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Era silencioso, grande, brillante y fresco, no había mucha gente alrededor y se encontraba en la planta superior del salón de profesores por si alguien tenía alguna duda.

SeungHyun estaba muy satisfecho.

—Esto está genial.

Sabía que tenía que estudiar bastante. Cuando le preguntó a un amigo como mejorar sus calificaciones, su amigo le dijo que iba a una aula de estudios después de la escuela. Había estado tentado de irse directamente a casa después de clases, pero pensó que se distraería con la televisión o tomaría una siesta. Así que era más fácil concentrarse en el salón de estudios.

—¡Oohh, estoy impresionado!

SeungHyun se sorprendió al escuchar la voz tan cerca de su oído. Ji Yong se sentó a su lado y el rostro de SeungHyun se enrojeció inmediatamente. Ya que no lo había visto durante un buen tiempo, Ji Yong parecía ser mucho más bello, lo que logró que al ver su rostro el joven se sintiera mareado.

—Estoy aún más impresionado que hayas estado tan concentrado que ni siquiera me hayas notado —susurró Ji Yong.

Sólo había unos cuantos estudiantes que aún se encontraban en la escuela y había otros que estaban sumergidos en sus estudios, así que afortunadamente ninguno de ellos se percató de Ji Yong. SeungHyun tenía tantas cosas que quería decirle a Ji Yong, pero estaban en el salón de estudios. Además de que su corazón latía tan fuerte, su rostro estaba rojo y no podía encontrar las palabras que quería decir.

—Por cierto, Choi, ¿apagaste tu móvil? —preguntó Ji Yong.

—¿Mm? Eh...

SeungHyun rápidamente sacó el móvil de la mochila para revisarlo.

Justo cuando revisó la pantalla, Ji Yong le dijo: —Ah, entonces no lo olvidaste otra vez en casa —y le quitó el móvil de las manos.

—No-no es como si olvidara cosas todos los días —murmuró SeungHyun.

—Porque no eres un estudiante de jardín de niños, ¿cierto? —dijo Ji Yong riendo—. No lo apagaste, pero lo tienes en vibrador. Buen chico.

—Oh, bien... ah, Profesor, ¿qué estás haciendo?

Ji Yong se encontraba presionando botones.

—Viendo el historial de llamadas de tu móvil, —respondió. Luego movió los labios para decir: —Porque somos amantes, ¿cierto?

El corazón de SeungHyun latió rápidamente. Trató de recuperar el móvil pero Ji Yong no se lo permitió.

—¡Devuélvemelo, Profesor! —le suplicó.

—¡Shh! ¡Esta es un aula de estudios! —dijo Ji Yong pícaramente y luego le devolvió su móvil.

—¡Cielos! —Ji Yong revisó la pantalla y vio el extraño número de diez dígitos en ella—. ¿Es-es este tu...? —Se dio la vuelta inmediatamente, pero Ji Yong ya se había ido.

SeungHyun automáticamente presionó el botón para guardarlo. Ahora el número estaba guardado en su lista de contactos. Si hubiese recibido una llamada antes de guardarlo, el número se hubiera perdido. Pero ahora estaba a salvo.

Luego, SeungHyun accidentalmente presionó el botón para marcar. La llamada fue exitosa, Ji Yong podría regañarlo por usar su teléfono en la escuela. Cuando estaba a punto de colgar, escuchó la voz silenciosa de Ji Yong decir: —¿Hola?

No podía colgar ahora. Aun cuando lo regañara, ¡no quería colgar!

—¿Hola, Profesor?

—Sí,... oh, eres tú ¿Choi?

『Amantes prohibidos』 » GTOPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora