Little brown secret

I hear them calling for you[P5]

2 meses más tarde

Las náuseas y el dolor de estómago se volvieron  algo normal en la vida de Harry, este las atribuía a la falta de su compañero, desde aquel doloroso día en la cueva no había vuelto a ver a louis, ni siquiera había escuchado de el.

Claro que le dolía, le dolía como nada en el mundo, en las oscuras y solitarias noches donde lo único que deseaba era tener al delgado cuerpo de louis a su lado pensaba en cómo habría preferido que louis lo hubiera dejado morir ahí en la cueva.
Otro gran cambió fue que dejó de esforzarse por ocultar el olor a louis con omegas, su padre solo notaba un cambio en el aroma de su hijo pero no lo relacionaba con ningún lobo en específico.

— ¿que te pasa hijo? —

— te lo explicaré cuando dejes de matar inocentes— era la respuesta de Harry normalmente, aunque no se alegraba de la derrota que había sufrido su manada a manos de los lobos blanco pues estos habían usado el mismo veneno que usaron con el, solo que sus compañeros no tuvieron la suerte de tener un alfa que poseyera el antídoto en su sangre y estuviera dispuesto a compartirlo.

Justo en ese momento se encontraba con un fuerte dolor de espalda y ganas de comer raíces

¿Que diablos? Pensó, el era un lobo alfa claro que no se le antojaría una comida que estaba destinada a las cabras.

— tienes que permitir que te examinen hijo — su padre apareció detrás de él — perdí a tu hermana, no te quiero perder a ti también — el hombre  sonaba suplicante.

— estoy bien padre, solo fue un dolor momentáneo —

— pudiste ser envenenado también — dijo su padre acercándose a el

— no, no lo fui, estoy seguro — su padre le acercó un plato de tocino, en el momento que este entró por sus fosas nasales, Harry corrió al baño a vaciar su estómago.

— irás al médico, no hay discusión — Harry intentó negarse pero su padre ya había cerrado la puerta tras de sí, minutos más tarde llegó una omega al lado de su padre a examinarlo.

— ¿cuáles son tus síntomas? — dijo acomodándose un intento de gafas

— dolor en el vientre, vomito, náuseas, dolor de espalda y de cabeza — gruñó molesto por tener que mostrar alguna debilidad

— ¿cuando tuviste tu último celo? —

— hace menos de un mes — Harry recordó el infierno que fue, no podía encontrar satisfacción con nada, cualquier lobo que se le acercara lo asqueaba, su cuerpo solo quería a su compañero, lástima que este ya estaba atendiendo a alguien más.

— tengo que ver si fuiste envenenado, tengo un poco de veneno que recolecté de la cuchilla de un lobo, lo clavaré ligeramente en tu dedo — dijo pidiéndole aprobación al rey, este asintió, no soportaba ver a su hijo en ese estado, parecía un muerto andante.

El cuchillo atravesó fácilmente la yema del dedo de Harry, pero no pasó nada, el alfa no mostraba señales de envenenamiento, la doctora frunció  el ceño y pico un poco más profundo esta vez, pero obtuvo los mismos resultados.

— tú recibiste el antídoto — dijo simplemente, la cara de Harry pasó a blanca inmediatamente y empezó a tragar saliva rápidamente, no sabia que la mordida de louis le proporcionaría eso también .

— lo hice, ahora quiero saber que tengo — hablo con tono autoritario rogando para que su padre no hubiera escuchado el veredicto de la doctora , estaba seguro de lo difícil que sería convencer a su padre de que no era un traidor cuando tenía el antídoto en sus venas.