Toma mis mano

Capitulo 13

-Morinaga, por favor, tócame.


-Es lo que más deseo....



Mis manos vagaron sobre sus caderas, luego bajé los pantalones de su pijama y acaricié su extremidad con mi mano.


Ya estaba duro, me volví loco.
Sus mejillas estaban enrojecidas y yo estaba sin aliento.





-Mori .... Agh.



-Tatsumi ... confía en mí.


También me bajé los pantalones, y fui dentro de él.


-Ahhhhh .... Mori.




-Tatsumi .... ahhh .... Te quiero ... ¡ah!







-mmm ... Moooo aaaagfh .....

-¡Oye pervertido!



Abrí mis ojos y encontré la mirada de advertencia de Souichi, había tenido un sueño húmedo y en mi inconsciencia abracé a Souichi más de lo que debería.





-¿Por qué pervertido? Te acabo de abrazar ...



-Escuché todo lo que dijiste en tu sueño, me asustaste.

¡Qué figura! Quién sabe lo que pensará de mí, lo abracé aún más fuerte y Souichi se sonrojó.





-¡déjame! ¡No me aprietes tanto, siento algo contra mis piernas! ¡Quitadlo!




-¿Qué?! No tengo nada en absoluto, lo estás imaginando.



- ¡Eres un pervertido! ¡dejarme!


Lo sentí retorciéndose en mis brazos, Souichi estaba empezando a temblar, todavía tenía miedo de esto, pero yo jamás lo lastimaría, solo quiero ayudarlo.


"Estaba sangrando, sabía que estaba sangrando".


Recordar esas palabras me duelen más de lo que pensaba, me pregunto si Souichi todavía siente dolor, me pregunto si fue desgarrado ...





-Tatsumi déjame hacer el amor contigo.



-¿Qué? ¿Qué quieres ...?



Souichi estaba enrojecido, pero su rostro no era el habitual. Su rostro estaba aterrorizado por la idea de revivir algo así, pero tenía que insistir, solo para demostrarle que no era comparable, que la situación aberrante tenía que desaparecer de su cuerpo, su mente y su corazón, ahora solo estábamos él y yo.



-Tatsumi, no te preocupes.



-¡No! ¡Definitivamente no! No quiero, por favor ....no lo hagas.




Escucharlo rezar me hizo sufrir, pero tenía que insistir si quería que superara totalmente su trauma y su repulsión.
Así que metí una mano bajo su pijama y acaricié su pecho.




-No por favor ...¡Te lo ruego! No me hagas nada.



Intenté ignorar su voz, pero era muy difícil.
Con mi mano alcancé su erección, eso es bueno.


-¿Ves? Estás excitado... déjate llevar por tus sentimientos, no te hará daño mi amor.

-No ... no ...



Con una mano comencé a masturbarlo, mientras que la otra la dirigí a su boca, Souichi parecía haberse relajado, mis manos lo tranquilizaban.




Puse dos dedos en su boca y milagrosamente los lamió, cuando estaban lo suficientemente húmedos, me acerqué a su entrada.


Souichi se puso rígido como un trozo de hielo, agarró mi brazo con su mano, la masturbación no tuvo el efecto deseado, su erección desapareció de golpe.
Souichi estaba demasiado rígido, cuando puse un dedo dentro fue una verdadera tragedia.
Todo su cuerpo temblando, el sudor frío y sus sollozos acompañados de su gruesas lágrimas me rompieron en millones de pedazos el corazón. Él estaba traumatizado totalmente, lo habían dañado profundamente.

''Pero el cielo será testigo de tu recuperación mi amor, yo te voy a curar, yo te voy a salvar. ¡Te lo juro por mi vida''.


-Tatsumi .... cálmate, no pasa nada.


-No quiero, por favor no lo hagas, Morinaga ... déjame ...



Automáticamente quité mi dedo y él volvió su rostro aún con residuos de lágrimas.




-Gracias ....


Lo abracé y le di un beso en la frente.



