Testosterona (Aristemo) [En Edición]

24-Es mi culpa

Temo se sorprendió por la noticia que había recibido se colocó enseguida de Ari para el mismo leer el correo, nunca había tenido contacto directo con él, pero desde que lo conoció en aquella convivencia familiar el día de muertos, le había resultado una persona interesante, además que con su maquillaje que en ese momento daba terror, eso aparentaba, pero después solo parecía ser alguien que amaba a su familia, y apoyaba la relación de Daniela y Gabriel que en paz descanse, es que le resultaba difícil comprender por qué alguien como Guido quería hacerles daño, pero luego recordó, aquella broma en el edificio Córcega, donde el italiano estaba lleno de pintura, hablando con unas sombras de la pared, que al parecer él creía que eran sus padres.

Esa broma iba dirigida a él, los gemelos junto a Yolo la habían preparado para que todo eso le sucediera a él, Guido termino por enterarse y seguro desde ahí quiso vengarse, por culpa de él todos estaban en peligro, y su novio paso meses sufriendo por la operación, por esa caída, por esa camioneta blanca donde Guido seguro iba dentro ella.

-Hey, Temo?, te estoy hablando- movía su mano sobre su rostro

-Ari..- su voz se quebró- es.. es.. mi culpa Ari..- su mirada estaba perdida, ni siquiera se atrevía a mirar a su novio

-Qué?, tu culpa? De que hablas Temo?-

-El accidente, mis hermanos, Tu, tu pierna...-

-Hey..Temo- guardo el celular, para tener ambas manos libres y sostener su rostro, obligándolo a verlo- tú no tienes la culpa

-Si Ari!..-sus ojos comenzaban a cristalizarse- yo debi haber caído en esa trampa de los gemelos, no él, de lo contrario tu estarías bien..-

-Temo.. basta- hablo con suavidad- tú no tienes la culpa de que Guido este loco- sus pulgares acariciaron su piel suave-

-Pero...- aun con esas palabras, Temo seguía sintiendo ese sentimiento de culpabilidad

-Pero nada amor... tu solo eres culpable de tenerme tan enamorado- aquellas palabras hicieron sonreír a Temo- de que este corazón- tomo una de sus manos para posarla en su pecho- se acelere cada vez que te tengo cerca, cada vez que pienso en ti, o menciono tu nombre- las lágrimas de Temo se hicieron llegar

-Te amo Ari- suspiro, mientras su mano acariciaba lentamente su pecho

-Lo sé- sonrió- y yo también lo hago, Te amo Temo-

-Creo..- retiro su mano- que esto debemos decírselo a los mayores, del correo-

-Sí, tienes razón, vamos-

Ambos se dirigieron nuevamente al edificio Córcega, en la entrada se encontraban Linda y Axel platicando, al parecer algo sucedía.

-Hola Prima.. todo bien?-

-Hay Ari, todos hemos estado recibiendo correos y..-

-Ustedes también?-

-Osea como.. a ti también te llego un correo Ari?-

-Sí, si si.. me llego un correo donde decía que Guido era el responsable de mi accidente-

-No inventes- Tanto Axel como Linda se sorprendieron, ellos habían estado durante el accidente, ahora todo encajaba- no solo hizo eso, también.. También cambio los resultados de ADN de mi Papá y Neto, y..- miro Axel

-Y qué?- el rizado estaba confundido- que mas ocurre?-

-Guido.. fue el causante de la muerte de Gabriel

-Qué?- sus ojos se abrieron como plato, miro a Temo quien se encontraba a su lado igual de sorprendido- pero.. como?-

-Pues.. se supone que lo enveneno con cianuro.. un veneno difícil de detectar-

Temo al escuchar eso, se puso a pensar, que si era capaz de arrollarlos con la camioneta, y que no funciono matarlos a todos, podría volver a tacar, y probablemente con el veneno, y nadie se daría cuenta, tomo su celular investigando antídotos.

