Repeating Days- Ross Lynch

Capítulo 17

Días después...

Narra Leila:

Me sentía demasiado ansiosa y nerviosa el día de hoy. Por fin, luego de varios meses llegará Nathan con mis padres.
Al parecer todo está bien y es por eso que dejaron que Nathan regresara a casa.
Justo mi madre llamó hace unos minutos atrás para decirme que llegaron al aeropuerto de California y que venían para la casa.
Sabía que una de las reacciones que tendría era el llorar al ver a Nat, y no quería hacerlo, quiero mostrarme fuerte.
Cuando le mencioné eso a Ross, sus palabras fueron:

"Una parte de tu esencia es el ser sensible y está bien que llores, es una forma natural que las personas tienden a hacer cuando extrañan a otra, así que no reprimas tus sentimientos".

Tal vez le haga caso y me suelte a llorar en cuanto lo vea.

El timbre me hizo salir de mis pensamientos e hizo que aumentaran mis nervios.

Lentamente bajé las escaleras y caminé hacia la puerta de mi casa, tomé un respiro y la abrí encontrándome con mis padres con una radiante sonrisa en sus rostros y en los brazos de mi madre pude ver a mi hermano mirándome con una sonrisa tímida.

-¡Leila!- exclamó feliz estirando sus brazos para que yo lo cargara.

-Nat...- susurré con la voz entrecortada tomándolo en mis brazos.

Ambos nos abrazamos soltándonos a llorar.

Lo abracé fuertemente a mí, queriendo no dejarlo ir nunca.

-Te extrañe mucho- sollozó y yo respiré profundo tratando de controlar mi llanto.

-Yo más pequeño, yo más- besé su cabeza y pude sentir como mis padres se unían a nuestro abrazo.

Sin duda, nunca cambiaria este momento por nada en el mundo.

Narra Ross:

Estos días habían sido los más cansados, lo bueno de esto es que ya hemos terminado de grabar la segunda parte de Sabrina. Ayer fue nuestro último día de grabación y habíamos hecho una pequeña convivencia con todos los integrantes de la serie.

Hoy me iría a California, primero iría a ver a mis padres y a mis hermanos. Aún no le había dicho nada esto a Leila, quería que fuera una sorpresa.

Ahora me encontraba en el aeropuerto en Canadá esperando a que saliera mi vuelo a California. Al estar esperando mientras veía mi celular, pude encontrarme una de las fotos más hermosas que he visto, era una foto de Leila y su pequeño hermano, los dos abrazados y con una gran sonrisa, los dos lucían adorables.
Me alegraba el hecho de que Leila estuviera con su familia nuevamente, ella los necesita como ellos a Leila.

-Pasajeros con Vuelo a California, favor de abordar-

[...]

-Estoy feliz de verte, hermano- dijo Rocky encendiendo el auto.

Hace un par de horas había llegado a Los Ángeles y me sentía realmente feliz de poder estar con mi familia.

-Yo igual- sonreí bostezando. Había sido un viaje pesado, no había podido dormir en todo el vuelo gracias a que una señora no controlaba a su hijo, sin contar que este comenzó a llorar pidiendo a su madre un dulce.

Todo un caso.

-¿Leila sabe que estás aquí?- preguntó Rocky parando en un alto.

-No, quiero que sea sorpresa. Tengo planeado ir a visitarla la otra semana, no quiero arruinarle nada, quiero que siga pasando tiempo con sus padres y su hermano-