- Relájate, yo jamás haría algo que no quieras.




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Pasó otro mes y rara vez volvía a mi casa, ahora era como si viviéramos juntos, nos despertamos juntos y nos íbamos a dormir juntos.

Estaba feliz, estaba bien con Souichi y él estaba bien conmigo, ya casi no usaba guantes y Mai me había dicho que rara vez los usaban en el laboratorio.


Las cosas iban bien, estaba muy feliz.
Incluso el trabajo estaba bien.

Estaba cumpliendo mis deberes con serenidad, cuando una voz me hizo congelar.





-Morinaga-kun.


Me volví lentamente, quería que fuera solo un sueño, pero no, era la realidad.




-¿Kuse-san?


Era la segunda vez que Kuse aparecía en mi vida desde que estaba en Nagoya...Y por segunda vez me sentí totalmente devastado.
Pero ¿por qué? Su presencia no debería ser tan mala.





-Cuando me pidieron que viniera por una semana, no sabía si aceptar, no quería molestarte.


-No me molesta, eres libre de trabajar donde quieras.



- ¿Estás bien?



-Sí.

No lo estaba.

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La jornada laboral había terminado, me estaba preparando para irme a casa cuando ...



-Morinaga-Kun ¿puedo acompañarte?



-¿Para qué?

-Me gustaría que pasáramos tiempo juntos.

-ok

El viaje de vuelta fue el más silencioso de mi vida, los dos estábamos avergonzados, fue realmente una mala idea.



- ¿Sigues con Kamiki?


¡Que estúpida pregunta!

- Sí ... estamos muy contentos.
Y tú...¿Estás con alguien ahora?



- Sí. Yo también estoy con alguien.

Kuse sonrió levemente, esto me causó una gran molestia.



-Me imaginé que ya habías encontrado a alguien. Eres un hombre maravilloso, un chico como tú merece ser amado.
Debería estar feliz con la noticia, pero no puedo evitar de sentirme un poco celoso.
Dicen que es normal sentirse celoso de los ex novios. ¿Tú crees?

-No lo sé.

No puedo entenderlo, él ama a Kamiki pero me dijo estas cosas, como si siempre quisiera dejar una oportunidad conmigo. ¿Porqué me hace esto?


Cuando llegué a casa estaba sumamente irritado, tendría que soportar a Kuse durante una semana a él y sus estúpidas historias.


Desde que regresé había estado de muy mal humor, no había dicho ni una sola palabra y Souichi seguía mirándome.

-De acuerdo ¿Qué pasa?

-No .... Nada.

Mentí.

-Eso no es cierto, sé que te pasa algo.

-Yo ... no lo sé, hoy Kuse llegó a la empresa.



-¿Kuse? ¿Tu ex?



-Sí.



- ¿Y qué pasa con él?

-Dijo que todavía está celoso de mí, incluso si ya no estamos juntos.


Souichi continuó mirándome sin quitarme los ojos de encima.


- Y tú.....¿Tú qué sientes?



-No lo sé....Creo que ya no siento nada por él.

-¿Crees?

-Sí

-Mmm...ya.

-Estuvimos juntos durante seis años, supongo que es normal sentirme así.



La cara de Souichi había cambiado ahora, era extraña, su mirada era baja y podía descifrarlo.



-Bueno Tatsumi, ya no importa. Yo preparo la cena, ¿qué quieres comer?


Souichi se levantó del sofá, recogió sus libros y se dirigió a su habitación sin siquiera mirarme.



-No tengo hambre, come solo.



- ¿Hay algo mal?

Esta vez se volvió hacia mí, pero hubiera preferido que no lo hiciera, su mirada me mató.



-''No lo sé'', ''Creo que no hay nada malo''' ''total es normal sentirse así'' o sea....Sentir que no hay nada malo.
Disfruta tu cena solo.


Cerró la puerta de su habitación y se encerró dentro.
¡¿Qué demonios hice?! ¡Soy un completo estúpido!