-Pero tranquilos, que ya está en la cárcel-

-Mhh.. menos mal- Ari estaba aliviado- iré con mi madre, nos vamos Temo?-

-Si..- seguía sin retirar la mirada de celular, mientras leia, entraron al edificio, subiendo las escaleras-

-Que tanto haces?-

-Estoy investigando antídotos del cianuro..-

-Temo..- se detuvo en uno de los escalones- Guido ya está en la cárcel, no nos va a poder hacer daño otra vez-

-Si.. pero viene bien saber más sobre el tema-

-En eso tienes razón- en eso voces alteradas comenzaron a escucharse, ambos se miraron confundidos, caminaron de prisa hasta el piso donde vivían los Córcega y los Rey, se encontraban los niños y los adultos, afuera, mirando hacia la puerta, Polita, Blanca y Daniela se encontraban cargando cada una a un trillizo.

-Que ocurre?- Ari se asomaba pero no había nada interesante de ver, estaba la puerta del departamento abierto, pero todos se veían muy preocupados

-Al parecer Guido coloco veneno en el humificador de mis bebés, y ahora la abuela no reacciona- Daniela estaba algo alterada, y con justa razón, se había enterado la causante de la muerte de su marido, y que aun estando Guido en la cárcel podía seguir haciendo daño - Ya viene la ambulancia, pero debemos irnos para respirar aire fresco-

Temo recordó todo lo que leyó anteriormente, así que se hizo paso entre la multitud, debían hacer algo mientras la ambulancia llegaba.

-Doña Blanca, sabe dónde tiene el bicarbonato de sodio del pastel?- Ari se extrañó de ese comportamiento repentino de su novio

.Pues en la cocina, pero.. no entiendo-

-Es que no hay tiempo, necesito..-

Si, podría ser un antídoto- Andy uno de los duendes sabía lo que Temo trataba de hacer

-Daniela tienes oxígeno en el departamento?- Temo dirigió su vista en ella

-Si.. en el cuarto de mi abuela. Hay un tanque, se lo dio Juan Pablo-

Ok, necesito que alguien me ayude- camino deprisa adentrándose en el departamento

-Yo.. yo yo voy contigo- fue detrás de él- que piensas hacer?-

-Es lo que leí hace unos momentos, la vida de tu abuela está en riesgo Ari, tu ve por el tanque, y yo busco el bicarbonato-

-Si..si, está bien- se giró para ir a la habitación, cuando vio al doctor y a Pancho cargar a su abuela en una silla, en ese momento su pecho dolió, literalmente parecía que no tenía vida, quito esa idea de la mente, y fue directamente por el tanque,

Una vez afuera del departamento, El doctor Carlos se encargó de colocar el oxígeno a Imelda, mientras que Temo repartía el bicarbonato, para que todos comieran un poco y así prevenirse, Ari estaba arrodillado frente a su abuela, llorando, pidiendo que despertara, aquella escena conmovía a todos, pero Temo solo podía ver el amor verdadero, como después de todo el mal que le hizo pasar, aun ahí estaba para ella,

Los paramédicos se hicieron presentes, con una camilla, la recostaron, todos comenzaban a caminar fuera del edificio, para dirigirse al hospital, en diferentes vehículos. Temo y Ari se encontraban en la parte trasera de la burra, el brazo de Temo rodeaba la cintura del rizado, mientras que Ari posaba su cabeza en el hombro de su novio, llorando en silencio, sus manos, entrelazadas, en todo el camino se mantuvieron callados, tratando de mantener solo pensamientos positivos, aunque era algo difícil de llevar a cabo, Ari había vivido muchas veces las recaídas de su abuela, que temía que ahora ya no pudiera volver a hablarle.. o verla de lejos, porque platicar era casi imposible, aun asi el amor por ella no se iba, lo apoyo muchísimo antes, era su abuela.