Extra III: Alya

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«Hay amistades tan fuertes que llegan a convertirse en hermandad.»

Viaje de Sanación

Extra III

Alya Césaire

...

Alya Césaire creía tener todo lo necesario para ser una gran periodista en el futuro, era uno de sus sueños. El otro, conocer la verdadera identidad tras la máscara de Ladybug.

Y ahora que ese sueño era una realidad, el primero se había vuelto dudoso.

¿Realmente tenía las habilidades para ser reportera? Si fuera así, ¿No debería haberse dado cuenta de que tenía a Ladybug con ella, todo el tiempo? ¡¡Hasta habían dormido en la misma habitación cuando se quedaba en su casa!!

Alya se sentía confundida y aunque Trixx, a su lado, trataba de animarla, la chica de lentes no podía dejar de pensar, en qué había llevado a que su amiga se fuera a buscar "nuevos aires" como les había informado su madre.

—Marinette —fue lo único que pudo pronunciar, cayendo sobre su cama. Se quitó los lentes para apretarse el puente de la nariz— ¿Qué sucedió contigo?

—Revisa el sobre —Trixx voló sobre el rostro de su elegida con una sonrisa—. La elegida de Tikki no actuaría así porque sí...

—Tienes razón —abrió una vez más, la caja que Marinette le había dejado con su madre. Debajo del Portamiraculous, había una foto de ellas dos y Alya tuvo que apretar los labios para no llorar. Bajo la foto había un sobre, lo tomó y al abrirlo, se encontró con una hoja con la letra de Marinette. Ladeó la sonrisa con melancolía, al notar que estaba llena de manchones producto por las lágrimas que su amiga, de seguro, derramó al escribir.

Aspiró profundamente y empezó la lectura.

Querida Alya:

¡Sorpresa, Rena Rouge!

Sí, lo sé. No es la mejor forma de empezar una carta, pero espero que, al menos, te haya sacado una sonrisa.

¿Sabes que eres la mejor amiga que he tenido en toda mi vida? En las buenas y en las malas, siempre has estado conmigo y por eso te elegí para ser mi compañera. Incluso estaba por darte también el miraculous de la Abeja cuando lo perdí y quedó en manos de Chloé.

Junto con Chat Noir, son las personas a las que le confiaría mi vida, sin miramientos.

Bueno, no quiero escribir cosas que ya sabes, así que te dejo esta carta por dos motivos.

El primero, para despedirme. Sucedió algo tras derrotar a Hawk Moth que me afecto de sobremanera. Y sé que soy una cobarde por huir en vez de quedarme a enfrentar la situación... pero... Alya... ¿qué haces cuando la persona que te dio un sueño, te lo destruye? ¿Sabías que yo quise ser diseñadora de modas por Gabriel Agreste? ¿Cómo sigo admirándolo ahora, después de esto? No puedo, Alya, no puedo quedarme aquí, no puedo quedarme en París sabiendo que cuando me toque dar el examen, tras terminar el Lyceé, muchas casas de moda me solicitaran por recomendación de él... ¿Realmente quiero seguir siendo diseñadora? No lo sé... No sé qué quiero hacer de mi vida, ahora que Hawk Moth ha sido derrotado, pero lo único que sí sé, es que quiero irme. Lamento poner tierra entre nosotras, pero no quiero saber nada de ninguno de los Agreste por el momento. Quizás cuando digiera todo, vuelva... no lo sé.

El segundo, es para pedirte un gran favor. Conviértete en Rena Rouge cuando Paris lo necesite. Ya no habrá Akumas, pero el peligro siempre está presente. Cuida de mi gatito, por favor. Él cree saberlo todo, pero es una persona muy sensible. Quizás entre en desesperación con mi partida, pero confió que, entre Nino, tú y Chloé, puedan hacerle compañía. Se lo merece.

Cuídate mucho, Alya. Te quiero.

Marinette Dupain-Cheng

...

Alya bajó la nota, aún más confundida que antes, con un nudo grueso apretándole la garganta. ¿Qué había pasado en esa batalla? ¿Sería Gabriel Agreste, Hawk Moth? Solo así, tendría sentido el discurso de Marinette.

Suspiró, volviéndose a acostar en su cama.

—¿Qué te han hecho amiga?

Cerró los ojos con impotencia, pero los abrió cuando una notificación de Instagram, la alertó.

Apretó los labios y no pudo evitar derramar las lágrimas que la habían acompañado todo el día. El Instagram de Marinette había sido actualizado.

Ella salía con una sonrisa frente al «Arco de la Paz» un monumento muy conocido de Milán, similar al «Arco del Triunfo» de Paris.

"Ya sé a dónde venir cuando extrañe mi amado Paris. Gracias por traerme @Gina_Dupain." #ConMiNonna #ArcodelaPaz #Italia #Milan #NuevaVida #NuevosAires #DupainPorElMundo

El pie de la foto le dio a Alya las respuestas a algunas de sus interrogantes. Marinette estaba en Italia, en Milán, con su abuela.

Le dio un corazón a la foto y, luego, tocó para dejarle un comentario.

«Disfruta, encuéntrate contigo misma y sánate. Mis mejores deseos en tu nueva vida, amiga. No te preocupes, esta chica, junto a su tortuga, cuidarán muy bien de tu gato ;)»

Iba a dejar su teléfono a un lado, cuando observó que tenía una respuesta. Marinette le había respondido con un emoticón, lanzando un corazón.

Aspiró profundo y dejó a un lado su celular para tomar a Trixx con ambas manos.

—¿Alya? —dijo el Kwami de la ilusión, observando intrigado a su portadora con sus enormes ojos violetas.

—Marinette está bien —le dijo—, va a estar bien. Ella siempre puede con todo, ¿verdad?

—Es Ladybug de quien hablamos —respondió Trixx—. Tikki, está con ella.

—¿De verdad? —la morena se sorprendió. Por un momento, llegó a pensar que había entregado su Miraculous. Suspiró aliviada, al saber que no era así... Que, en alguna circunstancia, podrían volver a pelear, juntas.

Ese era su nuevo anhelo, ahora.

—¡Bien, Trixx! —dijo, poniéndose de pie— ¡Creo que debemos dar una ronda! Quizás el gato esté aullándole a la luna llena.

—¡Tú ya sabes! —dijo el Kwami, flotando frente a ella—. Solo di las palabras.

—¡Trixx, transfórmame!

Y en cuanto Rena Rouge apareció en lugar de Alya, la chica usó su flauta mágica para salir de su casa.

Tenía la corazonada de que, esa noche, habría más de un corazón roto que cuidar.

...

¡Gracias por leer!

Próximo Extra: Extra IV: Adrien Agreste.

Publicación: 11 de Febrero.

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