Un pitido a lo lejos me avisa que estoy en el lugar que mas detesto en el planeta tierra. Un frío corre mi cuerpo y me cuesta un poco abrir los ojos pero al final lo logro. Me estiro un poco pero me detengo al ver una máquina algo rara a mi lado y unos parchos pegados en mi pecho.
-¿Harry?- susurro nerviosa y me volteo rápidamente para buscar a mi salvación.
-Aquí estoy.- lo escucho y veo a mi otro extremo. Ahí estaba el en su silla. Se veía raro , el siempre lleva una sonrisa en su rostro pero ahora parecía ido. -¿Como te sientes?- agarra mis manos con las suyas y les da un leve apretón.
-Me duele la cabeza ¿Que sucede?- hablo confundida. La verdad es que no recuerdo en lo absoluto. Lo único que recuerdo es que caí en algo como si fuese un túnel negro.
-Te desmayaste. - suspira. -Tenemos que hablar nena.- lleva mis manos hasta sus labios y ahí deja un beso en el dorso de estás.
¿Tenemos que hablar? Eso no suena bien. ¿Porque me desmayé?
Harry abre la boca , va a hablar pero ahí en esos momentos abren la puerta sin tan siquiera tocar.
Parecía el doctor.
-Buenas tardes Perla. - me saluda y yo solo opto por sonreír. -¿Te sientes bien?- cuestiona a la vez que quita los parchos de mi pecho y apaga la maquina de el corazón.
-Si...gracias. - rápido respondo.
-Muy bien , solo fue un desmayo , te hemos revisado y todo anda muy bien. Puedes ya ir a casa , estás bien. - sonríe y luego de firmar unos papeles se retira de la habitación , y Harry y yo también no demoramos más ,y también emprendemos camino.
-¿Que teníamos que hablar?- cuestiono ya cuando estamos afuera de el inmenso hospital.
Harry suspira y me agarra de una mano.
-Ted...tus papás tuvieron un accidente. - susurra y quedo atónita. ¿Como es que no lo recordaba? ¿Como es que no lo sabía? ¿Como es que lo se ahora?
Un nudo se forma en mi garganta y cierro los ojos mientras siento que me voy desvaneciendo en el suelo.
No puede ser verdad.
-Dime que no es cierto. - susurro entre sollozos y el cambia la mirada.
-Bebé es lo que más quisiera en este mundo. - susurra con voz entrecortada.
Mi corazón corre a mil y las lágrimas caen como cascadas por mis mejillas.
¿Como era esto posible?
-Están en estado grave y...no los aseguran.
Creo que ahí es mi final. Comienzo a gritar como loca y Harry pide ayuda.
-¡Mis padres! ¡Son mis padres!
-¡Perla! ¡Escúchame! ¡Debes tranquilizarte!- grita Harry entre llanto. -¡Ayuda! ¡Alguien que me ayude! - continúa gritando mientras que yo me revuelco en el suelo.
-¡Son mis padres maldita sea! ¡Ellos no pueden morir! ¡Harry no pueden!
Voy a salir de ahí pero unos brazos me rodean y me lo impiden. Veo de quien se trata y ahí me encuentro con Trevor.
-Ya esta...- me envuelve en sus brazos y acaricia mi espalda. -Todo va a estar bien.- me abraza fuerte y ahí me voy calmando poco a poco.
-Son mis papás...- susurro entre sollozos contra su pecho. -Mis padres van a morir , Trevor. - insisto.
-No , claro que no. - siento como besa mi mentón y un bálsamo cae sobre mi. -Vamos , tienes que tomar algo ¿Esta bien?- me deja libre poco a poco y yo solo opto por asentir.
Dejo todo a mis espaldas y entro nuevamente al hospital. Me sentía ida. Estaba completamente perdida ahora.
***
Mis padres estaban en coma y estaban en el mismo hospital donde yo me encontraba.
En lo actual estaba con Harry en sala de espera. Moría de frío y Harry me tenía en su regazo mientras me arropa con sus brazos.
-¿Quieres un té o algo?- me susurra con su voz ronca al oído y yo niego con la cabeza. -Debes comer algo. - acaricia mi mentón y yo cierro los ojos ante la sensación. Se sentía bien.
-Quizás luego. - susurro y me acomodo en su pecho. Recuesto mi cabeza sobre su corazón y sus latidos por alguna extraña razón me hacen sentir relajada.
-Todo va a estar bien. - dice y acaricia mi espalda.
Las ganas de llorar me invaden pero me aguanto. Debo ser fuerte.
Abro los ojos y levanto la mirada para entonces ahí encontrarme con sus bonitos ojos esmeralda.
-Nunca me dejes. - susurro y mi voz se quiebra.
El sonríe de lado y sin más ahí presiona sus labios contra los míos mientras me aprieta contra su cuerpo en un gran abrazo.
-Nunca de los nunca. - acaricia mi espalda. -Te amo. - susurra aún pegado a mi boca y una sonrisa se dibuja en mis labios.
-Te amo.- acaricio su rostro y el sonríe así dejándome ver sus hermosos hoyuelos. -Te amo como a nadie , Harry. - beso sus labios y el me contesta el beso enseguida.
Era increíble lo bien que el me podía hacer sentir en instantes
El carraspeo de una garganta nos hace despertar de nuestro pequeño mundo.
Veo a mi lado y quedo atónita. ¿Que es esto?
-Abuela...- hablo con temor. Miles de cosas vienen a mi mente y una de ellas es la más que me toca.
Mis papás en coma. Abuela aquí. Eso no es nada bueno.
Me volteo a ver a Harry y luce sorprendido.
Oh por Dios , no. No quiero alejarme de el.