My Secretary |Suga And You

Eight- Sanación.

Dedicado a: @IvanaJudith0 y @Hallen_startruck

-No voy a permitir que te vuelvan a hacer eso, prometo protegerte y cuidarte para siempre. -Dijo Suga para por fin sentir a su linda chica-. 

Era una increíble mezcla de sentimientos, que se asemejaba a un big bang dentro de sus corazones latentes. Acaso... ¿Alguna vez has sentido que así esa persona no la hayas conocido hace mucho, sientes que se derrumbaría tu mundo sin esa persona?, así mismo pasaba con esa bella chica y Suga.

Al salir de aquel lugar sintieron que despejaron un gran peso de sus hombros. Allí se encontraban esas dos personas, agarrados de la mano, tal vez por miedo a que los vuelvan a separar y no poder darse una oportunidad de conocerse, o porque extrañaban ese tacto.

-Yo... No se como agradecerte, de verdad no se como Jimin pudo... -Trago en seco, con un nudo en su garganta.

-Ya paso... ¿Bien?, no te volverán a lastimar. Vamos a la casa necesitas descansar. -Dijo dándole ánimos.

-Si... Gracias Sugita. -Dijo tiernamente. Al voltear como Suga miraba para otra parte tratando de ocultar que rostro color carmesí.

-N-No es nada... -Dijo tratando de que no se notara lo avergonzado que estaba.

-Pareces un tomate Suga, o... ¿Sugita?. -Dijo divertida, olvidando los problemas anteriores

-Aish, no es divertido. -Dijo un poco enojado.

-Ya, no te enojes bebe. -Dijo intentando ponerlo aun mas rojo de lo que ya estaba.

Suga solo supo ocultar su cara con un tapabocas, pero su piel blanca como la leche no cooperaba en lo absoluto. Se dirigieron a la casa de Suga, entraron y Suga alzó a aquella chica como si de su luna de miel se tratara. -Bienvenida a tu casa. Exclamó Suga. -Gracias azúcar. Dijo ella en tono muy tierno.

Llegaron a almorzar y no paraban de hablar de experiencias, anécdotas, relatos que ellos habían pasado. Se reían uno del otro y la comodidad y tranquilidad que sentían ellos al estar juntos era inexplicable.

-Tienes algo aquí... -Suga quito un pedacito de comida que tenia aquella chica al lado de su labio inferior, para después dirigir ese trozo a su propia boca.

-¡Oye!, ese era mi trocito de comida, te demandare por robo. -Dijo actuando seria.

-Te demandare por esa hermosa cara... -Exclamó Suga acercándose a ella haciendo que se siente encima de el.

-¿Hermosa?, nada comparado a ti... ¿Quien fuera estufa para calentarte?. -Dijo ella muy coqueta.

-No soy la estufa, yo soy la llama que la enciende cariño. -Hablo Suga abrazándola por la cintura a lo que ella soltó un leve quejido de dolor. ¿Que pasa?, -reiteró Suga preocupado.

Esa chica que hace un momento estaba muy contenta cambio a un semblante serio, nostálgico y a la vez triste.
Empezó a desvestirse, no con el fin de causar excitación por parte del mayor, sino que porque quería mostrarle una marca que había dejado los malos ratos con jimin.
Su cuerpo tenia moretones, algunos rasguños profundos que aun no sanaban, su espalda estaba marcada por lo que parecía latigazos. Sus piernas... Su cuerpo.

-Soy... Soy un monstruo hyung. -Esbozo ella cayendo en el piso a llorar.

-No lo eres, eres muy hermosa... A mi no me importa tus cicatrices, por que valoro lo fuerte que eres. No llores, las cicatrices son algo de lo que has de estar orgullosa. -Dijo abrazándola por atrás.

-¿No lo ves?, te mereces algo mejor...

-Tu eres lo mejor para mi ¡Quieras o no!. -la alzo y la dirigió a la habitación, allí empezó a curar cada una de las heridas que tenia, ella se quejaba una vez que otra, pero el hecho de que Suga se preocupara de esa manera era algo tan especial para ella.

-Listo... ¡Que hermosa es mi novia!, seré la envidia de mis amigos. -Dijo el acostándose en la cama invitándola a acurrucarse con el a ella.

-Yo también debería preocuparme... Con tu belleza los chicos también se enamoraran de ti. -Dijo ella acurrucado se en la curvatura del cuello de aquel chico.

-Tonta.

-Tonto tu...

-!Los dos, tu eres mi tonta y yo tu tonto!

-Lo aceptaré pero me ofende muchísimo. -Exclamo ella riendo a lo bajo.

Así fue como de tanta charla terminaron por dormirse cada uno, arropados por el calor que el contrario les ofrecía.
Como magia, a la mañana siguiente un chico tan perezoso como lo es Suga, se levanto temprano a preparar algo para su novia. No era un experto cocinando pero se defendía. Así es como el olor de comida termino por despertar a la contraria.

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-Juro que me vengare de Suga, ella es solo mía... Su cuerpo, su alma ¡MIA!, cuando salga de esta mierda me las van a pagar muy caro malditos... Exclamo Park Jimin con sed de venganza.

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-Te quedo delicioso... Definitivamente eres un buen amo de casa... Te contrato como mi empleado. -Dijo ella señalando con el dedo.

-¿Que esperabas?, soy el dios del swag bebe y... -Una llamada interrumpió a Suga en su charla.

-Dale contesta azúcar. -Dijo ella sin armar lío.

Cada vez que alguien hablaba en la otra linea Suga ponía mas cara de susto, y se puso mas pálido de lo normal... Esto asusto un poco aquella chica, no quería que nada dañara aquella felicidad.

-¿Amor estas bien...?, estas muy pálido. -Exclamó aquella chica tocando su mejilla delicadamente como si se trata de una porcelana fina.

-Mi...

-¿Mi?

-Mi madre te quiere conocer...

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1. Se que he estado mucho tiempo ausente, mis mas sinceras disculpas pero surgieron problemas y el caso... No tengo internet. Así que, paciencia 7u7.

2. Ya llegamos a los 1,02k. Osea :v no lo creo, gracias a los que leen y guardan en la biblioteca este pequeño granito xD.

3. Tengo hambre :v

4. Por favor no olviden votar :''^, di no a los lectores fantasmas.

Pregunta: ¿Que fue lo que paso con el caso de las hamburguesas y Jungkook :'v?. (1er comentario).

(L@s quiero prros). <3

-----No robar, ni hacer pasar este fanfic por otra persona que no sea la autora, osea yo :v-----
Derechos de autor. Creado por: Kim Seo Taji Jams.