Preguntas

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“La vida a veces resulta más fácil cuando aprendes a interpretar silencios en lugar de pedir respuestas.” Paulo Coelho

Me aleje tanto de mis amigos estos meses –apenas me doy cuenta que tiene mucho que no hablamos de otra cosa que no sea yo y tratar de animarme.

Matías termino con su novia y ni siquiera ¡reaccione! –Ruth sigue con Ricardo pero no sé ni cómo va su relación  y ¡por Dios! No sé nada de David.

Esta mañana decidí arreglar las cosas con ellos –mi orgullo aumento tanto desde que me sentí herida por Gerardo, pero sé que tengo que hacer esto ¡debo hacerlo!. –con Matías es todo sin complicaciones ¡me encanta! –Ruth sé que no merece como me he comportado, le he ofrecido disculpas y me comprometí a echarle ganas y tratar de cambiar ¡de ser buena amiga!

Aún no he podido hablar con David –anda de zorro y desde hace tiempo que ya no pasa mucho tiempo conmigo. –no me quiere molestar y sabe que necesitaba tiempo sola ¡creo que ni necesite decírselo, me conoce bien!  Y se la pasa siempre con Alonso y ahora también con Matías –eso me gusta, que todos mis amigos estén juntos y que los chicos por fin le dieron la oportunidad de conocerlo y lo aceptado. –también regañe a Matías para que dejara un poquito de ser tan pesado y también se diera la oportunidad de hacer amigos.

Hoy no te me escapas animalito –le dije a David –¿nos vamos juntos? Ruth se va con su novio.

Claro, changa ¡hace tiempo que no la pasamos juntos, te extraño! –me respondió.

Siempre nos andábamos cambiando los apodos, solo se nos ocurre algo y no lo decimos –cuando me enojo con el porque me gana en algo o me desespera le grito que es un ¡animal! –jaja y de cariño a veces en lugar de decirle pulga o gatito le digo ¡animalito!

¿Cómo sigues gatis? –me pregunto David. Jaja ¡no ehh! Ni pretendas cambiarme el tema. Voy mejor lo sabes ¡pero debemos hablar de ti ok! –le respondí.

¿Qué quieres saber? –me dijo. –¡lo siento pulga! Te he dejado en el olvido este tiempo ¡pero no te hagas menso! Sé que algo tienes dime que es –respondí.

--Jaja no me pasa nada gatis., solo es tu imaginación. Además ya es tarde es mejor irnos a nuestras casas. –jaja no pulga ¡yo sé que algo tienes! Has estado muy apagado estos días ¡tú no eres así! Y a mí no me salgas con que irnos a nuestras casas. Vamos al parque a platicar ¡ok! Aunque no quieras, me preocupas y sabes que te quiero. –está bien vamos.

Ahora si ya estamos aquí, vamos a platicar tranquilo –le dije una vez que llegamos al parque y nos sentamos en una banca.

Tú ganas gatis, si me pasa algo –me dijo.

Pues dime que es –respondí.

--Aun no olvido a Sofía. Fue mi primer amor !sé que ha pasado casi un año! Y aun me pregunto porque me engaño, pero sobre todo que si no lo hubiera hecho ¡aun seguiríamos saliendo! Creo que ya tiene novio ¡me duele!

--¡vamos pulga! Desearía tanto decirte que luches y lo intentes de nuevo con ella, pero ambos sabemos que eso ya no es posible. El año pasado después de que te engaño, meses después volvieron intentarlo y no funciono. Tú ya no confías en ella, solo crees que te va a engañar y ya no es lo mismo. ¿No por eso terminaron y lo dejaron todo por la paz?

--¡lo sé, gatis! Pero no sé qué hacer.

--sabes pulga, con Gerardo me estuve meses torturando preguntándome ¡¿Por qué?! Y Pensando en que si hubiera hecho esto o aquellos, imaginando que sería si no hubieran pasado ciertas cosas. Pero ¡basta niño! Es como siempre nos dice Ruth las cosas siempre pasan por algo. Creo que es verdad y debemos dejar de torturarnos pidiendo respuestas, saberlas no cambia el pasado. Y ¡él hubiera no existe! cuando tomamos ciertas decisiones lo hacemos viviendo en el presente y en ese instante pensamos que es lo correcto. Nosotros mañana podríamos arrepentirnos de haber venido hoy al parque y deseando no haberlo hecho “hubiéramos hecho otra cosa” ¡nos arrepentimos de las cosas que hacemos, de las que existen. Jamás nos vamos a arrepentir de cosas que no existen ¡nos vamos a arrepentir de haber venido al parque, porque venimos al parque y vimos que no nos gustó! Pero si no hubiéramos venido al parque no tendría de nada que arrepentirme ¡porque ese momento no existiría! A veces nos arrepentimos de lo que hacemos ¡pero siempre después de hacer! y ¿Por qué no hacemos otra cosa? ¿Por qué venimos al parque? Porque eso decidimos ¡no sabíamos que mañana nos arrepentiríamos! ¡Siempre después, lo que no hacemos no existe! Pulga es hora de seguir otro camino y tratar de ser mejores cada día, siempre luchar y no darnos por vencidos ¡dejar el pasado atrás!

--sabes gatis ¡te quiero demasiado! Siempre has sabido decirme las palabras correctas y tienes razón ¡hora de seguir hacia adelante!

Ven acompáñame –le dije y lo agarre de la mano, lo lleve a un puesto de pulseras que había visto a lo lejos cuando llegamos al parque.

Buenas tardes señora me da este por favor –le dije a la señora que atendía el puesto, mientras le señalaba un cadenita con un corazón que se podía partir en dos.

¿Qué haces nena? –me pregunto David cuando me vio que había pagado por la cadenita y estaba partiendo el corazón y le entregaba una mitad.

Tómalo –le dije –quiero que esta cadenita represente una promesa para nosotros ¡prometamos que jamás nos vamos a dar por vencidos en la vida! No más ¿porqués? Ni arrepentimientos ¡lucharemos por nuestros sueños y seremos felices ¿te parece?

--¡aww! Nena no sé qué decirte ¡pero por supuesto que acepto! Y ten por seguro que esta promesa jamás la romperé ¡yo cumplo todas mis promesas siempre! Y esta cadenita nunca me la quitare.

--¿prometido pulga? --¡prometido gatis! Y después nos abrasamos.

Este día jamás lo olvidare –son tan lindos los momentos que paso a su lado ¡adoro a ese niño! –pensé mientras estaba en mi cuarto tratando de dormir.

El amor se apiado de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora