Capítulo 3: Magnolia.

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II M A D H O U S E II

Capítulo 3.

Magnolia.

Los enfermeros me ataron a una mesa por mis pies y muñecas. Yo estaba todavía llorando violentamente mirando fréneticamente como muchas caras se cernían sobre mí.

"Tu debes de ser el Doctor Styles." El neurocirujano aquí, el Doctor Holt, preguntó cuando la puerta se abrió y cerró.

"Sí, hola." El mismo doctor que me madó aquí, ¿Íba a observarme? ¿Por qué todo el mundo aquí es tan cruel?

"Pónte esto, Styles." El Dr. Holt ordenó. "¡Jayden!"

"En realidad es Jordan, señor."

"¡Como sea! ¡Tráeme una bata!" El doctor ladró mientras se ponía un par de guantes. "Buenos días, Magnolia."

Fruncí el ceño. "Vete a la mierda."

Él rió amargamente, me agarró de la barbilla firmemente, tan fuerte que tenía miedo de que me rompiera el cuello. "Un minuto las chicas llorando... Lo próximo berreando como un gato. Alguien puso bipolar bajo el nombre de esta chica. Justo al lado de esquizofrenia."

"No me toques." Escupí, mordiendo su pulgar hasta que saboreé la sangre.

El doctor gritó y me golpeó en la cara. "Muy bien. Vamos a acabar con esto." Dijo con saña. "Styles. ¿Te gustaría hacer los honores?"

"Claro." Él respondió lentamente. La cara del hombre joven se cernía sobre la mía mientras metía la goma en mi boca. Para prevenir que me ahogase con mi propia lengua.

Lo miré suplicante, que me deje ir, pero tristemente el Doctor me ignoró. Holt me sujetó de la barbilla mientras Styles me colocaba el transfusor de electricidad en mi sien y después gritó un "¡Listo!"

 Me sentí como si todos los relámpagos que alguna vez cayeron sobre la Tierra explotaran a la vez en mi cuerpo, mi vista desenfocada hacía dificil saber que pasaba a mi alrededor, pero sentía mi cuerpo moverse en fuertes convulsiones.

Los ví. Burlándose de mí. Arañando mi cuerpo. Uno se acercó a mi cara y gritó, era el grito de mi hermano pequeño. Imitado a la perfección.

 Sólo era el mal aliento de la criatura, parecida a una goma negra. No tenía ojos, o una nariz. Sólo alquitrán negro con la forma de un humano alto y delgado, con colmillos de grasa negra que goteaban como una vela encendida.

"¡No! ¡No! ¡Suéltame!" Grité intentando empujar al monstruo para aprtarlo, pero mis dedos sólo lo atravesaron. "¡Por favor, quitádmelo!"

"Traedme una inyección, ¡rápido!" Escuché por encima de mí. Pero los monstruos me estaban rodeando.

"¡AYÚDAME!" Un grito con la voz de niño pequeño de Timothy. "¡Maggie, por favor!"

"¡Oh Dios, haced que pare!" Chillé. "¡Quitádmelo!"

Alguien agarró mi brazo y después puso su mano en mi frente, su piel era caliente, y humana. Me calmó más que las pastillas sedantes. Me encontré con los ojos del joven doctor, Harry Styles.

Tenía unos hermosos ojos, el color de los árboles de Navidad. Como el que ponían en la sala común. Como la última cosa que vi en mi casa. Los demonios se hundieron en el techo, escondiéndose hasta que decidan atacar una vez más.

Mi respiración se tranquilizó hasta volverse normal. "Estás bien, ¿ves?" Harry sonrió.

Traté de asentir, pero con cada movimiento me dolía el cerebro, al igual que con cada pensamiento que pasaba por mi cabeza. "Agua... por favor." Le rogué.

"Oye, ¿me podéis traer un vaso de agua por favor?" Harry gritó por encima de su hombro.

"Sí, dame un segundo." Alguien gritó de vuelta, probablemente un guardia.

"No te dolió demasiado, espero." Harry bromeó.

Yo sólo le miré. "Todavía me duele." Afirmé. No confio en él. Claro, él muestra simpatía conmigo pero es sólo porque es nuevo. No ha visto la oscuridad que tengo. Pero lo hará.

Este hombre aprenderá pronto que escogió el trabajo equivocado.

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"Hey." Dije sentándome al lado de Niall en nuestra mesa de siempre.

"Hola." Él murmuró jugando con una pieza de ajedrez en sus manos. "¿Cómo estás, Maggie?"

"Me siento como la mierda." Dije. "Todo me duele."

Él me dió una sonrisa. "Bueno, pues sólo muestras lo mejor, no te ves mal."

Sonreí y cogí una cucharada de la sopa de pollo. "Gracias."

"No es nada." Niall suspiró encendiendo un cigarrillo y poniéndolo en su boca.

"Así que, escuché lo de esta mañana." Dije.

Él asintió con la cabeza. "Sí. Me pusieron una camisa de fuerza por unas pocas horas, pero nada más que eso."

Miré hacia el árbol de Navidad del hospital, decorado con guirlandas plateadas. No había regalos debajo de el. Si tenemos suerte, las monjas nos dejarán dormir una hora extra mañana.

"Se están haciendo más fuertes, Maggie." Niall dijo mirando hacia el techo.

Destrás de él estaba parada, bueno flotando, Agatha. Me miró esperanzada. Él está viniendo. Susurró en mi mente antes de deshacerse en el aire.

Miré detrás de Niall un rato antes de decir "Lo... sé."

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Tenemos a Magnolia en multimedia.

Cualquier duda preguntadme, no muerdo.

Y me despido porque voy a ver Sinsajo, ¿alguna de vosotras va? ¿habéis leído los libros? *-*

{Capítulo dedicado a @SarahiZelayaPineda}

¡Feliz viernes!

~Blake.

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