Pᴀᴛɪᴇɴᴄᴇ |Axl Rose|

Capítulo 3.

—Pati,eres muy bonita —murmuró un pelirrojo bastante ebrio,observando desde la cama a su mejor amiga que peinaba su cabello húmedo.

—No digas tonterías William,estás muy ebrio —rió ella con burla,observándolo reflejado en el espejo de su mesita de noche.

William Bruce Bailey había llegado ebrio a casa de su mejor amiga,sabiendo que la castaña le recibiría con los brazos abiertos y cuidaría de él hasta que se le pasara la borrachera.Pero milagrosamente la encontró sola en casa,sus padres habían viajado a Apple Valley para celebrar el cumpleaños de la tía Inés.

Aquél había sido quizás un golpe de suerte con el que William no contaba,ahora se encontraba acostado en la cama de su mejor amiga,recién duchado,viéndola peinar sus cabellos húmedos debido a que también acababa de tomar una ducha.

—¿Como es que me quieres tanto? —se sentó en la cama,mirándola con tristeza.

Patience volteó a verlo,un pequeño suspiro escapó de sus labios a la vez que se levantaba y se echaba a su lado.Estaba acostumbrada a los cambios de humor de su mejor amigo,especialmente estando ebrio,era como un niño.

— ¿Como podría no quererte?  —lo miró,sonriendo con melancolía.  

—Digo,mi padre es un abusivo y mi madre es su sumisa —suspiró—.Tú e Izzy son lo único que me queda en este lugar,son lo que me mantiene aquí    —añadió.

—Siempre estaré para ti y lo sabes  —la castaña se sentó para observarlo mejor y recargó la cabeza en su hombro—. Tus padres son unos idiotas al tratarte como lo hacen —besó su mejilla.

El pelirrojo sonrió,definitivamente tenía a la amiga más dulce de todas.Con Patience,su asquerosa vida era menos amarga; no podía perderla.

—No sé que haría sin ti,Pati  —murmuró mirándola fijamente.

Un deseo repentino se acrecentó en su interior, la parte impulsiva de su ser luchaba en ese mismo instante con la racional que le impedía estampar su boca contra la de aquella hermosa castaña.Tenía los labios bastante rojizos esta noche,extremadamente apetitosos y entreabiertos; fue en ese instante en que notó que Pati había empezado a jadear ante la cercanía de sus rostros.

—William —gimoteó ella,agobiada por su cercanía.

—¿Qué pasa? —interrogó el mencionado,con voz ronca. 

No quería alejarse,quería besarla en ese preciso instante,besarla hasta que le dolieran los labios y después follarla ahí mismo.

—Estás muy cerca  —murmuró ella con un hilo de voz.

—Dime que no te bese,Patience y más te vale que me hagas creer que lo dices enserio  —le advirtió él,humedeciendo sus labios,a apenas unos centímetros de su cara.

—No me beses —murmuró ella,luego tragó saliva.

—Inténtalo otra vez —dijo él y empezó a inclinarse hacia el cuerpo de ella.

—No me beses —repitió la castaña,mientras se recostaba en la cama.

—Una vez más  —siseó él—. Y más te vale que logres convencerme,porque es tu última oportunidad —acarició una de sus piernas con la yema de los dedos,provocándole escalofríos a la mujer debajo de él.

Patience gimió en respuesta a su caricia,luego inspiró profundamente.

—No me...—Otro gemido,la caricia iba ascendiendo hacia su costado.

Él rió,lleno de triunfo y capturó sus labios con fiereza.

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