CAPITULO 38:

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Hipo se quedó sorprendido por haber escuchado esas palabras tan hirientes de parte de su padre mientras que Estoico solo evadió a su hijo y salió del Gran Salón junto con Bocón e Hipo se quedó muy triste pero luego escucho muchos gritos y muchos gruñidos de dragones.

Hipo: ¿Qué fue eso? (Caminado hacia la puerta).

Hipo abrió la puerta y su sorpresa fue haberse encontrado con todo Berk luchando contra dragones hasta la muerte, muchas casas incendiadas, muchos vikingos y dragones heridos casi por morir en todos lados.

Hipo: ¿Qué está pasando?

La sorpresa más grande fue ver que Astrid, Estoico y todos sus amigos mataban a los dragones como si fuera algo que hacían en su pasado; Hipo corrió hasta donde su padre a detenerlo.

Estoico estaba a punto de cortarle la cabeza a un Mortífero Nadder, pero Hipo corrió a evitar que la espada pudiera tocar a ese dragón.

Hipo: ¡Papá no lo hagas! (Sosteniendo su brazo).

Estoico: ¡Hipo apártate! (Empujándolo y haciendo que cayera al suelo).

Esa escena fue más que aterradora para Hipo, ver como su padre le cortaba la cabeza a un Nadder no es algo que sea fácil de digerir o ver todos los días. Hipo se levantó del suelo y fue a detener a Astrid que estaba a punto de lanzarle su hacha a un Gronckle.

Hipo: ¡Astrid no! (Poniéndose frente a ella).

Astrid: ¡A un lado debilucho no importante! (Empujándolo)

Hipo no comprendía como Astrid podía haberle dicho eso después de todo lo que él y ella habían pasado juntos, pero él decidió no entrometerse en nada más y comenzó a caminar hacia "Punta Cuervo" (Lugar en dónde vio por primera vez a Chimuelo lastimado) y se sentó en una roca.

Hipo: ¿En verdad solo soy un debilucho bueno para nada? (viendo su reflejo en el agua) Tal vez (Poniéndose de pie) Sera mejor para todos si yo no estuviera aquí

Hipo se lanzó al lago y lentamente podía ver cómo iba llegando hasta la superficie

¡PERO EN ESO DESPERTÓ!

Hipo: ¿Qué demonios pasó? (Asustado y transpirado).

Astrid: ¡Ay! ¡Gracias a todos los dioses que por fin despiertas! (Tranquilizada).

Hipo: ¿Astrid?

El castaño de ojos verdes se encontraba en su habitación; para ser más exactos estaba en su cama; y Astrid estaba cuidando de él, todo estaba normal, como si algo de lo que Hipo "vivió" jamás hubiera pasado.

Hipo: Astrid ¿Qué fue lo que pasó?

Astrid: Bueno Luego de que yo diera mi discurso y tú y yo saliéramos a festejar juntos, Brutacio por accidente lanzó un ladrillo hacia tu cabeza y quedaste desmayado

Hipo: ¿Hace cuánto fue esto?

Astrid: Hace una semana

Hipo: ¿Qué? ¿Me perdí la Semana de Bork y el desfile?

Astrid: Si Pero al menos ¡ya despertaste! (Abrazándolo).

Hipo: ¿Y dónde está Chimuelo?

Astrid: Él

El dragón entró a la habitación y salto sobre Hipo de alegría e Hipo lo recibió mucho más feliz.

Hipo: (Abrazándolo muy fuerte). ¡Te amo amigo! Te amo a más que nadie en el mundo!

Astrid: (Sonido de garganta).

Hipo jaló a Astrid y la unió al "abrazo" que tenían.

Hipo: ¡También a ti Astrid! ¡Yo jamás podría escoger entre ustedes dos porque los amo de igual manera!

Astrid: ¿Qué fue de gravedad lo que ese ladrillo te hizo Hipo? (Extrañada)

Hipo: Es solo que los amo demasiado chicos! (Abrazándolos más fuerte).

Luego de unos minutos se soltaron y Chimuelo salió de la habitación muy feliz e Hipo salió de su cama pensando:

"Tal vez será mejor si me olvido de todo esos malos pensamientos y lo haré ahora porque quién sabe si no despertaré el día de mañana"

Astrid: Andando Hipo hay que avisarle a tus padres que despertaste (Levantándose)

Hipo: (Tomándola del brazo) ¡Astrid espera!

Astrid: ¿Qué pasa?

Hipo: (Pensando) ¡Hazlo idiota, solo hazlo!... Yo (Arrodillándose y sacando el pequeño cofre que tenía un anillo y poniéndolo frente a ella). ¡Quiero que seas mi esposa!

Astrid: (Sorprendida) Eso no sonó como una propuesta Más bien sonó como una obligación

Hipo: Pero (Desanimado)

Astrid: (Arrodillándose y acariciando su mejilla) ¡Sí!

Hipo le puso el anillo a Astrid y ambos se dieron un beso de amor y felicidad pero luego llegó Chimuelo a ensalivarlos.

Hipo: ¡Oye! Sabes qué eso no se quita (Feliz)

Astrid: ¡Chimuelo! (Feliz)

Ambos salieron de la casa de Hipo y se dirigieron al Gran Salón a dar las noticias. Berk celebró como nunca en la vida por la alegría que sentían e Hipo, Astrid y Chimuelo vivieron juntos hasta el fin de sus días con tal de ser un "VERDADERO AMOR"

FIN

Amor Verdadero: Conociendo nuevas visitas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora