Lavender

Capítulo 6

Despertó más temprano que de costumbre sintiendo rugir su estómago levemente, cansado pasó su mano por encima de éste intentando callarlo, había estado descuidando su alimentación desde que él se marchó, su mundo se derrumbaba cada vez que intentaba acercarse a la cocina y podía ver al rubio preparando el desayuno, para poco después parpadear y descubrir que su mente volvía a jugar con él.

Decidió que iría a primera hora al mercado de la aldea, ya que apenas quedaba algo que fuera comestible en la cocina de su casa y no podía simplemente vivir de los dulces de la pastelería. Además había estado evitando tomar ni una sola gota de sangre de su mejor amigo desde hace bastante tiempo, que no paraba de insistirle fervientemente que debía alimentarse para no recaer, por lo menos, debía seguir una dieta equilibrada de comida humana para subsistir.

Al ser mitad humano tenía la suerte que podía comer lo mismo que ellos, no dependía tanto de la sangre como el resto de su especie y por ello pasaba largos periodos de tiempo sin probar una gota de ésta, pero tampoco era saludable los largos períodos que se abstenía de tomar sangre de su amigo, debido a que eso provocaba que estuviera más débil y cansado, pero en ese momento no sabía si se debía a su abstinencia o por el vacío que había dejado el rubio tras su ida.

Minho siempre había odiado su mitad vampiro, la que le hacía diferente al resto, y por ello la suprimía tanto como podía, y después del desprecio que recibió del rubio la odiaba aún más, esa horrible noche se volvió abrir una herida que creía ya cerrada y curada. Por eso había estado sin beber sangre desde que éste se marchó, aunque significaba que pudiera morir, a veces pensaba que era la mejor opción, pero al final Jisung siempre le obligaba a beber su sangre y alargar su tiempo.

Y él se preguntaba si eso era lo correcto. Después de todo simplemente era un monstruo horrible que bebía la sangre de los humanos para vivir.

Puede que la razón de que estuviera tan débil últimamente es que llevaba demasiado tiempo sin probar algo de sangre, quizás subconscientemente estaba intentando acabar con su vida como fuera.

Suspiro pesadamente y salió de su casa para empezar a encaminarse hacia el mercado antes de que su mente siguiera dando vueltas sobre un tema tan delicado como que era él y lo cual aún a veces le hacía tener pesadillas terribles por las noches haciendo que no pudiera conciliar el sueño más.

De camino allí se encontró con muchos de sus vecinos que lo saludaban con una cálida sonrisa, sino fuera porque los humanos que vivían en esa aldea fueran tan tolerantes Minho no sabría donde habría acabado después de huir de la ciudad, realmente no encajaba en ningún lugar. Esta aldea le dió una segunda oportunidad.

Iba tan inmerso en sus pensamientos que no vio hacia dónde se dirigía hasta que ya era muy tarde, quizás ese día hubiera sido mejor quedarse en casa.

Jisung lo cogió del brazo para pararlo y el vampiro dio un pequeño brinco ante el contacto "Min-hyung, ¿estás bien?" podía discernir la preocupación en su tono de voz.
El mayor sacudió su cabeza en negación con una pequeña sonrisa "No..." y entonces le vio, Chris estaba junto al chico modelo y su amigo hablando "Hola" dijo suavemente.
El rubio giró la cabeza ignorando su presencia y Minho pudo ver como el modelo acariciaba la espalda del mayor, aquello le partió en dos, tan detestable era su presencia para el rubio que no podía siquiera mirarlo "Estas son las opciones que tenemos ahora" se dirigió al menor de mejillas regordetas, ignorando por completo la presencia del vampiro.
Estaba demasiado cansado como para poder lidiar con ello "Nos vemos luego" hablo solo para su amigo que se giró para responder, pero Minho fue más rápido.

Aumentó la velocidad de sus pasos, intentando alejarse de allí lo más rápido posible, aquella pequeña interacción lo había descontrolado por completo, su mente no estaba preparada para volver a ver al rubio.