🌿;;001

998 79 52
                                    

Narrador omnisciente.

Te encontrabas caminando hacia tu trabajo, pues sin dinero no podrias hacer nada.
eras barista, te encantaba el café y hacer nuevas mezclas con este.
Habiaa decidido dejar la escuela ya que segun tu, no ganabas nada en hacer trabajos y tareas, la verdad es que eras algo descuidada y no querias seguir molestandote en no haber hecho la tarea.

Buscabas las llaves de la cafetería, llegaste antes que tu jefe.
—Otra vez...– dijiste para luego dar un suspiro, girar las llevas, abrir la puerta y cambiar el cartel que decia "cerrado" a "abierto".

-Time skip-

El lugar ya estaba lleno, hacias los cafes que pedia la gente lo mas rapido que podias, ya te estabas agotando, pero siguiste hasta que se fueran todas las personas, el jefe deberia pagarte mas por no morir haciendo cafes.
Limpiabas la barra y las mesas junto a sus compañeros, despues lavaste las tazas, te ibas a preparar un cafe hasta que sono la campana puesta en la puerta, habia entredo un cliente, diste un leve suspiro y fuiste hacia la barra con la mejor sonrisa que podias tener.

—Hola, bienvenido ¿en que puedo servirle?– dijiste mientras mantenias los ojos cerrados y una sonrisa.

—seis lattes y siete media luna, porfavor.–

—Esta...- abriste los ojos y te encontraste con un hombre bastante guapo a tu vista, tenia el cabello corto de color azul oscuro, unos ojos azul rey y vestia un traje blanco muy llamativo. —E-esta bien...–

Ya lejos de el hombre hechaste en una bolsa de papel las siete media lunas y los lattes los hiciste en esas tazas plasticas con tapa ya que suponias que eran para llevar, luego hechaste todo en una bolsa ecológica de tamaño adecuado.

—Aqui estan, tome.– Las manos temblaban pero aun asi le diste la bolsa y este la resivio con mucho agradó.

—Grazie mille*.- Dijo el hombre dejando el dinero en la barra mientras sostenia la bolsa.

—Prego*.- Decias en un murmuro.

-Time skip-

—Vaya día...- hablaste mientras, cambiabas el cartel a "cerrado" para luego cerrar la puerta de la cafetería con llave.
Diste un estornudo, pues cambiaste de un ambiente caliente a uno frio, provocando que las llaves cayeran al suelo sin poder escuchar el rudio de estas al tocar el suelo. Tú solo te fuiste pero sentias como alguien te seguía, te sentias muy nerviosa, te daba miedo voltearte a la persona que te seguia y hacerte la valiente preguntandole que era lo que queria, hasta que llegaste a una esquina donde debias esperar a que la luz cambiara a rojo para detener a los autos.

Comenzaste a temblar al sentir una mano en tu hombro.

—Oye.- dijo el sujetó

No podias voltearte por mas que quisieras, quedaste congelada.

—...¿Q-qué?- seguias mirando hacia adelante.

—Se te callo algo hace unas cuadras atras.-

Fueron las suficientes palabras para que te voltearas y miraras al sujeto quien con su brazo un poco a la altura de tu pecho tenia unas llaves colgando por uno de sus dedos, te quedaste perpleja al mirar al chico, era demaciado lindo, por lo cual paso por tu cabeza el otro chico y pensaste "acaso es el día en donde te encuentras con chicos jodidamente guapos" reiste por tu pensamiento mientras mirabas cada detalle del rostro del otro sujeto.
Piel clara, cabellos rubios que parecian hechos del mismo oro, tan relusiente y brillante, por ultimo unos ojos turquesas muy encantadores.

—Es bastante lindo...– dijiste sin conciencia alguna.

—Oh, gracias...?- respondio el chico muy confundido, nisiquiera avergonzado, pero tu si lo estabas, y bastante.

Cubriste tu cara dejando que se viera solo tu boca.
—Aaa lo siente mucho, disculpe mi comportamiento, enserio, disculpa.- estabas muy roja, no podias evitarlo, habias pensado en vos alta y era un castigo.

—Esta bien.- dijo desconcertado, seguia confundido. —solo vine a devolverle lo que se le cayó, disculpeme a mi por asustarla- dijo para luego colocar su mano derecha en su pecho y hacer una reverencia.
Coloco las llaves en el bolsillo de tu chaleca.
—Deberias ya irte a tu casa, a estas horas de la noche no es bueno que este a fuera, donzella*.- se alejo.

Llegaste a tu casa y te lanzaste a tu cama, la suaves telas te cubrian y pensabas en el chico rubio, te sentias culpable por enamorarte de su apariencia, pero pensabas en el, en las perfecciones de su rostro, sus ojos y su voz, su tranquila y calida voz.
Te dormiste.




———––—–—–——–—(☁️)

Hola!

Espero que te haya gustado esta kk. u/w/u

Grazie mille; muchas gracias

Prego; De nada/por favor

Donzella; Damicela

Chi ama, crede |•🌹Giorno x reader🌹•|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora