Colores en el viento

13. Hombre blanco

- Nunca me has contado porqué os ponéis las plumas, o porqué unos llevan más que otras

Agoney se incorporó para poder contarle mejor la historia, como si el hecho de estar erguido le diese más voz.

- Mira, los que llevan varias son el Gran Jefe, por ser quién es y los guerreros, normalmente una por cada batalla y las muescas y colores que se les ponen cambia según a cuántos enemigos hayan derrotado, de que manera y si era alguien importante

- ¿En serio?

- Claro, es la distinción, se pueden teñir de rojo, de negro, se les quitan partes... Todo depende de lo que hagan en batalla

- Y si tú no has participado en ninguna batalla, ¿por qué la llevas?

- Por mi cara bonita- rió arrancándole una carcajada al rubio y un "lo que hay que aguantar" susurrado, torció la cabeza para que la mirase mejor -mírala, está entera y blanca, la mía no es de guerra

- ¿Qué significa?

- Adultez, es la nos ponen cuando dejamos atrás al niño, algunos la llevan blanca y negra, la mía es solo blanca por ser además un joven jefe

Raoul elevó las cejas en señal de sorpresa y entusiasmo.

- ¿A qué edad sois adultos aquí?

- No nos guiamos por la edad, sino por la madurez del cuerpo y de la mente- explicó -las mujeres reciben su primera y única pluma cuando sangran por primera vez, aunque luego deciden ponerse algunas más de colores y bonitas para adornarse el pelo- sonrió -para nosotros es distinto, se nos considera adulto cuando logramos sobrevivir

- ¿A qué?- frunció Raoul el ceño e incorporándose por primera vez durante la conversación, quedando a la altura de Agoney.

- Cuando nuestro cuerpo empieza a transformarse, son nuestros padres los que deciden cuando nos enfrentamos a ese reto, nos lleva hasta lo más profundo del bosque y, durante la noche, cuando dormimos, vuelve al poblado

- ¿Os dejan solos en mitad de la noche? ¿Con los lobos y osos y demás bestias?- se escandalizó.

- Y sin comida ni agua, la mayoría suelen tardar unos cuatro días en volver, si en ese tiempo no vuelven sanos y salvos, salen a buscarle y deberán esperar para ser considerados adultos y recibir la pluma

- ¿A ti te hicieron eso o tuviste la ventaja del hijo del jefe?

- No nos libramos ninguno- rió.

- ¿Cuánto tardaste en volver?

- Día y medio- confesó dejando a un Raoul sorprendido.

- No te creo ¿Cómo lo hiciste?

- Hice trampa- confesó bajito y mordiéndose el labio, como si fuese un crimen -nadie se acordaba de que yo ya conocía el bosque gracias a mi madre, no me costó volver ni alimentarme en ese tiempo

- Pero eso no es hacer trampa

- Claro que sí, debía aprender a orientarme en un camino que ya conocía y no dije nada

- Ese no es tu problema, es del resto por no haber aprendido antes, tú solo fuiste más listo

Agoney sonreía mientras le observaba hablar.

>>- ¿Por qué me miras así?- preguntó cohibido.

- Me encanta tu voz, siento que me abraza