Capítulo 41

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-La extraño tanto- . Suspiró Nico ante Jessica que la miraba con ternura y comprensión.

Se encontraban en la oficina, revisando un par de documentos que Nico debía firmar. No había nadie más en el recinto.

-Son cosas que pasan Nico, a veces en la vida hay que hacer sacrificios, aún cuando estos tengan la mala suerte de dejar ir a aquellas personas que amamos.
Créeme que te entiendo a la perfección- argumentó aquella pelirroja evitando mirarla; tenía que recordar que ante todo ellas sólo eran algún tipo de compañeras de trabajo. Jessica había empezado a tomarle un cariño especial a Nico; nada romántico simplemente le hacía recordar a una de sus hermanitas.

-¿Tu también dejaste ir a un amor para poder estar aquí?- preguntó la pelinegra con unas ligeras lágrimas en los ojos.

-Si, a mi mamá- dijo con una mueca triste. -Ella se quedó con mis hermanitos en Florida mientras yo me vine para acá para buscar algo mejor que ofrecerle. La extraño mucho tanto como tu extrañas a Maki pero tengo la satisfacción de saber que ella está bien; y estoy segura que cuando tu y Maki se vuelvan a ver, cada una sabrá porque las cosas pasan-

Nico no siguió hablando. Ella también pensaba eso pero en el fondo le dolería saber que Maki ya haya encontrado a alguien más a pesar de su promesa de permanecer sin nadie a su lado que reemplace el lugar de la otra.

En el otro continente Maki salía de bañarse. Se encontraba estudiando en un internado muy reconocido de aquella ciudad inglesa, un lugar famoso por albergar a chicas y chicos de distintas nacionalidades donde todos pudiesen explotar sus habilidades.

Alguien tocó la puerta de su habitación; era Alexandra O' Neill, su compañera de clases y vecina.

De cabello castaño y ojos color marrón; la chica era hija de un diplomático y se encontraba Londres desde hacía 1 año. Ella venía de Irlanda del Norte y tenía un acento que hacía que sus compañeros preguntasen dos veces lo que había dicho. De hecho, la ex school idol tenía mejor acento que ella. Con 17 años, aquella señorita mostraba un interés enorme por ejercer la medicina; quizá ese fue el detonante por el cuál ella y Maki hicieron amistad pero esa amistad no se había suscitado sino hasta hace una semana cuando Maki decidió dejar de encerrarse en su burbuja depresiva.

- ¿Estás ocupada?- cuestionó Alexandra entrando cuando Maki le hizo la mano para que pasara. Ésta estaba sólo envuelta con una toalla.

- No, acabo de salir del baño- dijo la pelirroja evitando mojar más su habitación.

- Créeme que no me había dado cuenta- respondió sarcástica mientras soltaba una risa que hizo que Maki se sonrojarse ya que una parte de la toalla dejó al descubierto una de sus piernas.

Alexandra decidió ignorar tal cosa y prosiguió: Tengo una cita con alguien del otro edificio. No sé qué ponerme, estoy muy nerviosa nunca he salido con un chico. Esta sería mi primera cita. Maki necesito que me ayudes. - expresó emocionada y con los ojos brillantes.

-¿Yo?- cuestionó incrédula. - No creo ser una buena Cupido, recuerda mi situación- dijo con un aire de decepción.

Le había contando de ella pero sólo una parte; había omitido el decirle que se habían separado porque Nico iba a ser una superestrella. Decidió mentirle de manera piadosa en algunos detalles como el de ser parte de las school Idol y que Nico se había mudado a otro país por cuestiones de trabajo por parte de su mamá. Esto para proteger la identidad de la futura celebridad.

-Maki, tu situación es distinta; el amor que tienes por Nico es genuino; yo quisiera que me aconsejaras como saber si lo mío será así con John-

-Alexandra eso no lo puedo saber, tu eres la única que puede saberlo. Además no tengo idea de quién es John, y sería demasiado pronto descubrir algo así. Sería ilógico- atinó a responder desde el baño. Mantenía la puerta entreabierta para poder conversar con Alexandra.

-Tienes razón. Mucha razón. Por cierto me llegó un rumor el otro día-

-Rumor. ¿Cuál rumor?- preguntó Maki asomando por el marco de la puerta.

El sonido de las teclasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora