Vida.

8.3K 341 61
                                    

-Hola Valentina, Guille me dijo que estabas aca y lo estoy esperando para ir a comer ¿Te molesta si paso el rato contigo?-

-No, para nada...- Valentina dejo lo que estaba haciendo en su telefono para ponerle atención a quien era su cuñada.-¿Como la estas llevando con ese insoportable?-

-Bien...- Renata no sabia si reir con ese comentario, resultaba ser que Guille si podia resultar un poco dificil si se lo proponia.

-Renata...puedes ser sincera...- Dijo Valentina poniendo su mano en su hombro con una sonrisa.

-Es que...ok, no limpia nada y no le gusta mi gato.- La castaña fruncio el ceño pero con diversión, obviamente esas quejas no aminoraban para nada el amor que sentia por el varon Carvajal.

-¿Vamos?- Guille apareció acomodandose la ropa.

-Tienes mi permiso de golpearlo...- Valentina se le acercó para susurrarle logrando hacer reir a la otra.

-Te tomare la palabra.- Renata termino de decir justo en el momento en el que Eva aparece poniendole tensión a la casa.

-¿Se iban?- Dijo la mayor de los hermanos mirando a Renata.

-Si, ya nos ibamos...justo a tiempo...- Dijo Guille. Le fue a dar un beso tierno en la frente a Val.- Cuidense...no se te vaya a pegar lo amargada.- Termino susurrando.

-Yo también tengo que hacer.- Mentira. Valentina lo que menos queria era estar en la misma habitación que Eva.

-Quiero hablar contigo.- Sentencio la otra cuando la pareja se fue y antes que Valentina tomara su propio rumbo.

-¿Mmm?- Dijo sin mirarla demasiado. Eva se fue a sentar a su lado y la observó, la menor podia sentir aquellos ojos electricos tan profundos sobre ella y no sabia que pensar o decir.

-Tu sabes lo que te encontre haciendo el otro día...-

-Si vas a darme un sermon...- Contestó un poco a la defensiva.

-No es ningún sermon Valentina...solo me sorprende, ya sabes, eres mi hermana menor ¡Por Dios!- Eva logro que su hermana la mirara. Hizo un gesto exagerado cuando recalco el "por dios" admirablemente no estaba en ese tono tan mandon que siempre usaba.

-Pues no sé que quieres que diga, sabes muy bien que estaba haciendo...- Las mejillas de Valentina se encendieron de inmediato.- Y no me arrepiento ...-

- ¿Puedes entender mi preocupación por la imagen de esta família? - Pregunto Eva.

-Si...- La mayor por poco refleja alivio en su rostro.- Pero no lo comparto, Eva...hasta que no cambies de opinion respecto a tus prejuicios sociales no vamos a poder resolver nada.-

-Ya veo que no tengo remedio...- Eva la miro un poco confundida.- tan solo trata de evitar ese tipo de conductas Valentina...menos si no son privadas. Y esto no significa ninguna aprobación, asi que no creas que esa chica puede aparecer como pedro por su casa como la sin vergüenza de Renata...- Valentina rodó los ojos al escucharla, iba tan bien, pensó.

-No voy a discutir...-

-Yo tampoco quiero discutir Valentina, aunque les cueste entenderlo, son mis hermanos.- Sentenció Eva. Ella solo asintió y se levanto para ir al su cuarto.

Se sentó en su cama y abrió su laptop, revisaba sus redes sociales, varía gente la seguia molestando por su relacion con Juliana y que ellas fueran de "distintas sociedades" no ayudaba mucho. Ya ni se inmutaba, no le importaba quien la haya eliminado, ni siquiera ciertos comentarios, todas aquellas personas que se atrevían a opinar sin razón podían irse a la mierda, rio sola ante ese pensamiento, se metió al perfil de Juliana, ahí estaba ella, tan linda y compartiendo cosas de modas y algunos memes, su mayor comentador era Carlos, fue directo a las fotos más antiguas, como cuando tenia cara de niña ¿Que se hubiera sentido conocerla a esa edad? Tenia pocas, solo una con su padre, quizas le diría a Lupe que le muestre sus fotos, ahora tenia mucha curiosidad. Su celular vibró con el nombre de Juliana en el. Lo tomó y era un mensaje "se que debía ir yo, pero el bebe está enfermo ¿quieres venir a ayudarme con tu deber?" Se carcajeo con la ocurrencia de Juliana, lo pensó un poco y si, en serio era su deber, contando con el hecho de ella fue quien insistió en llevarlo.

JuliantinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora