Testosterona (Aristemo) [En Edición]

33-Viaje a Huatulco

El ambiente se encontraba relajado, con música de fondo del mix romántico que preparo la tropa unidos, mientras que Ari se encontraba recargado en el respaldo del sofá, Temo posaba su cabeza en el pecho de Ari, y su pierna derecha encima de las de Ari, prácticamente abrazando todo su cuerpo, con uno de sus dedos, hacia dibujos imaginarios en el pecho de su novio, disfrutando de ese momento a solas, ambos cuerpo eran cubiertos por uno de los sacos de los adolescentes.

-En que piensas..- susurro Ari, mientras le hacía piojito

-En nosotros..-suspiro, en su rostro se formaba una ligera sonrisa- en este momento...será un recuerdo que atesore por siempre Ari..- el rizado sonrió al escuchar eso, acercándose para besar su cabello, que en ese momento comenzaban aparecer sus chinos.

-Tahi..- Temo elevo su mirada para ver su rostro- con esto...solo compruebo lo mucho que te amo- mojo sus labios para luego sonreír, quedaron unos segundos mirándose, era un momento que habían disfrutado mucho, pero eso no quitaba el hecho de que volvieran a la realidad, tendrían su viaje a la playa, y ahora no para festejar su graduación, si no para prácticamente...despedirse.

Ya era tarde, así que decidieron cambiarse, antes de que otra cosa sucediera, mientras Temo se vestía, observaba aquella mancha en el sillón

-Estamos en problemas..- Temo imaginaba todo lo que vendría luego de que vieran aquella mancha en ese sillón tan fino

-Sabes..- miro hacia atrás donde se encontraba Temo- realmente eso no importa- Temo arrugo su frente, no sabía porque estaba tan quitado de la pena- ojala pudiera guardar esto como un recuerdo de nuestro acto de amor- Temo rio fuerte negando su cabeza

-Eres un loco Ari..- el mencionado asintió acercándose a él

-Loco por ti- tomo sus manos, acariciándolas mientras se sonreían

-Deberíamos agradecerle a Yolo no crees?- Ari solo asintió, saco su celular para marcarle

-Hola Tortolitos- contesto de inmediato - se divirtieron?- se sentó en el borde la cama

-Si...gracias- respondió Temo, ambos se encontraban sentados en la plataforma

-Llamábamos por eso... para agradecerte lo que hiciste por nosotros-

-No tienen porque, ustedes merecen ser felices, además- acomodaba su cabello frente al espejp-..de tener momentos a solas-

-Si..pero..- miro el sofá, Temo abrió sus ojos negando levente con su cabeza, Ari solo se encogio de hombros, tenia que decirle- hay un pequeño inconveniente

-Que ocurre?-arrugo la frente preocupada

-Hicimos..un pequeño desastre..y..umh..bueno- Ari no sabía cómo explicarlo pero Yolo comprendió a lo que se refería riendo levemente

-Relax!, déjenmelo en mis manos,-

-De verdad?- Temo se sorprendió

-Of course, miren..mañana tienen un viaje, ya me entere que van a la playa, así que, quiero que se vayan sin preocupaciones

-Gracias Yolo- dijeron ambos

-You welcome- sonrió- adiós, nos vemos mañana- ambos se despidieron de ella, colgando la llamada, estaban más relajados, aunque avergonzados porque Yolo vería aquello, pero preferían que fuera ella que alguien más.

Ambos fueron a su respectiva casa, sin duda sería una noche de insomnio, recordando como su primera vez acaba de suceder hace horas atrás, con el amor de su vida, y había sido increíble. Al dia siguiente, Ari se encontraba entusiasmado haciendo su maleta, habia tomado el lubricante y la caja de condones que le había obsequiado Yolo, colocándolo en la maleta, "Por si acaso" se mencionaba Aristóteles, encima de los productos colocaba ropa que separaba de su closet, encontrándose con la playera de básquet que llevaba por nombre "Temo" su sonrisa se esfumo, después de su viaje, su novio iría a México.

-Que sucede mi Aris?- Polita se recargo en el marco de la puerta al ver a su hijo con su rostro triste

-Quiero vivir este viaje al máximo.. porque...después Temo se va de Oaxaca, ma...lo voy a extrañar muchísimo- sus palabra reflejaban aquella tristeza que se desbordaba en su pecho, doliendo un poco

-Hay Ari..-suspiro acercándose a le para envolverlo en sus brazos.

Eduardo los ayudo con las maletas, y a llevarlos a la central de camiones, donde se verían ahí con los López, al entrar a la Central, Ari distinguió a Temo a lo lejos. Se acercaron a ellos, saludando a cada uno de la familia, las calcomanías, Sebastián, Susana, Pancho y finalmente a su novio.

-Ari!- todos voltearon a ver hacia la entrada, extrañados por el grito masculino, y al ver de quien se traba, su sorpresa fue mayor, era Audifaz, quien se acercaba a ellos- puedo.. puedo hablar contigo?- Ari miro a su madre, ella solo cerro sus ojos por un instante, le estaba dando la libertad de elegir, Temo acariciaba su espalda reconfortándolo, Ari asintió, le sonrió a Temo para luego alejarse de todos para hablar con su padre, todos estaban expectantes con lo que sucedía, no escuchaban lo que ocurría, pero a juzgar por las actitudes, parecía que Audifaz estaba arrepentido, y pedía perdón a su hijo. Unos minutos después, ambos se unieron en un abrazo, donde las lágrimas se hacían presentes en su rostro, al igual que el rostro de Polita, quien había soñado con ese momento, entrelazo sus manos llevándolas a su boca, Eduardo poso sus manos en su hombro, mientras que Temo con los ojos cristalino, sonrió, para luego mirar a Pancho, agradecido de tenerlo como padre, pues desde que se confesó, solo obtuvo amor y aceptación, y siempre agradecería eso.

Había llegado el momento de partir, el camión rumbo a Huatulco saldría en pocos minutos, así que se despidieron todos, caminaron hacia el camión, sentándose en sus respectivos lugares,

-Auch..- se quejó Temo al sentarse

-Todo bien?- dijo Ari al sentarse,

-Si si..- Temo estaba un poco avergonzado, desde que llego a su casa, había sentido un poco de malestar, cada vez que intentaba sentarse,

Desde la ventanilla, se asomaron para despedirse de su familia con la mano, Pancho sentía tristeza, porque parecía que este viaje llevaría a su hijo a la CDMX, y no a la playa, solo podía preguntarse ¿en qué momento Temo había crecido tanto?.

-Temo- hablo Ari quien se encontraba del lado del pasillo- seguro que todo estaba bien?-

Si Ari,-se acomodó mejor en el asiento- mejor cuéntame como te fue con tu padre-

-Sabes..- se recargo en el asiento del camión- no creí que este momento llegaría... que mi padre me aceptara..- lo observo con una sonrisa tomando su mano con suavidad- que aceptara nuestro amor- efectivamente, Audifaz, acepto la homosexualidad de su hijo, pero aunque no tuvo el valor de disculparse con Temo, si le hizo ver a su hijo, que el amor que le tenía, lo aceptaba, mientras fueran felices y se respetaran siempre.

Después de cinco horas de camino, por fin entraban a Huatulco, Temo quien mantenía su cabeza recargada en el hombro de su novio, observaron como el mar se veía a lejos, se retiró para observar a su novio, ambos con una sonrisa, entusiasmados por ese corto viaje.

Bajaron del camión tomando sus maletas, suspirando del ambiente ya diferente que se percibía en la playa, caminaron hacia los taxis, pagando para que los llevaran directo al hotel, estaban asombrados con cada cosa que veían a su alrededor, el auto paro frente a un hotel no muy grande, pero con vista al mar, bajaron yendo directamente a recepción.

-Hola buenas tardes en que puedo serviles?- una señorita pecosa, de cabello rojizo ondulado, los atendió, en ella mantenía siempre una sonrisa, mostrando cordialidad a los huéspedes.

-Hola, reservamos una habitación- hablo Temo

-A nombre de quién?- movió el ratón de la computadora, para iniciar a teclear

-Cuauhtémoc López- apoyo sus manos en el mostrador, la señorita comenzó a buscar el nombre, ya había sido pagado en su totalidad, así que tomo las llaves de la habitación

-Aquí tienen, cualquier duda, estamos a su servicio-

-Gracias- respondieron ambos, tomando su respectiva llave, la miraron por un momento para luego mirarse ellos, a partir de ese momento, les esperaba aventuras que se almacenarían en sus recuerdos por siempre.

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