14 - LOS HARPER

116 19 12
                                    

—Conocí a tu padre en la Universidad —explica mi madre —. Enseguida nos caímos bien y comenzamos a salir. Un día que íbamos paseando por la noche, nos asaltaron unos ladrones. Mike se encaró a ellos y, cuando uno iba a clavarle la navaja, decidí usar la magia para salvarle. Sabía que eso podría poner en peligro nuestra relación, pero no fue así. El descubrir que yo era una bruja, le unió más a mí. A pesar de ser un científico, le apasionaba el mundo de la magia y no paraba de hacerme preguntas sobre mis poderes. Eso me hacía gracia. Me parecía bonito que quisiera formar parte de mi mundo.

Veo un lágrima cruzar por la mejilla de mi madre y me apresuro a limpiarla. Ella me lo agradece con una sonrisa. Le entiendo. Debía estar muy enamorada, aunque yo no tenga ni idea de que es eso.

—Al terminar la carrera, nos casamos y enseguida naciste tú —continúa dedicándome una sonrisa —. Eras una niña preciosa y con un gran potencial mágico. Tu padre estaba encantado y te prestaba mucha atención. Me parecía muy tierno.

¿Entonces mi padre me quería? Eso me resulta extraño. Siempre pensé que pasaba de mí.

—Él me animaba a que te instruyera con la magia y no se perdía ninguna de tus clases. Se ponía muy contento cuando lograbas avances y siempre te llevaba a comer un helado para celebrarlo. Los dos estabais muy unidos.

Me sorprende mucho lo que estoy oyendo. No tengo ningún recuerdo de mi padre, y menos de haber estado unida a él. 

Espera. No tengo ningún recuerdo. ¿Será qué...?

—¿Me borraste la memoria, mamá? —pregunto con dureza. Ella se echa a llorar.

—No me quedó otro remedio —reconoce entre llantos —. Tenía que borrar todo el infierno que te hizo pasar.

—¿Infierno? —digo sorprendida —. ¿De qué hablas?

—Déjale continuar —me indica Camile poniendo su mano en mi brazo —. Cuando termine, lo entenderás.

—Gracias, Camile —dice mi madre secándose las lágrimas con un pañuelo —, pero creo que esta parte debería contarla Lucie.

Lucie asiente y comienza a hablar.

—Había algo que no me gustaba en Mike, pero Marian se negaba a escucharme. Lo veía demasiado interesado por la magia y demasiado interesado en Cris. Eso, viniendo de un científico, no me parecía normal.

—¿Por eso nunca venías con Sara? —pregunto intrigada. Ella asiente.

—Así es. Sospechaba que había algo raro en él y un día decidí seguiros. Todo parecía normal. Te llevó al parque, te compró un helado y disteis un paseo. Pensé que tal vez me estaba volviendo paranoica, pero entonces vi algo extraño. Un hombre se acercó a vosotros, echó unos polvos en el helado y tú te quedaste dormida. Tu padre te cogió en brazos y te llevó hasta un edificio cerca del parque. Era un laboratorio de investigación.

—Espera, espera... ¿Dices que mi padre hacía experimentos conmigo? —le interrumpo nerviosa. Esto está empezando a darme mucho miedo.

—Así es, pero no era él mismo —contesta Lucie —, sospechamos que alguien le estaba manipulando la mente.

—¿Pero quién hacía eso? 

Quiero saberlo. Necesito saberlo para cargarme a esos bastardos y hacerles pagar lo que fuera que me hicieron.

—Tu padre había comenzado a trabajar en un gran laboratorio —me aclara mi madre —. No fue hasta unos años después que supimos que estaba controlado por la nueva Inquisición.

—¿La nueva Inquisición? —pregunto intrigada —. ¿Qué es eso?

—La nueva Inquisición —responde Camile —, es una gran organización cuyo objetivo es acabar con toda la vida sobrenatural en el mundo. Nos ven como una amenaza y se creen superiores a nosotros. Intentan erradicar la magia con ciencia.

DC V: VOLVER A EMPEZAR √Donde viven las historias. Descúbrelo ahora