{Narra Rubiuh *-*}
Me tiré al suelo al llegar a la planta. ¡No había hecho tanto ejercicio en mi puta vida! No sentía las piernas y por la cara de Vegetta y Willy, ellos tampoco estaban muy bien.
Miré arriba encontrandome con la reprochadora mirada del entrenador. Por lo que me levanté al instante tragando saliva. Era el típico entrenador con músculos imposible aunque tuviera 50 años que te hacía cagarte hasta los huevos. Me miró divertido por mi reacción de "ehte me va a matah" y miró a todos.
—¡En orden!—gritó a lo que yo me escondí tras Lara, asustado. Ella rió ante mi reacción.
—No tiene gracia, parece el jefe ese de "Avatar"—susurré asustado. Ella rió bajo. El entrenador nos miró mal por lo que volví a mi posición de "soy un militar bitches"
—Mi nombre es Óscar. Seré vuestro entrenador. Esto es secillo. Haréis ese circuito—señaló el circuito. Constaba de unas vallas, una piscina de barro (que asco dioh mioh D:) una tabla como las de los japoneses llenas de piedras calientes… mátenme antes de que tenga que pasar por ahí, lo último pero no lo más asqueroso era una montaña del alto de una ganasta—. Al terminar debereis coger una de esas banderas. El primero es el sujeto 660… ¿Samuel de Luque?
Todos nos giramos hacia él, quien tragó saliva y levantó su mano miedosamente. Óscar le indicó por donde tenía que salir. Nos miró.
—Ayudenme porfavor—le miramos tipo "suerte amigo mio D:" y se fue a la salida. Antes de que Óscar tocara el pito(no malpenseis D:<) susurró—. Esto en minecraft sería más fácil…
—tocó el silvato y Vegetta salió escopeteado. Pasó las puebras y al llegar a la cima y coger la bandera gritó—. ¡ALABAD A VUESTRO REY VEGETTITA! —pero por su cara creo que se arrepintió de haber dicho eso. Bajó deslizandose por la montaña y volvió con nosotros sonriendo, y hasta las cejas de barro.
Después le tocó a Angela, que se la pasó riendo. Isa entr muecas de repudio y gritos. Alex insultando hasta a los unicornios por escupir rainbows y Lara cómo si fuera lo más normal del mundo. Y llegó mi turno…
—Sujeto 666—el número con más suerte del mundo, que conste -.-''—. Rubén Doblas.
—Saquenmé de aquí—le susurré a Lara quien rodó los ojos divertida.
—Tranquilo, no es nada.
Nada una mierda de elefante con diarrea.
Me pusé en la salida y con el pítido salí corriendo cómo si no hubiera un mañana. Salté las vallas con mis piernas de Slender-Peter la anguila. Pero la gran mierda llegó.
—¡COÑO QUE ASCO MÁS GRANDE D:!—grité metiendo un pie en el lodo. Todos rieron—¡REIROS CAPULLOS PERO ESTO DA ASCO! ¡ALGO ME HA TOCADO JODEH D:<!¡KEMECAGOHENTOHCOÑOYA):<!
Al terminar de pasar ese líquido traido de Mordor, vino piedras traidas del infierno.
—¡COÑO ESTO QUEMA UN HUEVO! ¡ME VOY A QUEDAR ESTÉRIL DE PLANTA DEL PIE… AUNQUE SEA IMPOSIBLE! ¡ME SIENTO CÓMO UN INDIO… OKNO!¡MAMI SALVAME!
Terminé de pasar esas malditas rocas y con los pies doloridos subí la montaña. Cogí la puta bandera y fui con mis compis (que gay dioh ;D). Los que se descojonaban de mi.
—Problem bitches? —pregunté levantando mis manos.
—¡100 flexiones reclutas!—gritó el entrenador.
—Realy bitch? —gritamos nosotros, para ganarnos 100 flexiones más. Yupi :D.
Cuatro horas después…
Ibamos arrastrandonos cómo zombies. Literalmente. Por el edificio. Después de hacer la puebra estuvimos haciendo flexiones, sentadillas, abdóminales. Corrimos durante dos horas para después hacer mil y una cosas más que ni sabía el nombre. Sentía cómo si estuviera cargando a miles de Papadopoulos en la espalda. Y no es una bonita sensación >:(.
Caminabamos callados hasta que la cansada voz de Lara rompió el silencio.
—Creo que era mejor estar en la celda que fuera—pronunció Lara por lo que reimos. Pero terminando haciendo muecas de dolor. Hasta reir dolia :c.
—¿Confirmamos que no nos podemos ni mantener de pie? —dijo divertido Samuel.
—Confirmamos—dijo…¿ Willyrex? Apareciendo por el pasillo. Llevaba un traje militar algo rasgado y alguna que otra herida. Sonrió tranquilo mientras que todos. Menos yo, que no tenía ni puta idea de lo que pasaba. Tenían los ojos llenos de lágrimas.
—¡Guille! —gritó Isa feliz abalanzandose sobre Willy. Quien hizo una mueca de dolor para empezar a reir—. Pensé que no volverías… —susurró soltando algunas lágrimas.
—No te libraras tan fácilmente de mí chiquitina—dijo daldole un beso en la frente, por lo que Isa se sonrojó. Nos miró a todos—¿Nadie abraza al guerrero Willy?—todos sonrieron felices para ir corriendo a Willy, haciendo un abrazo grupal. Mientrasnyo estaba ahí parado con cara de "¿que coño? ". Willy me miró para sonreirme—. Me llaman el encantador de zombies—reí ante su broma. Este Willy es todo un loquillo.