Narra Ari.
Este no es el Max del que me enamoré. Está demacrado, parece muy cansado y tiene ojeras.
Max: ¿Y tú qué haces aquí? -dice borde-
¿Y qué esperabas Ariadna? Le dejaste plantado en el altar, no esperes que salte a tus brazos.
Y en realidad le comprendo al máximo, yo en su lugar ni siquiera sé cómo me sentiría.
Ari: Vengo a hablar contigo y a darte las explicaciones que te mereces.
Max: ¿Y no tuviste suficiente con dejarme plantado en el altar, que tienes que venir con él aquí? -escupe lleno de rabia-
Pablo en todo momento es solo un espectador de la historia. No quiere meterse por evitar problemas y lo veo bien.
Ari: Max, relájate -le pido- Sé cómo te sientes.
Max: ¡¿Qué sabes como me siento?! -grita- Permíteme que lo dude -dice con sarcasmo- Tú lo que no tienes es vergüenza, eres una zorra sin sentimientos.
Pablo: Eh -no me da tiempo a reaccionar porque se encara con él- Yo estoy dejando que arregléis vuestras cosas y habléis pero, lo que no voy a permitir es que la faltes el respeto y menos delante mío.
Max: Tranquilos todos que llegó el novio del año -dice con ironía- ¿Y tú qué? ¿Ya no te acuerdas de cuando la dejaste tirada hace años después de haber perdido el bebé que esperabais?
¡Pum! Parece que si no lo suelta, revienta.
La cara de Pablo es un poema. Lo conozco y una parte de él quiere liarse a golpes con Max pero, sé que no lo hará por mí porque sabe que esto es muy duro y me quiere hacer las cosas fáciles.
Ahora mismo siento ganas de llorar por lo que me ha dicho. Siento que no es de él del que me enamoré hace años.
Vale, yo me fui con Pablo de mi boda dejándolo a él en el altar pero, eso no le da derecho a tratarme como lo está haciendo.
Ari: Max -me meto entre ambos- Sé que estás dolido y herido pero, creo que no es este el trato que me merezco.
Max: Ay, pobrecita... ¿Crees que te trato mal? -su sarcasmo me está matando, lo juro- ¿Y tú a mí? ¿No me has tratado a mí mal dejándome humillado en el altar, desapareciendo y hullendo con tu ex de tu propia boda? ¿Con qué cara crees que me quedé yo al ver como te ibas con él? ¡Ah no! Como vas a verme la cara si desapareciste hasta el día de hoy.
Ari: Yo lo siento mucho, he venido aquí con toda la buena intención de darte las explicaciones que quieras pero, veo que no estás muy receptivo.
No pensé que fuera a ser así de difícil.
Ari: Siento que tú no eres la misma persona de la que me enamoré.
Max: En eso estamos de acuerdo los dos, tú tampoco eres la misma persona de la que me enamoré.
Ari: No sé que más hacer, así que si algún día quieres hablar sobre esto o saber porqué lo hice.. Ya sabes donde encontrarme.
Me doy la vuelta para marcharme de allí con Pablo.
Max: Ojalá no vuelvas a mí otra vez rota y herida porque él te ha vuelto a fallar como lo hizo antes -dice a mitad de camino-
Pablo, sin decir nada, coge mi mano y entrelaza nuestros dedos.
Pablo: No dejes que te llene la cabeza de cosas que no son, por favor -me dice cuando nos metemos en el coche- No volveré a hacerte daño, te lo prometo.
Volteo a mirarlo y su carita es como la de un niño asustado. Sé que tiene miedo de que le diga que no confío en él y que creo que Max tiene razón pero, no es así.
Ari: Amor, yo confío en ti -le doy una tímida sonrisa- Puedes estar tranquilo.
Él sonríe y besa mi frente.
Ari: Siento que las cosas hayan ido así con Max... Yo le entiendo y entiendo que esté así pero, ni siquiera me ha dado la oportunidad de explicarle nada.
Pablo: No tienes que sentir nada, cariño... -toma mi mano- Yo siento que me hayas tenido que ver así de enfadado con él pero, no he podido soportar la forma en la que te ha tratado y como te ha insultado. Si hay una cosa que no voy a tolerar es que te falten el respeto, ni él ni nadie.
Sonrío.
Pablo: Te juro que he estado a punto de romperle la cara por como te ha tratado en todo momento.
Niego con la cabeza.
Ari: Créeme que no merece la pena. Pero bueno, tal vez en algún tiempo podamos hablar sin rencores -suspiro-
Pablo: Si eso te hace feliz a ti, ojalá que así sea -sonrío-
Me hace tan feliz que se preocupe así por mí y que siempre quiera verme bien... Siento que somos dos personas nuevas. No quiero decir que antes no quisiera lo mejor para mí, sino que, ahora somos dos personas más maduras, que han vivido más experiencias en la vida que nos han hecho madurar y forjarnos en lo que somos ahora.
Pablo: ¿Dónde vamos ahora?
Ari: A casa de mi madre -me pongo el cinturón de seguridad y él hace lo mismo- Estarán todos allí, anoche les puse un mensaje.
Asiente y arranca el coche
Pablo: Sólo espero que allí vayan mejor las cosas... -me mira por el rabillo del ojo-
Ari: Yo también lo espero... -miro por la ventanilla- Aunque es mi familia, deberían ir mejor por naturaleza, ¿no?
Pablo: Sí, eres sangre de su sangre, en teoría te tendrían que apoyar en tu decisión de lo que tú crees que es lo mejor para ti.
Ari: Y lo mejor para mí eres tú porque te amo -digo muy segura de mis palabras-
Pablo: Me grabaría esas palabras y me las podría en repeat todos los días y a todas horas -río-
Ari: ¡Exagerado!
Pablo: Eh -toma mi mano, mirando a la carretera- Yo también te amo.
Besa mi mano sin dejar de mirar al frente.
Da igual cuantas batallas tenga que librar si el resultado va a ser este, estar feliz junto a él.
Nota de autor.
¡Familiaaaa!
Sólo vengo a deciros que aunque no me quería ilusionar por los Grammy, ya es un poco tarde para eso porque me he ilusionado y deseo con todo el alma que se lo den a Pablito 🙏
Y bueno, básicamente era eso, compartir mi inquietud con vosotros y que ojalá podamos celebrar, después de muchos años, que el Grammy por fin se va para Málaga porque se lo merece 💛👏
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Vamos a volvernos eternos.
FanfictionPablo y Ari, dos personas separadas por segunda vez pero, esta vez no hubo terceras personas ni amantes. Esta vez hubo algo más doloroso, la pérdida de un hijo. Él no estuvo cuando ella más lo necesitaba, ella no pudo con todo sola y se marchó. ¿Se...