Capítulo 13

173 16 0
                                    

Wos

Me costó unos minutos entender su punto, pero tras pensarlo, caí en cuenta de que ella estaba a punto de morir y lo que menos necesitaba era que alguien no le dejara vivir lo poco que le quedara en libertad.

--No quiero ser un obstáculo para ti, y sea lo que sea que quieras hacer durante estos... -Tuve que contener las lágrimas y tragar el nudo que se formó en mi garganta, pues no quería que ella me viera derrumbado-. Meses, yo te apoyaré. 

--Solo quiero hacer todo lo que vosotros podréis hacer en ese futuro al que yo no llegaré. 

Cada que la palabra futuro tocaba sus labios y me forzaba a no imaginármela a ella en el mío las lágrimas se hacían más difíciles de contener. 

Los ojos de Iris se iluminaron, como si se hubiera acordado de algo importante. De repente se paró, y sin decir nada, salió de mi departamento para ir al suyo. Tras un par de minutos, la vi aparecer con una libreta pequeña entre sus manos.

--¿Qué es eso? -pregunté. Iris estiró su mano entregándome el cuaderno que sostenía.

--Léelo por ti mismo

Me quedé perplejo al leer una hoja llena de propósitos por cumplir.

Cuando leí esa lista, me di cuenta de que debía hacer lo imposible por conseguir ayudarla a poder cumplir el máximo número de propósitos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando leí esa lista, me di cuenta de que debía hacer lo imposible por conseguir ayudarla a poder cumplir el máximo número de propósitos. Sabía que no podía hacer nada para que ella se quedara más tiempo a mi lado, pero sí que podía hacer de ese poco tiempo que nos quedaba juntos más digno de recordar.

Pensé en cómo poder ayudarla.
Después de cenar, ella se fue a su casa, así que yo aproveché para investigar un poco.

No me llevó mucho tiempo averiguar cierta información sobre algunos de sus deseos.

Descubrí que en Barcelona se encuentra la atracción más alta y rápida de toda Europa. Esto fue un punto a mi favor. También recordé haber visto en la playa un cartel que decía que darían clases de surf.

Me acosté pensando en cuánto tiempo nos quedaría juntos, y en si cuando nuestro tiempo llegara a cero yo podría seguir viviendo aquí, tan cerca de su recuerdo, atormentandome por saber que en algún punto solo sería eso, un recuerdo.

Tras la pared| WosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora