"¿Noah?" la vos de Melliza McCall corto cualquier cosa que la mujer fuera a decir. Ambos voltearon a verla bajar de su auto y acercarse al sheriff. "¿Qué está pasando aquí?" pregunto viendo con sospecha a la hechicera suprema.
"No pasa nada. Yo... ya estaba por irme" dijo ancestral dándole una última mirada al sheriff antes de alejarse.
Melliza se acercó a Noah apenas la mujer desapareció de su vista. "¿Qué quería?"
"No lo sé" dijo con molestia entrando a su casa, siendo seguido por la enfermera.
"¿La conoces?"
Noah camino directamente a la cocina y del refrigerador tomo una cerveza. "No, pero se puso hablar incoherencias y honestamente me molesto"
"¿Qué... cosas te dijo?" pregunto con cautela. Sabía que solo hay ciertas cosas que pueden molestar al sheriff. Entre ellas los crímenes, hablar sobre su esposa o...
"Me hablo sobre Stiles" dijo con su vos comenzando a romperse. Le dio un gran trago a su cerveza después.
"Oh Noah..." el peor tema de conversación del sheriff. El tema tabú que todo ciudadano de Beacon Hills sabe hasta este punto. "¿Qué te dijo?"
"Algo sobre que podría verlo. Como si eso fuera posible. A los muertos no se les puede ver más que en fotos para recordarlos y después llorar sus pérdidas. Esta porquería ya no tiene..." dijo agitando la cerveza al ver que ya no tenía nada.
Inmediatamente fue a la refrigeradora por otra.
"Noah" llamo Melliza. Cuando la ignoro siguió al hombre. "Noah. Deja eso. Prometiste que dejarías de beber. No puedes ponerte así cada vez que alguien menciona a Stiles. Aun estas a tiempo de considerar parar..."
El sheriff cerro de golpe la refrigeradora con un gruñido. "No. Justo ahora es cuando no debo parar. Nada puede quitar el dolor. ¡Nada excepto esto!"
"¡Esto no es saludable! No puedes ahogarte en alcohol y esperar que el dolor se vaya. Esto ya no es depresión, es una manía. Hay cosas que no se pueden arreglar, lo sé"
"Una vida sin Claudia o Stiles..." Comenzó el sheriff.
"Aún es vida. ¿No lo entiendes?" interrumpió. "Aún hay cosas que pueden darle un sentido a tu vida"
"¿Cómo qué? ¿Mi trabajo? ¡¿Tu?!" gruño mirándola mal.
Melliza le devolvió la mirada, aunque su labio tembló. "Aquí es donde te disculpas"
"Aquí es donde te digo que te marches"
"Bien..." dijo la enfermera dándose media vuelta. "Ya estoy harta de ver cómo te haces daño. No necesito a otro hombre que se destruye por el alcohol"
"Oh es muy difícil para ti, ¿Verdad?"
"Si, lo es. Me rompe el corazón que estés así" dijo encarando al sheriff. Haciendo que él la señalara.
"¡No te atrevas a compadecerme!" dijo alcanzo la vos.
"¡No te compadezco!" Respondió con su vos igualmente elevándose.
"¿Ah sí? Entonces ¿Qué haces aquí? Vienes cada tres días y me traes comida supuestamente saludable como si fuera tu paciente enfermo. ¡No! No soy tu paciente ni tu mi enfermera, apenas somos amigos. ¡Pero adoras las historias trágicas, ¿No?! ¡¿Soy tu proyecto ahora?! Pobre Noah Stilinski, esta solo sin esposa e hijo. No tiene quien lo ayude ¡Al fin me necesita! Otro desecho de la humanidad que salvar. Yo lo regresare al mundo, ya curad, el corazón satisfecho" Dijo imitando la voz de Melliza, quien negó con lágrimas en los ojos. "¿Acaso quieres restregarme en la cara que lo peor que te ha pasado es tener un borracho de esposo? ¿Qué estando contigo y Scott olvidare a mi propia esposa e hijo? En serio ¡¿TE IMPORTA?!"
YOU ARE READING
Teen Dragon
RandomLa mordida es un regalo. ¡JA! Una mordida basto para arruinar la vida de muchas personas. A otras las mejoro considerablemente. Pero para un niño que nada hizo para merecerse esto, la mordida no fue más que una maldición. Separado de su familia y a...