Aunque hablar con Mina la había ayudado a sentirse un poco más tranquila, Serena seguía inquieta y preocupada porque sentía que sus actos y decisiones podían terminar por herir tanto a Seiya como a Darien, así que algunas noches le costaba conciliar el sueño.
Aquella había sido una de esas noches y, cuando por fin pudo dormir, en sus sueños se encontraba en ese mismo camino oscuro que sus visiones oníricas le mostraron la noche que se quedó en el campamento con Seiya.
Pero esta vez, al llegar al sendero dividido, en un lado del camino era la voz de Darien la que la llamaba, mientras que en el otro era Seiya quien pronunciaba su nombre.
La ansiedad se apoderaba de ella al no saber hacia dónde ir y entonces, una voz llena de paz y serenidad le decía en un murmullo "las respuestas que buscas están en lo profundo de tu corazón... la luz de la Luna te puede guiar, ve hacia ella", y entonces, despertó.
- ¿La Luna? - pensó - ¿eso significa que debor ir a la Luna? ¡Claro! Cómo no lo pensé antes, seguro Luna y Artemis me pueden ayudar a resolver todas las dudas que tengo y que me impiden tomar una decisión.
Sin que ninguna de las dos lo sospechara, muy lejos de Tokio, en un edificio ubicado en el centro de Londres, Setsuna tenía las mismas dudas que no la dejaban tranquila.
Además, estaba preocupada porque su talismán, el Orbe Granate, había estado vibrando con una energía extraña durante los últimos días, no era un aura maligna, pero sí fuera de lo normal, y se preguntaba si se debía a que lo sucedido con Darien estaba empezando a alterar el futuro de alguna manera.
En una de esas noches, en medio de un sueño, también escuchó esa cálida voz que le hizo saber que debía visitar el reconstruido reino lunar.
- Eso significa que debo ir a la Luna, seguro Luna y Artemis pueden ayudarme. Y tal vez también sería bueno visitar la puerta del tiempo - se dijo a sí misma - Pero necesitaré la ayuda de Uranus, Neptune y Saturn para ir a la Luna, así que debo regresar a Tokio... aunque no sé cómo voy a decirles esto a todos - pensó sintiendo cómo se sonrojaba sólo de imaginar que tendría que confesar sus sentimientos por Darien a sus amigos.
Al día siguiente, Michiru estaba terminando de desayunar junto con Haruka, cuando el teléfono sonó y en la pantalla del identificador de llamadas apareció un número extraño, que parecía ser del extranjero.
- Qué extraño - comentó - es un número que no es de aquí, parece ser de otro país... me pregunto quién será.
- Si no lo conoces, tal vez sería mejor que no contestaras - advirtió Haruka.
- Pero, ¿y si es algo importante? voy a contestar y si no reconozco la voz, cuelgo de inmediato... Hola - dijo al atender la llamada y una expresión de sorpresa y alegría apareció en su rostro al escuchar la voz al otro lado de la línea.
- Hola Michiru, soy Setsuna.
- ¿Qué? ¡No lo puedo creer! ¿Dónde te has metido todo este tiempo? ¿por qué desapareciste de esa manera?
- Pronto habrá tiempo para contarte... el fin de semana estaré por allá y quería saber si siguen viviendo en el mismo lugar.
- Sí, todavía estamos en el departamento que conociste - respondió poniéndose de pie para salir a hablar a la terraza, mientras Haruka se quedaba terminando su desayuno y con una cara de intriga.
- Tengo mucho qué contarte... dime si ahora puedes hablar o si puedo marcarte más tarde cuando Haruka no esté... prefiero hablar primero sólo contigo.
- Vaya... debe ser algo grave e importante.
- Algo así.
- Ahora está por irse al autódromo y se tardará un buen rato, si quieres te marco cuando se vaya... ¿puedo al menos decirle que eres tú quien llamó? si no, no quiero imaginar cómo se pondrá.
- Claro - respondió Setsuna sonriendo, pues sabía bien lo celosa que era Haruka.
- Bueno, entonces guardaré tu número para marcarte más tarde.
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UN NUEVO CAMINO
Romance¿Qué pasa cuando alguien de tu pasado reaparece y te hace cuestionarte si el rumbo que ahora lleva tu vida es el que realmente quieres seguir? 5 años después de haber logrado vencer a Sailor Galaxia, esto es lo que les pasa a Serena y Darien, quiene...