El amor se apiado de mí

¡Otra vez no, por favor!

“Esperar, por favor asesinemos a esa palabra “esperar”. No quiero oírla más; que ya no exista.” Jaime Sabines

Sabes gatis, ya he tomado una decisión –dice el mensaje que me envió David

¿De qué hablas, feo? –le respondo.

--¡nunca más volveré a caer por Alejandra! Tenías razón. Gracias por ser siempre tú la que me hace entrar en razón y me cuida ¡siempre estas para mí!

--solo me gustaría verte feliz, eso es todo. No sé qué te llevo a tomar esa decisión o que paso, pero si es lo que quieres me alegro por ti y sé que te duele pero tú podrás, ya lo hiciste una vez.

--ya comprendí muchas cosas y por cierto leí lo que me envías ¡gracias!

--te lo debía, pulga

--¿nos develamos hablando, como en los viejos tiempos?

--¡oww! Claro jaja sería fantástico, empieza.

--jaja mensa ¡volvemos a inventar historias!

--¡vale!

--sabes ¡algún día nos casaremos!

--jaja ¡claro! Pero yo educo a los niños ellos no pueden ser unos zorros como su papá

--seria lindo no lo crees ¡eres prefecta! Y no, tienes prohibido educarlos ¡de eso me encargare yo!

--jaja seria lindo, pero mejor deja de jugar. Empecemos a inventar historia.

--¡no estaba jugando! Pero si mejor, había una vez una caperucita roja que salió al bosque para que el lobo la violara.

--¡jajaja tu jamás cambiaras gatito!

Fue maravilloso desvelarme ayer hablando con él ¡ya lo extrañaba! Y ocurrieron cosas fantásticas en esa plática ¡con el he hecho cosas que jamás en la vida creí hacer! vivir el momento ¡disfrutar! –solo no quiero ilusionarme, tengo que tener mis ideas claras.

¡A veces es inevitable no odiarlo! Es lo que detesto de él, antier la pasamos súper bien, creí que las cosas podían mejorar –pero me equivoque. Nos desvelamos, olvidamos todo y fuimos gatito y boo por esa noche. A ser lo de antes, hicimos cosas que son nuestro secreto, pero pasan los días y se vuelve a alejar de mi ¡estoy cansada! Es hora de arreglar esto de una vez ¡no quiero que termine, pero tampoco podemos seguir así. Aunque me duela en el alma!

¿Qué está pasando pulga? –le mando un mensaje a David

¡Nada, todo está bien! –me responde

--jaja claro, lo olvidaba. Si tú lo dices, que tengas bonito día vale

--¡eso es lo que pasa! Tú me has culpado de todo estos meses ¡ya no crees en mí y eso me mata!

--estoy intentando creer en ti ¡pero tu actitud no me ayuda en nada!

--¡sé que te mentí y falle! Pero ahora estoy haciendo las cosas bien ¡y tú nunca me crees!

--¡lo intento! Pero no puedo, me lastimaste demasiado

--¡ese va a ser el problema siempre!

--tu no pones mucho de tu parte ¡en un principio trate de que enfrentáramos lo que sucedía y tú siempre lo evades!

--¡estoy harto de esto! Ya no tenemos nada de qué hablar

--¡Solórzano!

¡Siempre tarde! –cuando me tranquilice pensé mejor las cosas, pero siempre me doy cuenta de todo demasiado tarde, le he rogado por días ¡no responde ningún mensaje! Esta vez fui yo la que falle.

Pensé que si esto nos pasaba de nuevo –no sabría cómo resistiría ¡rogué para que me perdone! Pero es tarde ¡quisiera creer que esta no se vuelve a repetir, quiero rogar para que esto sea mentira! Que esto no vuela a pasarnos, por favor.