada que miraba a todo el mundo como si le fueran a matar.

Ashton sonrió y ambos miraron hacia Claudia, que ayudaba a Michael a poner la mesa:

- Es por ella. Me juego el cuello a que es por ella.

- Lo es - se giraron para que los demás no les oyeran - es muy raro, tío. Siento que lo que tengo es tan valioso, tan puro. No quiero perderla. Me da mucho miedo perderla.

Ambos se quedaron en silencio:

- ¿Es muy precipitado pedirle que se case conmigo?

- ¡Ash, no seas bobo! Aprovecha ahora que sois jóvenes y salid, ayudaos, follad mucho. Sois la pareja ideal, tío. No lo eches a perder.

- Te voy a pasar lo de "follad mucho" porque lo que has dicho a continuación es precioso. Gracias tío.

Ambos se abrazaron:

- A ver chicos, esto es muy hermoso pero me rugen las tripas. ¿Venís? - dijo Claudia, sonriendo.

- Sí, Clau necesita reponer energías después de anoche. La has dejado seco, Ash - rio Michael.

Claudia le pegó una colleja a Michael y Ashton se sonrojó. Se sentaron a la mesa y comenzaron a desayunar y a conversar sobre los temas más absurdos del mundo. En ese momento, una alarma sonó en el móvil de Michael. Era un número desconocido. Éste descolgó el teléfono y tragó saliva:

- ¿Sí? Sí, soy Michael, de 5 seconds of summer. Espere, ¿nos ha visto en YouTube?

Michael empalideció y a continuación, esbozó una sonrisa que le ocupaba toda la cara.

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