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Dedicado a las que lo pidieron ahre <3

La clase de Música estaba por comenzar.

Finn estaba emocionado, pues la semana pasada, el profesor le había pedido a Millie que, ese día, hiciera una pequeña demostración de la melodía que intentarían aprender durante las siguientes dos semanas. Por otra parte, la castaña moría de nervios, desde el jueves, que fue cuando el profesor se lo pidió, había estado practicando esa pieza, una y otra vez, Finn estaba consciente de ello, pues la había estado acompañando por las noches.

El pelinegro decidió sentarse junto a la chica, de esa forma, podría intentar animarla y que no estuviese tan nerviosa.

Después de unos cuantos minutos, el profesor dio inicio a la clase, fue el momento en que Millie se puso aún más nerviosa.

—Tranquila, Mills. —Le dice el pelinegro, en un susurro, tomando su mano. —Todo saldrá bien, justo como en los ensayos.

Ella solo sonrió.

El profesor hizo una pequeña introducción de lo que estarían viendo durante las siguientes dos semanas y, después, pidió a la castaña que pasase a tocar una pequeña parte de la pieza que intentarían aprender. La castaña obedeció y al estar frente a todos, su mirada se posó en Finn, quien le sonrió, dándole seguridad. Soltó un pequeño suspiro y comenzó.

Finn la miraba asombrado, aún le sorprendía la perfección y facilidad con la que la castaña tocaba el piano, sin ningún error.

Tan solo unos minutos después, la castaña se detuvo, los demás en la clase aplaudieron, Finn más que todos. La chica volvió a su asiento, sonriéndole a el pelinegro.

—Mejor que en los ensayos. —Dijo Finn, sonriendo. —Creo que tendrás que darme clases privadas si quieren que yo aprenda eso.

Ella ríe. —Estoy segura de que no será tan difícil, Finnie.

—Hablas con el chico que apenas sabe las notas musicales. —Literalmente, a Finn le costaba memorizar las cosas y las notas musicales eran unas de ellas.

—Bueno, estaré ayudando a los demás, si necesitas ayuda, llámame. Pero, puedo apostar a que no necesitarás mi ayuda. —Dijo, para después levantarse y buscar a alguien que necesitase ayuda.

El pelinegro miró con curiosidad unos botones que estaban en la parte superior del teclado que estaba frente suyo y, sin más, los presiono, haciendo que el teclado emitiese distintos sonidos o ritmos. Finn intento apagar los sonidos, pulsando otros botones, al no lograrlo, miro a Millie con pánico.

Millie se acercó y simplemente tocó el botón de "Apagado" y fue más que suficiente para que los ruidos dejasen de escucharse. No toda la clase miro ese pequeño momento de pánico de el pelinegro, pero, los que lo hicieron, morían de risa, al igual que la castaña.

—¿Sabes que? Me quedaré aquí. —Dice, riendo.

—Buena elección. —Sonríe.

Finn era un desastre.

Me costo terminar esto, no tenía idea xd

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Me costo terminar esto, no tenía idea xd.

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Piano || Fillie (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora