Ofrecida por Ti (CEO #2)©

Capítulo #19| Ana

El día se ha vuelto denso, pesado y grumoso. Hay una sensación agria en el aire y tiemblo cuando pasa una ráfaga de viento. Sin él se siente todo diferente, creo que me ha dejado paranoica.

Esta mañana llevé a Wyatt a las instalaciones de esa escuela: Grace& Hope, fundada por el propio Christian Grey. Una exclusiva escuela de varios pisos y con vidriera conformando sus paredes.

A simple vista me vi intimidada por el lujo, por lo que costaría la matricula. Seguidamente, Wyatt se vio ansioso de entrar, de encontrase en un estado de emoción y estupor.

Al acercarnos el guardia de seguridad, con amabilidad, nos guió hacia dirección.

-muchas gracias.

-un placer.- el guardia se aleja de nuevo a su puesto. Supongo.

-hola- me acerqué a un mostrador alto y de mármol azul oscuro. Una señora de unos treinta se puso de pie.

-¿digame?-se acomodó unas gafas afiladas.

-me hablaron sobre una beca en esta institución...pensaba matricular a mi hijo.

-de acuerdo. Debe concertar una cita con la directora. Solo llene el formulario- pone una enorme pila de papeles delante de mi.- y ella los atenderá.-habla sin ánimo de atendernos lo mejor posible.

Amargada...

-¿podría verla ahora?- maquino en voz alta.

-no es posible- réplica. Se pone de puntillas para observar a mi hijo con cierto desprecio y luego a mi.- debe llenar el formulario.- repite.-son las reglas.

-usted y sus estupidas...- me callo y entra una mujer joven de cabellos como gotas de oro y una sonrisa resplandeciente en un conjunto rosa y pantalon lila.

-¿Qué sucede aquí?

-nada señorita. Esta señora que se encuentra indispuesta a llenar el formulario.- se mosquea.

"Esta" que modales son esos.

-¡oh, basta Amanda! Solo son hojas. He pensado que mi hermano hubiera sido despiadado si hubiece terminado en leyes con tanto papeleo.- ríe.

-¿eres hermana de Christian?- Wyatt habla de repente.

-¿y tu pequeño, como conoces a mi hermano?- ella le devuelve su interés con otra pregunta.

-es novio de mi mamá, ¿verdad Mami?- ella se sorprende al escuchar semejante revelación, pero soy yo la que tiene la mirada desencajada.

-no...¡Wyatt!- retuerzo una sonrisa.

-¡me hubieras dicho eso antes!- grita.

-¿eh?

-¡tengo una hermana!

-¿eh?- repito.

-y un sobrino, también.

¿Quéeeeee?

-pasa, pasa. No me pases llamadas Amanda- nos empuja hasta su oficina y dejamos atrás a Amanda, quien intenta analizar lo que ha pasado mientras asiente lentamente.

-por cierto, soy Mia.

-tia Mia.- dice Wyatt.

-eso me gusta- chasquea los dedos y le guiña un ojo a mi hijo.

-disculpa no creo que me estes entendiendo yo...- me corta de tajo con un estruendoso chillido y un abrazo.

-hace años que Christian no tenía un interés amoroso después de la bruja y aquí estas...- ¿la bruja? ¿Quién? ¿Será la persona que le hizo daño en el pasado? ¿La persona que compara con mi ex y que refiere cuando habla del daño que nos han provacado a ambos?

-no estamos saliendo...bueno. Solo somos amigos- eso creo. Creo que somos amigos con cierto beneficio. Todo esta a la duda cuando se refiere a él.- me dijo que Wyatt podría aspirar a una beca en esta escuela solo que...bueno. Mi hijo padece de epilepsia y...

Descansa su mano sobre la mia.

-no te preocupes...

Había olvidado entre tanta gritadera mencionar mi nombre.

-Anastasia Steele.

-vale, Ana. Aquí tenemos lo mejor para cualquier niño. No le faltará salud, seguridad y educación. Eso te lo puedo asegurar.

Su voz inspira confianza y no duda en sus palabras. El proceso no era fácil y ella trato de explicarme cada paso y le agradecí al final por su tiempo.

-tal vez podriamos salir un dia y tomar un café. Solo chicas- me lo pienso, no por mucho y acepto con una sonrisa. Tal vez podamos hablar de la mujer que hizo sufrir a Christian.

Después de dejar a Wyatt con la niñera, ir al trabajo, regresar a casa con víveres, despachar a la niñera y hacer la cena decidí enviarle un mensaje a Christian.

Hoy fui a la escuela. Conocí a tu hermana que por cierto es muy simpática, pero la tal Amanda es una amargada...
Ana

Lo envíe antes de pensarlo mejor y darme cuenta que era un mensaje demasiado quejoso.

El móvil vibró en las palmas de mis manos.

Buena decisión. No te arrepentirás y me disculpo por la actitud de mi hermana, ella me llamó después de conversar contigo y con respecto a Amanda tomaré cartas en el asunto.
-El malvado (así lo tengo guardado en mi agenda)

¿Cartas en el asunto? ¿A qué demonios se refiere?

No cometas locuras.
-Ana

Debería saber ya que no cometo locuras, sino estupideces desde que la conozco señorita Steele. Buenas noches y espero verte pronto y a Wyatt, un abrazo de mi parte.
-El malvado

Buenas noches y se lo diré.
-Ana.

Es lo único que pude escribirle y corrí al baño para mojarme las mejillas calientes y sonrojadas. El corazón me pulsaba en las orejas y maldije. Maldije mientras acostaba a Wyatt y le decía que Christian le enviaba las buenas noches y un abrazo.

Maldije hasta que el sueño me ganó.