The Night Curse

Atrapado

Intentando recuperar la compostura, Daniel se levanta pero se da cuenta de que esta como encerrado, abriendo los ojos con esfuerzo, lo primero que logra ver es un televisor viejo con interferencia, sin señal alguna. Observando bien la situación, Daniel se da cuenta que esta en una especie de jaula. Sin control alguno de la situación y queriendo gritar fuertemente se tapa la boca en un acto por instinto, sabiendo que si empieza a hacer ruido, lo que sea que este en ese lugar lo escuchará...

Con lágrimas corriendo por toda su cara, intentando analizar su terrible situación logra ver que esta en un pequeño cuarto, las paredes se están cayendo y hay un mal olor en el ambiente. 

Daniel ya tomando control de su cuerpo, nota que la jaula esta empapada de algo que parece ser sangre pero el esta seguro que no es de el, pues ya esta seca y en su cuerpo no nota cortes importantes más que los de la cara.

Observando cada esquina de la jaula en la que esta metido, observa que esta esta en peor estado de lo que se imagina, con un poco de fuerza logra tirar la puerta de esta, pudiendo salir ya.
Se quedó quieto un momento y empezó a observar pero esta vez el cuarto donde estaba, y había una especie de armario al lado del viejo y manchado televisor, Daniel curioso se dispone a abrirlo lentamente para hacer el menor ruido posible, pues no sabía en donde estaba ni estaba seguro de estar completamente "solo".
En el armario sólo había ropa, ropa que era la causa del mal olor de la habitación, pues también estaba manchada de sangre y con aspecto repugnante. Con delicadeza cierra de nuevo las puertas del armario, el chillido de estas perturbando a Daniel y rizando su piel. 
Luego de darle más vueltas al cuarto y no encontrar nada que le sea de utilidad, se arma con el valor para empezar a explorar el lugar en el que estaba encerrado.
Saliendo por la puerta de esa habitación y viendo para los 4 lados, se topa con un largo pasillo el cual era imposible ver el final de este pues, se hacía uno con la oscuridad.
intentando abrir puerta y puerta, se topa con la mayoría de estas cerradas a cal y canto, tachadas con tablones de madera y tornillos. Avanzando por el pasillo ve una que esta medio abierta, como si alguien la hubiera dejado así a posta...
Sin tener más opción entra por esa puerta, y se encuentra con otra habitación, muy parecida a la primera donde despertó, pero esta tenía algunos extraños detalles, escrito en las paredes con algo que parecía sangre "Saquenme de aquí". Cuando Daniel leyó eso se hizo la idea de que no esta sólo ahí dentro, y que tendría que prepararse para toparse con lo peor.

Revisando cajón por cajón, encuentra un pequeño encendedor, un zippo oxidado pero todavía funcional, objeto de gran utilidad ya que podrá iluminar su camino, pero también juega en su contra pues se expone de una terrible manera.
En esa habitación había una especie de ducto de ventilación, juntando unas pocas cajas logra subir y empieza a avanzar gateando, con el miedo de no saber a que se tendrá que enfrentar.

Yendo lentamente por los conductos para no hacer ruido, ve por unas ventanillas un cuarto, rápidamente identifica artilugios de carnicería como cuchillos grandes machetes y lo peor de todo, con un tono rojo desagradable y el hedor que desprendian era insoportable. Iba a seguir avanzando cuando escucha acercándose pisadas cada vez más fuertes, entonces decide quedarse quieto.

Pasó para la habitación, soltó en la mesa lo que parecia una pierna humana, agarró el cuchillo y empezó a cortarla como si esta fuera de seda, el sonido de la carne y el cuchillo entrando en contacto ponía cada vez más nervioso a Daniel.

Lo que parecía ser una persona, con una especie de máscara y una bata de carnicero, manchada en su totalidad de sangre estaba reduciendo lo que era una pierna de una persona en pequeñitos trozos de carne y tirandolos a lo que parecia una freidora por el sonido que emitía.

Daniel no podía ver más eso, en una mezcla de asco rabia y miedo quitó la mirada de la ventanilla y siguió moviéndose por aquellos ductos.

Al fin pudo encontrar otra ventanilla por la cual salir, y esta lo dejaba en lo que parecía un salón, Daniel sin opciones tiene que bajar para seguir investigando el lugar. Logra bajarse de los ductos y pone pie en tierra.