Nota: Este capítulo fue realmente doloroso escribirlo, aunque suene estúpido lo fue.
Espero que no sea demasiado fuerte para ustedes.
Souichi contará el motivo de su trauma así prestad atención.Levanté mi cabeza de su cuello y nos miramos a los ojos otra vez, su cara era indescifrable, quería entrar en su mente para saber que pensaba.
-Perdoname Tatsumi ... esa figura ... Lo siento, me pregunto qué piensas de mí, probablemente te doy lástima.
Souichi me tiró del cuello de la camisa, apretó los dientes ... y me besó. Cuando sentí su boca de nuevo en la mía, perdí la cabeza.
Lo abracé aún más fuerte, Souichi se puso ligeramente rígido pero no trató de alejarse, traté de profundizar un poco más el beso y cuando Souichi sintió que mi lengua entraba en su boca, su expresión relajada cambio a disgusto.
pero ¿por qué? Él había tomado la iniciativa de besarme, ¿por qué tenía esa cara ahora?
Traté de ignorarlo como lo hacía cada vez, probablemente esto lo ayudaría a dejarse llevar.
Lo obligué con mi mano a girar su cabeza a mi dirección y nuevamente asalté su boca, trató de apartar mi mano con la suya, pero extrañamente no se puso rígido al contacto físico.Lo llevé a una pared mientras yo continuaba besándolo.
La sensación de su lengua contra la mía me estaba enviando al éxtasis, yo ... quería más.
Dejé su cabeza y moví mi mano a su pecho, traté de levantar su camisa, pero Souichi abrió sus ojos y susurró:.
-Para.
Nos miramos a los ojos por un momento, Souichi tenía algo de mi saliva en la boca, su expresión era la de un hombre avergonzado, estaba muy sonrojado.
-Souichi ... Perdóname.
-No te preocupes. Me voy a bañar, me siento sucio. Entra y no toques nada.
Y corrió rápidamente al baño.
¡Maldita sea! Lo había arruinado todo ... todo el progreso que hicimos ... todo ... ¡Soy realmente estúpido!
Souichi salió del baño después de
veinte minutos, estaba abrazándose y con sus manos apretó más su camisa, justo en el lugar donde lo había tocado.Me levanté y fui hacia él, tenía que intentar recuperarlo.
-Souichi por favor, perdóname, no quería molestarte ... no pude controlarme.
-No es tu culpa, el problema soy yo.
Cuando te dije que me dejaras solo, lo hice porque sabía que querías esto, no puedo darte lo que quieres.
No puedo pensar en hacer el amor con alguien sin sentirme asqueado, sin sentirme sucio.
Sentí tanto dolor en sus pocas palabras, su expresión era repugnante, se frotaba las manos en los brazos.
- ¿Puedes decirme qué te pasó?
Souichi cerró los ojos y respiró hondo.
Luego movió el cabello suelto con su mano y se sentó a mi lado.
-Todo comenzó hace 8 años, acababa de ingresar a la universidad, era un estudiante de primer año y cuando me gradué con el grado más alto me otorgaron el acceso al laboratorio como Kohai.

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Toma mis mano
Fiksi PenggemarEsta es una historia estúpida, pero Eva Gabriela Hernández Acosta dice que es hermosa y me obligó a publicarla. Espero que les guste, y perdonen los errores de ortografía pero soy italiana.