Little brown secret

I hear them calling for you [pt. 7]

— ¿por que vamos hacia un gran castillo papi ? — preguntó James al ver el lugar a donde se dirigían, habían pasado unas horas desde que Luke había dejado la cueva y aunque al inicio James se encontraba triste las bromas de su papá lograron hacer que se olvidara de el incidente de el castillo.

— dulce cachorro ¿sabes que soy rey? —  James se detuvo de repente y lo miró con sus grandes ojos verdes.

— ¿y tienes corona ? — Harry se agacho para estar de su tamaño y sonrió asintiendo

— una muy grande y pesada, pero te dire un secreto, mis favoritas son las que tú me haces. — una gran sonrisa se dibujó en el rostro de el cachorro — y ahora mismo vamos hacia mi castillo, pero hay un lobo malo escondido, así que tenemos que entrar de una manera muy silenciosa — James hizo el gesto de silencio.

—¿mamá está bien?  Nos va a acompañar? —

— esperó que pronto nos acompañe mamá, ahora es tiempo de dormir — dijo Harry abriendo los brazos, James no dudo ni un segundo y se lanzó a ellos solo para ser envuelto en los cálidos brazos de su padre.

— cuéntame un cuento — pidió con su voz  amortiguada por la ropa de Harry.

— en un reino muy lejano, quizá en otro universo o en otra realidad, había un trovador que soñaba con convertirse en famoso, tenía una voz hermosa aunque muchos lo negaran, el trovador estaba rodeado de amigos pero aún así sentía que algo le faltaba y le rogaba a él universo  que lo completara, un día el joven fue a un concurso para ganar la mano de la princesa, pero en ese concurso encontró a un dulce chico un poco más pequeño que el, en el momento en que lo vio sintió aquella parte que siempre creo vacía llenarse de color, pronto se hicieron amigos y no tardaron en darse cuenta que habían dejado de estar en esa tonta competencia por la princesa y ahora lo estaban por estar aunque sea un poco de tiempo juntos, pasaron los años y aunque no resultaron ganadores se hicieron de 3 buenos amigos y juntos cantaban las aventuras de grandes héroes alrededor de todos los reinos,  el trobador amaba ver como se iluminaban los ojos de su amor al hablar de sus sueños y se juró que haría todo lo que estuviera en sus manos para ayudarlo a cumplirlos, por lo que cuando encontraron a un hombre que juró hacerlos tan famosos que los mismos dioses rogarían por escucharlos aceptó .  El problema era que el costo de esto era dar aquello que más atesoraba, el amor de el joven, con todo el dolor el trovador acerpto y se fue alejando poco a poco de su amante, el chico no lo entendía y aunque al inicio intentó volver a lo que eran antes le fue imposible, el hombre no mintió, llegaron a la sima y más allá, pero con cada paso que daban, el trovador perdía una parte de su ser y de su corazón, pasó el tiempo y el trovador y el joven se volvieron casi desconocidos, el trovador vivía de los recuerdos de lo que solía ser su vida, ambos con ganas de buscarse y decirse todo lo que sentían pero ninguno era lo suficiente valiente, el joven amante derramaba su corazón en canciones con la esperanza de que cuando el trovador las escuchara volvieran a los viejos tiempos, pero el trovador se encontraba perdido entre verdes campos que le recordaban los ojos de el que era el amor de su vida.. se dice que el trovador se posa al lado de los artistas con corazones rotos y les susurra al oído canciones, con la esperanza de que alguno las cante y así la pueda escuchar su amor y que la brisa de primavera anuncia la llegada de el trovador que alegre observa el verde de los árboles buscando el tono más parecido a los ojos de su amante . — al término de su relato James se encontraba dormido en sus brazos.

El cuento de el trovador era su favorito, su madre solía contárselo  desde pequeño y el sentía una extraña afinidad por el joven amante de el trovador, se sentía unido extrañamente a aquel trágico personaje.

Tras unos kilómetros más de caminar, Harry llegó al castillo, protegió a James y entró lo más discreto que pudo, pero fue en vano, el consejo lo esperaba en el salón especial