XI

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*Sugiero escuchar la canción junto con la lectura*


"Todo lo bueno debe llegar a su fin".

Ese fue el pensamiento del matrimonio Nikiforov, después que el patinador Yuuri Katsuki obtuviera su primera medalla de oro, Victor por su parte, no pudo evitar pedirle matrimonio estando Katsuki aún en el podio. La emoción fue grande para todo fan y patinador, incluso el propio japonés resultó estar completamente emocionado en ese momento llevándolo a que unas cuantas lágrimas perlaran sus rosadas mejillas.

Después de 6 meses de constante planeación, además de que Victor luchara por ganarse la bendición de la maravillosa familia Katsuki, decidieron celebrar su boda en Canadá y por problemas de viaje en la familia Katsuki, Victor actuó rápido y celebraron su segunda boda en la maravillosa tierra de Kyushu, Hasetsu. El que Victor viera de nueva cuenta su lindo prometido, ahora no con un traje costoso si no que mantuviera sus tradicionales ropajes hizo palpitar con orgullo y amor el corazón del ruso.

Estaba completamente feliz de casarse con el amor de su vida.

V + Y

El matrimonio Nikiforov se mantuvo activo durante algunos años más, consiguiendo medallas, reconocimientos y demás, pero lo que jamás dejaría de cautivar al público por más que pasaran los años fueron los duetos de ese matrimonio, siempre lograban llegar al corazón del público siendo siempre sorprendidos llevándolos a las lágrimas. Después de eso decidieron vivir de forma plena un poco alejados de la ciudad para así estar fuera del espectáculo un tiempo.

Ahora, Yuuri con 30 años y un Victor de 34 años recién cumplidos decidieron conversar y lograr llegar a un punto donde ambos estuvieran completamente felices. Era el momento perfecto para hacer un poco más grande la familia Nikiforov-Katsuki. Después de esa extasiada plática, decir que no lo comenzaron a intentar cada vez sería mentirle al mundo, pero no lograban nada. Cuando fueron con un especialista para saber si algo andaba mal en alguno de los dos, el doctor dio la buena nueva de que ambos estaban en perfecto estado, solo era cuestión de seguir intentado y esperar, después de todo era común que al planearlo no siempre se diera a la primera. Lo que el doctor sugirió fuera que esperaran el celo del japonés, así podría adelantarse el del ruso y había una gran posibilidad de que, ahora sí, vinieran los cachorros en camino.

Para la llegada del celo de Yuuri aún faltaban un par de semanas para que realmente se hiciera presente pero, después de esa cita con el especialista, Victor y Yuuri lo intentaban cada día y en cada lugar, saber que se ponían un poco lascivos y terminaban haciéndolo en el estacionamiento de algún supermercado ponía un poco nervioso al japonés ya que no creyó que él y su pervertido esposo llegaran a tal grado. No fue, hasta el momento que a Yuuri se le adelantó el celo justo cuando paseaban por el área de bebés, Victor no dudo en tomar a su amado e irse pronto a su querida "madriguera".

Después de estar demasiado tiempo en una habitación no solo por el celo de Yuuri sino por un celo adelantado por parte del ruso, decidieron comer y mantener las esperanzas de que habían hecho todo lo posible para que funcionara, ahora era cuestión de esperar para ver si un cachorro estaría en desarrollo en el interior de Yuuri.

Para su grande sorpresa fue que después de algunas semanas no se veía cambio alguno en el cuerpo de Yuuri, las interrogantes eran grandes pero después todo llego a recaer en el ruso. Con ese par de semanas que pasaron una gran ansiedad atacó el cuerpo de Victor y se alteraba aún más de mantener el olor de su Yuuri cerca o que este estuviera demasiado concentrado haciendo que por consecuencia terminara comiendo de todo. Después de eso, llegaron las náuseas matutinas, y al devolver todo lo cenado la noche anterior, Victor fue inmediatamente a una farmacia. Compró lo necesario para las náuseas y varias pruebas de embarazo.

One-shots || VictuuriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora